Capítulo 39

287 29 3
                                    

Llego a casa y me bajo del coche inmediatamente, no quiero que nadie me vea por estos lugares, al menos no por un tiempo, no quiero que esa mujer llegue a mi casa, la creo capaz de venir y puede darse cuenta de mis pequeños, al entrar escucho la sonrisa de mis angelitos y sonrío, al entrar mi hermosa Sarita se encuentra sentada en las piernas de Travis una incomodidad se instala en mi cuerpo inmediatamente.

-Buenas Ariadna -mi hija al verme estira sus bracitos para que la alce.

-¿Como estas Travis? -inmediatamente sostengo a mi pequeña y con sus manitas sostiene mi cara y me mira de manera juguetona.

-Bubu -sonrío al escucharla balbucear y sin mas le doy su adorado peluche.

-¿Donde se encuentra mi otro angelito y Estefy? -ni si quiera levanto la mirada.

-Salió, me dijo que llegaría en un par de minutos -siento como se levanta y camina en dirección a mi -¿Por qué estas tan rara Ariadna? -siento como comienza a caminar hasta chocar con mi espalda, su respiración se encuentra en la base de mi cuello y unas inmensas ganas de vomitar se apoderan de mi.

-Sabes perfectamente lo que me sucede no hace falta que te lo diga de nuevo -me parto y coloco a mi pequeña en el suelo con varios juguetes.

-De hecho fuiste tu quien hablo si mas no recuerdo, pero no me dejaste decirte absolutamente nada -niego con la cabeza (menudo idiota) me giro quedando justamente enfrente de el.

-No se cuales son tus intenciones Travis pero déjame y te digo algo que conmigo y la gente que quiero no te metas -me acerco mas a el y lo señalo con mi dedo, siento tanta cólera que no puedo controlar lo que sale de mi boca, ver como sonríe de manera burlona definitivamente no me ayuda -Te voy hacer una pregunta y mas te vale que me digas la verdad ¿Qué es lo que quieres?

-Esa respuesta es fácil Ariadna -me mira de pies a cabeza y se muerde el labio inferior -Te quiero a ti pero esta vez para siempre -abro mis ojos y mi pulso se acelera en sus ojos veo algo que no me esta gustando en lo mas mínimo.

-¿Como puedes decir algo asi? Si sabes que la persona que esta contigo en estos momentos es mi mejor amiga cretino -comienzo a caminar hacia el sillón para poder ver a mi pequeño y asi poner espacio entre nosotros, pero al parecer el señorito no entiende y se sienta quedando frente a mi.

-No te niego que Estefy es una mujer increíble y le tengo cariño, pero eso no se compara a lo que siento por ti Ariadna -agarra mis manos y no sé que decir sus palabras han cortado las mías.

-Sabes perfectamente que no puedo hacer nada con respecto a lo que siento Travis -sus ojos destellan enojo y por un momento me da miedo de ver que tal vez y solo tal vez estoy conociendo al verdadero Travis.

-Déjame ser la persona que despierta a tu lado la que te ayude con tus hijos, lo que siento por ti es tan inmenso que seria capaz de darle mi apellido a tus hijos -suelto sus manos y me levanto (esto se esta complicando mas de lo que tenia pensado)

-Te agradezco absolutamente todo lo que haz hecho por mi, pero mis hijos ya tienen un padre Travis y ese es Sebastián -agarra la silla en la que estaba sentado y la tira quedando de la sala a la cocina, me susto por su acto y Sarita comienza a llorar descontroladamente, inmediatamente me acerco a ella y la cargo en mis brazos.

-Ese estúpido no merece a tus hijos ¡NO MERECE A NADIE!

-Te suplico que bajes la voz por que estas olvidando que esta es mi casa, no me tienes que recordar lo que Sebas ha hecho recuerda a quien se lo hizo, pero aun asi mis hijos tienen derecho a crecer con su padre es algo que no lo negare por ambos lados -veo como esta tratando de controlarse respiro profundo, no dejaré que nadie me intimide -Aparte este asunto no es de tu incumbencia asi que si no tienes mas que agregar me gustaría que te fueras y cuando estés calmado regreses.

Descubriendome "El regreso"  2° TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora