Capítulo 19

8.4K 882 926
                                    

Trate de ignorar el hecho de que pase un año entrenando con tres fugitivos y cambiando de localización cada dos semanas, para regresar a esa vida del estrés ante los exámenes, tareas y proyectos finales

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Trate de ignorar el hecho de que pase un año entrenando con tres fugitivos y cambiando de localización cada dos semanas, para regresar a esa vida del estrés ante los exámenes, tareas y proyectos finales. El estar de vuelta a casa, se sintió muy diferente. Pase tanto tiempo en otro ambiente, que me sentía demasiado extraña con lo que antes me solía ser familiar. Era incómodo.

Mi padre se detuvo frente a la escuela y antes de que tuviera oportunidad de salir del auto, comenzó a darme un largo discurso de que era normal sentirme extraña ante mi regreso y que todo saldría bien. Tenía mucha razón, pero tuve que interrumpirlo antes de que dijera algo más, sabiendo que nunca saldría de este auto y me despedí para ir corriendo al edificio.

Al momento de cruzar esas puertas, me sentí totalmente desorientada. No sabía qué hacer y me quede parada al inicio del pasillo, viendo a todos los estudiantes pasar y como si, a cada segundo, mis pies estuviesen siendo succionados por el suelo.

«¡Muévete, idiota!», me dije a mí misma para salir de mi pequeño trance, dándome una pequeña cachetada para concentrarme.

Sostuve las correas de mi mochila, en camino a la dirección para pedir mi horario y recibir la nueva contraseña de mi viejo casillero. Cuando ya tuve todo en mano, fui corriendo a la cafetería para ver si estaban mis amigos. Apenas cruce las puertas, la voz de Betty Brant me alarmó y vi como la chica corría en mi dirección con sus brazos abiertos hasta tirarse encima de mí, causando que casi nos cayéramos al suelo. Le di varias palmadas en la espalda, avisándole que me soltara y que dejara de pisarme el pie derecho, a lo que se separó para verme con una sonrisa.

No lucía tan diferente a como recordaba, excepto por el hecho de que le ganaba un par de centímetros más, así que ya no estábamos del mismo tamaño. No lo había notado antes, pero estaba segura de que ahora podía alcanzar a Peter.

Solo tenía que ver si Michelle no me humillaba en altura.

—¡No lo puedo creer! ¡Pensé que Peter estaba bromeando cuando dijo que regresarías!

—Peter es malo para bromear.

Sonreí burlonamente, pero ignoro lo que dije para jalarme de la mano y llegar frente a los demás. Vi como Michelle y Ned discutían, Peter estaba al lado del segundo, con mala cara, de seguro por lo que estaban discutiendo. Me senté a un lado de Michelle y esperé a que terminaran para saludarlos, pero cuando notaron mi presencia, me miraron, volteando la cabeza al mismo tiempo con unas caras totalmente serias.

—Millie, ¿piensas que Batman es mejor que Superman? —habló Ned, a lo que le mire extrañada.

—¿En serio? ¿Así es como me recibes después de un año sin verme?

—¡Contesta la pregunta!

—¡Batman!

—¡JA! ¡Tengo razón! —exclamó Michelle, pasando su brazo por mis hombros—. Es bueno tenerte de vuelta, Mills.

I NEED YOU || Peter ParkerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora