El cielo entre tus brazos 《Rami Malek》

Capítulo VI: "A mil millas"

Rami.

Después de un fin de semana lleno de emociones y fastidios de mis amigos, llegó el lunes y las grabaciones. Mis días se habían convertido en una rutina, entre semana tenia puro trabajo y los fines de semana veían a mis amigos pero nos quedábamos en casa. Lo más interesante de mi día era tomar mi café en aquel local. Aún sigo riéndome de las locuras de aquellas dos chicas. Admiraba la amistad que tenían, estaban juntas todo el día y hacían cosas descabelladas. Eran como las mejores amigas típicas de las películas.

El día de hoy, curiosamente, no fui a la cafetería solo, mi amigo Ben me acompaño sin fines de lucro aparentes, pero sabía que me engañaba.

-Deja de comerte la crema batida-exclama Persy de una forma divertida hacia su amiga.

-Es solo un dedazo para saber si esta buena, no me delates-se rio y luego se giró hacia la caja encontrándose con nosotros.

-Oh vaya, los salvadores de las chicas en aprietos-exclama Laurie al vernos. Todos nos reímos.

-Hola-salude mirando a la cajera.

-Hola. ¿Qué les podemos servir? Lo que quieran lo invita la casa-dijo ella.

-Genial-exclamó Ben-Quiero un frapuchino grande de chocolate-Persý toma el vaso más grande y escribe el nombre de Ben.

-Yo lo mismo de siempre-tomó el vaso de cartón y escribió mi nombre.

-Bien, del otro lado se los entregan,

-Gracias-dijo mi amigo y se fue del otro lado observando a la otra chica. Miré hacia atrás notando que el lugar estuviera solo para poder charlar.

-Es la primera vez que te veo acompañado aquí-dice cuando la vuelvo a ver.

-Yo creo que cupido hizo de las suyas-masculle y miré al par a un lado, Laurie le tiró crema batida en la cara al rubio, y Persy se carcajeo. Volví a verla, cuando notó que la observaba se sonrojó ante mi mirada.

-Queríamos invitarlas este viernes en la noche a salir, como en una cita doble.

-¡Sí!, ¡Karaoke, por favor!-grita Laurie.

-Oh, bueno yo-exclama Persy-Tendré que pedir permiso.

-Yo te lo doy. bebé-le dice su amiga.

-Estaremos viéndonos de igual forma-le sonreí y guiñé un ojo. Laurie nos extendió ambos cafés y tomamos asiento en mi mesa habitual, observando como llegaban los demás clientes.

-Creo que estás enamorado, amigo mío-dice mi amigo por lo bajo, mientras observamos a las chicas. No lo negaba, y tampoco dudaba que estar con Persy, sería como ganarme la lotería.

Antes de marcharnos, el mismo chico que coqueteaba con Persy, entró por la puerta y se dirigió a la caja con una sonrisa.

-¿Quién es esa copia barata de Zac Efron?-dice Ben refiriéndose al chico, que honestamente, era un poco atractivo.

-Hola, frapuchino de caramelo con doble crema batida y doble caramelo-dice hacia Persy tratando de coquetear.

-¿Eso te sirvo, Scott?

-Sí, a menos que quepas en un vaso de esos.

-Deberías pensar en cambiar de técnica sino te funciona.

-¿Estás diciendo que tengo oportunidad si digo otra cosa?

-Tienes oportunidad de pedir otro café, el que quieras del menú.

-Es que sigo sin verte en el menú-Laurie se carcajea al fondo.

-Ese es mi chiste, Scottie, yo coquetee con ella primero y nunca cayó. Cuando quieras te doy mi lista.

-Un día, Persy, no tengo prisa-dice de lo más calmado y se marcha. En seguida, Ben y yo hacemos lo mismo.

-Rayos, hermano, te quieren comer el mandado. Y ese tipo está súper dotado.

-A Persy no le interesa, tú lo viste.

-Sí, pero un día terminará aceptándolo para que deje de joder y se dará cuenta de lo que se había perdido.

-Gracias, amigo-dije con sarcasmo.

-La buena noticia es que tú le gustas, se le nota a mil millas de distancia. Así que amala, amala y no la dejes ir. Así decía mi abuelita-me reí.

-¿Y qué pasó con Sophie?

-Yo solo digo los consejos, no los aplico-me carcajee-Es poco ético-sigue la broma riéndose también.