Nine

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Relame sus labios a cada segundo volviendo estos mas rojizos que de costumbre, sus pies caminan con rapidez por los pasillos aunque estos se sientan como gelatina. Visualiza su casillero a pocos metros de él junto a Jimin, quien, al parecer, lo estaba esperando.

Bien Taehyung, cálmate

Lanza un profundo suspiro tomando las correas de su mochila con presión, una sonrisa se apodera de sus labios y llega hacia su amigo. Solo tiene que actuar normal, Jimin no se dará cuenta si actúa con naturalidad, mientras su tic de lamer tanto sus labios no aparezca, tal vez no se de cuenta.

—¿Por qué tus labios están rojos, TaeTae?—el susodicho pega un pequeño salto al ver a su mejor amigo tan cerca—¿Qué estuviste haciendo?

—¿De qué hablas?—se felicita al no fallar con su voz, pero al parecer el rubio no se lo dejaría fácil.

—¿Me vas a decir que no sabes por qué no tienes los labios rojos, que están así por tu tic ese de pasarte la lengua o la verdad?—el rubio se cruza de brazos viendo como su hermano de otra madre se pone rígido.

—N-No es la da importante. De verdad—busca en su casillero sus libros de álgebra, biología e historia, las cuales son sus primeras tres horas de clase—. Sabes que tengo esa costumbre de pasarme la lengua—coloca en su mochila los libros y cierra su casillero. Comienza a caminar hacia su primera clase que comparte con el rubio, pero al ver que su pequeño amigo no se encuentra a su par voltea, y se encuentra con Jimin cruzado de brazos.

—Taehyung—es extraño escuchar a Jimin llamar a su mejor amigo así, ya que siempre están de empalagosos con los apodos que le dedican al otro, pero si lo llaman por su nombre, y más con un tono grueso en su voz, está molesto, no le gusta que le mientan y se da cuenta de ello o lo usa para manipular con su ternura—. Si no me quieres contar esta bien, no te obligaré. No tengo derecho a presionarte—el rubio hace un puchero con ojos de perrito abandonado; una adorable carita de apreciar para el resto, pero para Taehyung es manipulación extrema.

El peligris rueda los ojos divertido antes de tomar el brazo del rubio y reanudar la caminata.

—Te contaré idiota, solo no te vayas a reír—Taehyung muerde con algo de fuerza su labio.

—Tae—ambos ingresan al salón de álgebra, faltando unos tres minutos para auge esta empiece. Sin mucho esfuerzo llegan a sus asientos y se acomodan—, a menos que una aspiradora no te haya pasado por los labios, o hayas besado a un mono, obviamente no me reiré—. Ríe al decir lo último, haciendo que Taehyung baje la cabeza avergonzado y el rubio abra los ojos en grande—¿¡besaste a un mono!?—sus ojos no parpadeaban al tener toda la atención el el Omega menor.

—¡Jimin!—exclama bajo—, claro que no bese a un mono, por Dios—rueda los ojos—. Mira, esta mañana BoGummy quiso llevarme a la escuela, y claro que acepté—un lindo sonrojo sube a sus mejillas—, estaba a punto de darme mi primer beso, como tanto lo había soñado, pero no se como Jeon idiota Jungkook apareció y me sacó de allí.

—Gracias a Dios—suspira aliviado y se queja al recibir el golpe de Tae, quien lo mira con reproche—¿Qué? No me mires así TaeTae, sabes que no me agrada BoGum, además ¿que tiene que ver Jungkook con tus lab-¡Oh!—exclama al unir puntos en su cabeza—. ¡Jeon te b-—una de las suaves manos del omega menor cubren su boca, per el rubio la aparta—. Jeon te besó, es más, te dio tu primer beso—sonríe en grande, como si le hubiera contado el mejor chiste del mundo.

—Pero yo no quería que el fuera mi primer beso—sus labios se fruncen en un tierno puchero y cruza sus brazos sobre su pecho. Fracasando como siempre, no me sorprende se reprende el mismo.

¡Seas Idiota, Jeon! |KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora