Lack-two llevaba dos años en aquella sala. Solo deseaba salir de ahí, ver el tan ahora adorado sol y sentir la prometida libertad. Quería reencontrarse con la niña del sombrero, a la cual empezó a amar en secreto, esperando ser este sentimiento ocultado de los ambiciosos adultos. Odiaba solo dibujar sus sueños, pesadillas y traumas, hacer exámenes pesados y entrenar en una sala a la que no sabía cómo llegar, dado a que siempre que iba a hacer esto último, la mujer que le traía la comida y se llevaba todos los papeles en los que trabajaba le pedía dulcemente —Lack-two llegó a creer que realmente era por lástima— que cerrara los ojos y lo guiaba hasta dicha sala.
No supo porque, pero la mujer de negro —a la que a veces veía como una madre, pero irónicamente familiar para él— apareció súbitamente en la habitación junto a otro hombre igualmente familiar.
—¡Lack-two, toma los papeles en los que estés trabajando! ¡Algo malo le ocurre al edificio! — Gritó la mujer para jalar la mano del infante de siete años.
—¿Qué ocurre?
—Bueno niño, el edificio se está quemando. Tenemos que sacarte de aquí.
Los dos adultos empezaron a correr. El hombre sujetó los papeles y la mujer jalaba al niño. El edificio entero ardía en llamaradas rojas, naranjas y amarillas. Un escombro bastante grande cayó encima de los tres. Lack-two vio una pequeña luz producida por una lámpara de bolsillo. Gracias a la luz, pudo ver con claridad algo que era tan confuso para él.
—Lo…r… No quiero ...pedir.. Te a….
—.na… Yo… ...bien .. .mo.
Aunque fuera poco audible la conversación, entendió lo que esos adultos sentían el uno por el otro cuando los vio unir sus labios. Lack-two no quería ver a nadie más morir, no lo soportaría. Sin saber cómo, el niño empezó a patear escombros hasta abrir un pequeño túnel. Con bastante dificultad, Lack-two arrastró a los dos adultos para sacarlos del edificio en llamas. Se levantó al estar enfrente de unos tablones de madera, su último obstáculo. Empujo la madera hasta que esta cedió y arrastró consigo a esos policías hasta afuera. Unas enfermeras empezaron a revisar a los heridos, y lo último que hizo Lack-two fue desmayarse.
Cuando despertó, estaba de nuevo en una habitación blanca. La única diferencia era que la mujer que le traía la comida venía acompañada del que Lack-two identificó como su novio o esposo. Además, había un pastel en vez de la comida que él comía normalmente y una PokéGame Boy Advance, con juegos de Fire Emblem, The Legend of Zelda y Pokémon Mundo Misterioso.
—¿Q-qué pasó? — Preguntó Lack-two confundido.
—Nos enteramos de tu cumpleaños, y en gratitud por salvarnos, te estamos celebrando tú séptimo cumpleaños. — Respondió la mujer con amabilidad.
—Felicidades por tu ascenso niño, te lo has ganado. — Añadió el hombre a su lado. —Ya podrás ver hasta dónde vas y podrás salir más a menudo de este lugar.
Lack-two sonrió. —Gracias, su secreto está a salvo conmigo.
Ambas personas entendieron lo que quiso decir el infante y se sonrojaron, agradeciéndole por esto mismo.
13. Por la Persona Que Amas
—No sólo él ha estado aquí. Él vivió aquí un verdadero cautiverio, peleando con el dolor que le causaban sus emociones durante tres años, jovencita. Eso es todo lo que pasa.
—Oh… ¿Cómo lo sabe? — Preguntó Whi-two extrañada.
—Yo le traía la comida y me llevaba papeles que él manejaba. Eso es todo. — Respondió la mujer con serenidad.
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Mi Motivo Para Sonreír - Corruptedshipping (Lack-two x Whi-two)
Подростковая литератураLack-two empieza a tener frecuentes recuerdos de su pasado y empieza a lamentarse por las cosas que ha vivido y por no poder evitar ciertas cosas. Pero la misma persona que despertó sus emociones, ahora será su motivo para sonreír.