El lunes por la mañana, Mizu esperaba en la puerta de casa a sus hermanos para ir a la preparatoria.
-¡Mizu-san!- ella se volvió.
-Buenos días, Gou.
-¿Y ese ánimo?- dijo al fijarse en sus ojos hundidos.
-No duermo muy bien desde el viernes.
-Ya, ni duermes, ni comes, ni nada- dijo Kako saliendo de casa- venga, vamos.- Por el camino, Mizu bostezó muchas veces. Gou le preguntó a Kako qué le pasaba, pero ella dijo que tenía mucho que estudiar esos días. Aún así le extrañó que estuviera tan deprimida. Llegaron a clase y estuvo a punto de dormirse en varias ocasiones. A la hora del almuerzo, subió a la azotea y se sentó en su sitio normal, intentando aparentar tranquilidad, lo que menos quería era que le preguntasen de nuevo qué le ocurría.
-¿Y esa cara, Mizu-san?- dijo Nagisa.
-No tiene buen aspecto- acompañó Rei.
-Es que tuve un...- miró fugazmente a Haru y se le llenó el corazón de culpabilidad-...problema.- El pelinegro no tenía mucho mejor aspecto que ella, unas grandes ojeras enmarcaban sus ojos azules. Se mordía el labio cada vez que la oía, para recordase a sí mismo que debía olvidarla, y cuanto antes mejor.
-Deberías comer algo, Mizu-san.
-No tengo hambre, Nagisa, gracias.
-Pero podrías enfermar si no comes.
-De verdad, no quiero nada- Rei intentaba obligar, junto a Nagisa, a comer a Mizu. Makoto observaba a Haru y a la chica, sabiendo lo que había ocurrido entre ellos, podía notar la tensión. Finalmente, Mizu aceptó a comer algo.
A la hora del entrenamiento, Haru y Mizu escogieron carriles completamente opuestos, entre ellos quedaban Nagisa, Rei, Makoto y una calle libre.
-Makoto- llamó Gou cuando este terminó una serie.
-¿Qué?
-¿No sabrás por casualidad que les pasa a Mizu-san y a Haru-chan, no?
-¿Porqué lo dices?
-Los tiempos de hoy de los dos son pésimos.- Se los enseñó, realmente eran malísimos, un minuto una serie de cincuenta Mizu, y Haru, cincuenta segundos, no era normal.
-Hablaré con los dos cuando terminemos-. A mitad de la práctica llegó el entrenador Sasabe, que empezó a corregir a los chicos.
-¡Haruka, da las brazadas más fuerte!¡Mizu, sube más los codos con la braza...! Makoto, ¿Qué les pasa a esos dos? No están en forma hoy.
-Ninguno ha dormido muy bien.
-Ah, eso no es bueno-. Al final, cuando todos se fueron, Makoto retuvo a Haru y a Mizu.
-Oídme... no me voy a meter en los problemas ajenos, si estáis enfadados, tenéis que resolverlo vosotros- empezó, Mizu miraba a la izquierda, sosteniendo su codo con una mano por la espalda, Haru sólo miraba en otra dirección evitando pensar en la chica y el discurso de Makoto no es que ayudase precisamente- pero procurad que vuestro conflicto no afecte a la escuela o el club ¿sí?
-Sí, Makoto- Mizu no sabía como se había enterado el ojiverde, pero tampoco tenía intención de preguntárselo. Haru solo volvió a meterse en el agua. Sin ninguna palabra más, Mizu se fue al vestuario para volver a casa, entró en la pequeña habitación aparte y se puso el uniforme. Al salir, Makoto y Haru ya terminaban, así que decidió marcharse rápido.- Hasta mañana- de despidió secamente, Makoto le devolvió la seña y se fue. Pero tras la puerta de la preparatoria le esperaba una sorpresa- ¡Ah!- alguien la retuvo por los codos contra la pared- ¡Suéltame! ¡Nagisa!- él le tapó la boca.
-¿Me prometes que no saldrás corriendo?- ella asintió y la soltó.
-¿Porqué has hecho eso?
-Quería preguntarte algo
-Hay otras formas para preguntar ¿sabes?
-Lo siento, Mizu-san.
-Bueno, ¿Qué querías?
-Acompañarte a casa ¿puedo?
-Vale...- comenzaron a caminar y cuando se sentaron en el tren- ¿Hoy no te vas con Rei?
-No, hoy voy a hacer los deberes con Kako-chan.
-Ya.
-¿Sabes...? Creo que me gusta.
-Deberías decírselo a ella, no a mí.
-¿Pero no le parecerá repentino?
-No creo, pero debes planearlo bien.
-Bien, gracias, Mizu-san... oye...¿os ha pasado algo?
-No, mis padres están bien y los hermanos...
-No, no, me refiero a Haru-chan y a ti-. Mizu no contestó, precisamente lo que su cabeza le pedía era que se olvidase del asunto.-¿Mizu-san?
-Eh... no, nada, no ha pasado nada.-Salieron y fueron a casa de la chica.
-¿Y porqué os habéis puesto tan lejos en el entrenamiento? Además, nos os habéis dirigido la palabra en todo el día ¿Porqué?¿Porqué?
-Casualidad- fingió tras pensar un momento.
-Imposible, había un carril libre al lado de Haru, te podrías haber puesto allí.
-Me puse en el primero que vi-. Contestó abriendo la puerta.
-¡Pero si era la última calle, no pudo ser el primero!
-¡Kako, tienes visita!- gritó para no seguir oyendo al rubio. La chica bajó corriendo a saludar y Mizu decidió hacer sus deberes en el jardín, los otros dos subieron a la habitación.
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Ok! Varias cosas:
1: Feliz Navidad!(aunque sea un poco tarde)
2: En dos capítulos (es decir el de la semana que viene no, el de la siguiente) Haru y Mizu harán las paces.
3: ya sé que es un poco corto, pero no estoy en casa y el internet es limitado u.u
4: Voten y comenten (sí ya se que algunas quieren patearme y cortarme la cabeza, pero aún así comentad) honegae.
Ya ne!
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Haru x OC (Free!) [En Pausa]
RomantizmMizu es una chica normal de Iwatobi con un problema familiar, cuando conoce a los chicos del club de natación, su vida se sumerge entre entrenamientos, familia, amigos y puede que algo más... LEMON próximamente...