Harry Potter Y El Cliché Interdimensional (sin editar)

Capítulo 1

Axel no dormía. No comía. No coqueteaba con Mayos.

Todos estaban preocupados.

En clases, tenía la mirada vidriosa y perdida mientras que en su tiempo libre se la pasaba repasando las cartas que le escribió.

Querida Cat:
No sabes lo que es estar en una nueva dimensión sin mi mejor amiga.

Hay un montón de chicas que me han coqueteado hasta que cayeron en la cuenta de que somos hermanos.

Alto incesto.

Harry sigue demasiado ocupado cómo para notarme. Como siempre.

Pero conocí una chica que te caería muy bien. Mayonesa. Te la presentaré cuando llegues.

Querida Cat:

Hoy hablé con el otro chico de otra dimensión. Se llama Mckenzie. Te caería muy bien, y seguro le coquetearías un poco, no me mientas, conozco tus hormonas.

Puedo notar desde lejos que Harry te necesita aunque no lo sepa. Mirar su cara es más deprimente de lo normal.

Mayos ha intentado animarlo, esa chica pueda animar a cualquiera, pero hecha de menos algo que perdió. Creo que a tí. Aunque claro, sé que no es posible pero...

La verdad es que lo hacías feliz, Cat, y sé que él a tí.

Por favor perdóname por cómo me porté el último día.

Querida Cat:

Mayonesa y yo hemos pasado toda la noche hablando. De verdad nunca me había sentido así, compartir la luna con alguien más. Romper todas las barreras que existen entre dos personas. Sentir que las palabras que fluyen construyen castillos.

Tranquila, lo de los castillos es una metáfora, no te creas que es mi princesa.

No estés celosa, no te estoy reemplazando. No creo que nadie pudiera reemplazar lo odiosa que eres.

Y así seguía.
Querida Cat, Querida Cat, Querida Cat, Querida Cat.

Cartas de pensamientos hacia su amiga.

Jugueteó con el guardapelo que le colgaba del cuello. Aunque le habían hecho un par de bromas de mal gusto por usar una joya femenina, Axel no tenía intenciones de quitárselo.

"Una verdadera amistad nunca se olvida".

Es verdad. Nunca la olvidaría.

Tomó un lápiz y abrió el cuaderno, quedaban únicamente dos páginas, esperaba que fuera suficiente.

Querida Cat:

Me duele saber que esta es mi última carta para tí y que no podrás leerla.

Al irte, no me diste tiempo de despedirme. De decirte que te extrañaré. De que eres la mermelada de mi pan, el trasero de mi silla, el cuello de mi jirafa.

(Perdona si mis analogías no son las más correctas, siempre has sido mejor con las palabras que yo).

Cathy, no habría sobrevivido a Hogwarts sin ti. No sé si lo haré ahora que no estás.
Siempre nos hemos complementado bien, yo el cerebro, tú la personalidad. El dúo dinámico se convirtió en un individuo.

No estoy seguro de poder soportarlo.

Te llevo colgada de mi cuello, para no perderte, para no olvidar tus rasgos, no me perdonaría si ocurriera.