Capitulo 5

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Sé que tarde o temprano tendré que volver, pero no sé si querré exponer a mis hijos tampoco sé si me encuentro lista para verlo de frente.

-Si no quieres lo entenderé Ariadna, yo solo quiero ayudarte

-No es eso, claro que acepto tu ayuda pero las cosas están bien en las empresas de mi padre, ahorita no tengo motivo para ir -se aleja y saca unos papeles, con sumo cuidado los extiende en una mesa que se encuentra en la sala -Creo que seria bueno que vieras eso -me aproximo a la mesita de vidrio.

Les miro y no creo que lo que estoy viendo la empresa de mi padre se está viniendo abajo, miro a Travis sin poder creer lo que esta sucediendo y lo que me extraña mas es el ver que Travis tenga estos papeles, me siento en uno de los sillones de cuero de la sala (Dios mío que hago) siento ganas de llorar, no puedo creer que lo que mi padre construyo por tantos años se este derrumbando.

- ¿Cómo sabes todo esto Travis?

- Cuando me fui del hotel no podía sacarte de mi mente Ariadna, sabia que eras un imposible puesto que estabas casada, averigüe cosas sobre ti no tienes que decir que esta mal, yo ya lo sé -sube sus manos a su cabeza parece algo frustrado -Después en las noticias apareció su ruptura y el compromiso de Sebastián, ahí fue donde decidí dar contigo, pero si soy honesto no pense dar contigo Ariadna -camina hacia donde me encuentro y se pone a mi altura, esta hincado mirándome directamente a los ojos -Algo no usual paso cuando te vi por primera vez, no te he podido sacar de mi cabeza, sabes siento que tengo un chance contigo - amor esa palabra que aun me duele decir, se que Travis no es igual que ese infeliz, pero no puedo abrir mi corazón no por el momento.

-No te negare que tenemos buena química Travis, pero hasta ahí yo no puedo y no quiero involucrarme con nadie -su mirada baja y mira el collar que me regalo y sonríe de manera coqueta.

-Todavía lo llevas puesto eso me da una esperanza

-Lo siento pero no quiero nada de romance, esa palabra esta fuera de mi vida, no solo por mi si no por mis bebés -se aproxima a mis labios y me da un delicado beso ( Como hubiera deseado haberte conocido antes que Sebastián ) -Creo que lo mejor será que me vaya a casa -abre sus ojos y me mira por unos segundos, al ver que no me va hacer cambiar de opinión se ofrece a llevarme a mi casa.

Miro el reloj y no son ni la una de la mañana, entramos al carro y en silencio nos dirigimos a mi casa, no quiero decir nada que pueda lastimarlo, me siento extraña tengo un presentimiento y saco mi celular, al abrirlo veo veinte llamas perdidas de Estefanny, mi corazón va a mil lo primero que pienso es que algo les paso a mis bebés.

-Travis necesito que vayas mas rápido -asiente y no dice nada mas, se que esta algo disgustado pero ahora lo primordial son mis hijos, nadie mas me puede importar, al llegar me despido de el con un beso en el cachete por su parte ni si quiera e vuelve a ver salgo del carro a toda prisa, saco las llaves y antes de meterlas me abren la puerta y mi corazón cae al suelo.

Mis ojos se comienzan a empañar y comienzo a sudar y mis nervios aumentan con el paso de los segundos, las palabras se quedan atoradas en mi garganta, la persona que esta al frente mío se hace a un lado dándome campo para pasar, como puedo paso y trato de calmarme pero no es asi cuando veo a mis hijos jugando en la sala, trato de controlar mi enojo.

-Hija mi Ariadna -me giro para encarar a la persona que se hace llamar padre, de la cocina sale mi madre y mi mundo poco a poco se viene abajo.

- ¿Que demonios hacen aquí? - no puedo creer que mis amigos los dejaran pasar los trato de buscar y los veo atrás de mi madre, solo pido al cielo que Sebastián no este aquí.

-No nos hables así hija, yo me moría podía por verte Ariadna tenemos mas de tres años de no verte, tenemos que hablar -esto es increíble por que no me dejan en paz, mi vida mucho mejor sin ellos, mi madre trata de acercarse a mi pero se lo impido.

Siento una enorme ira dentro de mi, miro a los chicos y entiende lo que les digo se aproximan a los bebés y se van mi madre no despega la mirada de ellos, y después me mira y sin mas comienza a llorar, mi padre no entiende mucho el llanto de mi madre, pero yo si lo sé me mira y respira profundo.

-Ariadna esos...esos son mis nietos -mi padre jira su cabeza y me encuentro entre la espada y la pared, las lagrimas comienzan a salir de mis ojos.

-Esos no son tus nietos, les voy a pedir con la poca paciencia que tengo que se vayan de mi casa

-Hija por Dios dime si esos son tus hijos y los de Sebastián -el escuchar su nombre me altera mas de la cuenta.

-¡NO TE ATREVAS A NOMBRAR A ESE INFELIZ EN MI CASA! Él y ustedes no son bienvenidos en esta casa -mis padres lloran al igual que yo.

-Somos humanos hija todos cometemos errores -suelto una carcajada falsa por su comentario.

-Claro eres tan humano que dejaron que celebraran su fiesta de compromiso en la que era mi casa -mis padres palidecen ante mis palabras, seguro no esperaban que les dijera eso.

- ¿Cómo sabes que Sebastián se va a casar? -niego varias veces y me seco las lagrimas mis padres no tienen remedio.

-El como ya no importa, nada de lo que tenga que ver con ese es importante y si ya terminaron su atormentado discurso les ruego que se vayan -mi padre respira profundo, sabe que no cambiare de opinión no estoy lista para volver y en dado caso ellos no necesitan saberlo tampoco.

-No sabes lo que dices Sebas estuvo dos años buscándote sin parar, hija el esta demasiado arrepentido y cuando sepa que es padre de dos bebés hermosos dejara su compromiso - y es ahí donde mi poca paciencia se va por la ventana ( Jamás dejare que Sebas conozca a mis hijos, no voy a permitir que los dañe )

-Escúchame bien ese infeliz ¡JAMAS! Sabra de mis hijos te lo estoy advirtiendo ellos son solo míos y de nadie mas, todos ustedes me dañaron y jodieron mi vida es lo mínimo que pueden hacer por mi, y ahora si no los quiero escuchar mas ¡LARGO DE AQUI! -comienzo a echarlos y cuando se van me derrumbo en el suelo llorando ( ¿Cómo es posible que lo sigan defendiendo? ) ni si quiera una disculpa, nada pero si defienden al ser mas despreciable de todos, siento dos brazos arrullándome y después siento otros dos, al alzar la mirada vero a mis dos amigos llorar conmigo, no se en que me momento mis ojos se van cerrando y con ellos mi odio por todos los que me dañaron y me hicieron lo que soy ahora.

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Hola mis amados lectores!! Aquí les dejo otro capítulo, espero que les gusten 😊 sigan comentando y votando 😘😘😘

Descubriendome "El regreso"  2° TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora