BE MY ALPHA

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-¿Ya has pensando en que le vas a regalar?

-¿Regalar?

-¿Olvidaste el cumpleaños de tu omega, cuñado?

¿Por qué demonios no se había acordado de que mañana era el cumpleaños de su manager? Dejando que era su ¨novio¨, y que trabajan juntos casi por cinco años, fuera de eso ¿Qué clase de ser humano se olvida de algo tan importante para otra persona? Se sentía horrendo, mal. Todas las mentiras que había estado haciendo y diciendo no se compararon a la sensación amarga que experimento al decirle a Soyoung que siempre tenía algo preparado para sorprender a Jinyoung.

Lo cual, como todo, era una farsa.

Gracias a dios le creyeron y con eso pudo implorar a la mujer que le ayudara a mantenerlo entretenido hasta que fuera de noche. Necesitaba de todo el tiempo posible para pensar e idear algo que pudiera ser ¨ideal¨ en un festejo de cumpleaños. No tenía ni puta idea de qué, pero algo ahí afuera podría hacer mas la diferencia que presentarse y decirle que no se había acordado, pero que le compraría un regalo mañana a primera hora.

Soyoung le había prometido entretener a Jinyoung hasta las nueve de la noche, lo cual le daba tiempo de hacer una cena y buscar un regalo.

Tenía el tiempo a su favor, o al menos así se sintió hasta que escucho la puerta principal abrirse y un golpe fuerte de aroma a omega en celo lo azoto. Jaebeom llevo su mano rápidamente a su nariz, controlo respirar por ella un par de segundos mientras miraba con sorpresa como Soyoung llegaba arrastrando jadeando y casi inconsciente hacia dentro de la casa.

Su primer instinto fue acercarse, pero se paró en seco al sentir como su nariz volvía a absorber el aroma dulce de la manzana y la fresa. Su cuerpo se tenso y su cordura comenzó a estar en juego cuando capto en qué situación estaba metido ahora.

No solo estaba luchando internamente con su alfa, sino que también tenía que mantener su papel como novio y tratar de no delatarse al mostrarse algo nervioso por ver por primera vez a su manager en ese estado.

-¿Qué? ¿Qué paso?- Trato de no sonar sorprendido o afectado. Dudaba haber conseguido disimular, Soyoung lo miro y parecía estar viendo como se controlaba por debajo de su expresión seria.

-Está en celo ¿No ves?- Dijo, casi suspirando.

Arrastro como pudo a Jinyoung por la casa y Jaebeom a muy mala gana espero por detrás, dando pasos cautelosos. Deseaba con fuerza arrebatar al hombre de las manos de la omega, pero sabía que ese pensar venia desde dentro de su ser y que si lo hacía era muy probable que terminara sin pene por aprovecharse de Jinyoung.

Porque eso sería ¿No?

Un omega en ese estado era vulnerable, y él como alfa sabía que podía usar todo eso a su favor. No lo haría, sin embargo. Respetaba suficiente a Jinyoung como para no pasar la línea entre ellos, pero no iba a decir que esto era fácil o que no le costaría porque sería estar mintiendo. ¡Mierda que le estaba matando el olor y los quejidos suaves del hombre! Su animal interno gruñía y rasguñaba por complacer los deseos de ese aroma.

Se sentía muy atraído, pero su cordura le decía que estaba mal y que luego todo se volvería peor si no mantenía sus pantalones arriba.

¡Esta vez tenía que mantenerlos arriba y negarse!

- Se que dije que lo mantendría entretenido, cuñado. Pero es que el subió al auto y comenzó a sentirse así. De repente comenzó con la fiebre y no supe que hacer, todo lo que note eran sus feromonas aflorando.- Se notaba preocupada. Jaebeom podía afirmar que ella estaba sintiendo también el dolor que Jinyoung experimentaba en este momento. Quizá una cosa de hermanos. Quizá una cosa de omegas, pensó.- No podemos hacer nada con la naturaleza, es por eso que volvimos. Es mejor que este aquí y no afuera corriendo peligro.- Lentamente, entraron todos a la habitación. Soyoung camino a la cama para dejar a su hermano encima de ella y con cuidado lo acomodo antes de girarse a ver a su acompañante.- Tú eres su alfa, no hay lugar más seguro que contigo. Él te necesita, cuñado.