Ya es el segundo día que estamos aquí y el penúltimo. Sólo hemos estado dos días y siento que a sido la mejor idea el venir aquí y desconectarnos por completo de todo nuestro alrededor ya qué claramente todas necesitábamos un poco de esto.
Estábamos sentadas en la arena las tres juntas mientras hablamos de bobadas y nos acordamos de las pequeñas cosas buenas de nuestra infancia. Viajar en el tiempo para mi no era lo mejor pero no podía negar que si tuve uno que otro buen momento al que pueda refugiarme.
—...Entonces esa vez Clairo y yo estábamos corriendo porque tres perros nos seguían a como de lugar— contaba mientras soltaba risas exageradamente fuertes—. Cuando estábamos a punto de llegar a mi casa los perros nos alcanzaron y nos mordieron el trasero. Hasta el día de hoy esa mordida me duele.
Al escuchar esa historia se me fue inevitable no unirme a la risa de Alaska junto con la de Ker ya qué no recordaba aquel día hasta hoy. Fue bastante doloroso, pero no faltaron los llantos junto a las risas en aquel momento.
—No recordaba haber reído tanto en estos años—. solté aún riendo
Todos a nuestro alrededor nos miraban como si estuviéramos locas, unos nos miraban mal, otro nos miraban divertidos y otros sólo miraban.
—Oh por Dios, esto a sido lejos lo mejor—. opinó Ker
Así pasamos la mayor parte del día. Ignorando a los chicos que nos gritaban cosas o se nos acercaban, nadando y comiendo lo que se nos antojase. Había llegado la tarde y ya teníamos que volver ya qué llamaron a Alaska de su trabajo avisando que será imposible el que pueda faltar mañana por la noche así qué tendremos que volver antes para que al menos alcancé a descansar un poco.
Salimos del agua y al llegar a nuestro lugar tomamos nuestras cosas y fuimos a una duchas para bañarnos y vestirnos. Al terminar de hacer aquello nos dirigimos hacia el apartamento y al llegar las tres fuimos a empacar para minutos después encontrarnos en la sala y cenar para estar volviendo a casa.
—Bueno, han sido sólo dos días los que hemos estado aquí pero lo e pasado de lo mejor—. opino Alaska
—Sí, a pesar de lo poco que fue las risas no faltaron en ningún momento—. le di la razón
Mientras comíamos en un cómodo silencio pensé en Matthew el cual no lo he llamado desde ayer por la noche y que a pesar de eso, el tampoco me a dejado ni un solo mensaje. Intente no pensar en eso pero se me fue inevitable no preguntarme que estaba haciendo por lo que opte sólo en mandarle un mensaje preguntando que tal había sido su día.
Para mi estos dos días han sido los mejores en mucho tiempo y a pesar de que no he dado más detalles de lo que pasamos aquí a sido sólo y únicamente porque son momentos únicos los cuales sorprendentemente no tienen palabras algunas para ser explicadas del todo.
—¿Le dijiste que volveríamos antes?—. preguntó Ker mientras tomaba un poco de su Té
—No, no quiero decirle— respondí casual—. Será sorpresa.
Las dos chicas a mi lado asintieron y siguieron comiendo en silencio mientras miraban un punto fijo. Siento que está salida será la última por un largo tiempo ya qué desde mañana junto a Matthew nos adentraremos a la búsqueda de lo que a hecho su padre. Tengo miedo de lo que pudiese salir de ahí, tengo miedo si alguien llegase a salir herido o si algo sale mal, tengo temor de que esto pueda afectarnos a todos de cierta manera pero no hay vuelta atrás, al menos, no ahora.
Al terminar me levanté junto a las chicas y cada una lavó lo que ocupo y cuando estuvimos listas fuimos todas al pequeño living de la casa y nos recostamos mientras nos tapabamos con una pequeña manta.
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Destruidos.
Teen FictionClairo era una chica la cuál vivía de las drogas y aquellas sustancias que te van matando con ese mismo fin, morir. Matthew era un chico igual de destruido que ella, con demonios dentro intentando ignorar todo tipo de inestabilidad y a eso recurre a...