CAPITULO DIECISEIS

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Se oyó un pequeño tumulto al otro lado de la puerta cerrada de su despacho, único refugio temporal en donde no tenía recuerdos de Kara.

Abrió la puerta, un poco contrariado, le hubiera gustado tener un rato más para él a solas.

*-¿Qué sucede?

*-Es vuestra tía señor, desea hablar con usted a pesar de que le dijimos que estaba ocupado.

Apretó los labios, la verdad no había esperado que la mujer aguantara tanto.

*-Dejarla pasar.

El se acomodó en su butaca, y cuando la mujer entro, la invito con la mano a que se sentara en la silla que había enfrente de su mesa de trabajo.

*-¿Qué sucede tía?

*-Sé que puede sonarte un poco histérico, ya que es la segunda vez en pocos días que he venido a verte por el mismo tema, pero tu tío sigue sin aparecer por casa y no está en la mansión, ya he preguntado a los sirvientes.

*-Por supuesto que no está en la mansión, pero podrías aclararme ¿Por qué pensaste tal cosa?

*-Desde el banquete de tu boda, no le he vuelto a ver. Pensé que había aprovechado para estar con su amante bajo tu techo aprovechando el gentío.

Su sobrino se inclinó hacia delante para incitarla a hablar.

*-Sé que es normal para los hombres tener amantes, pero tu tío, nunca había caído en esas cosas hasta hace poco. Llegue a pensar que sería un hombre fiel, porque ya a su edad no es un proactivo, ya sabes a que me refiero -- dijo la mujer enrojeciéndose – pero desde que esa mujer apareció, se volvió loco y un tanto descuidado, le descubrí casi al instante, pero me dijo que le daba igual, así que le pedí que guardara las formas delante de la gente, pero el aprovecha cada minuto libre para estar con ella. Reconozco que es más joven, más bella y más delgada que yo, pero si he llegado a ser lo que soy a sido a su lado, creo que me merezco no ser humillada en público.

*-Por lo que yo se tía, el esta cumpliendo una misión en tierras vecinas. Escribió un mensaje y pidió a uno de los sirvientes que te lo entregara, supongo que el muchacho se descuidó o el mensaje se perdió debido a las condiciones excepcionales de afluencia de invitados en la mansión. No le he visto en compañía femenina en estos días, es todo lo que puedo decirte.

Los ojos de la mujer le miraron atentamente, intentando averiguar si era cierto, finalmente apretó los labios y afirmo con la cabeza.

*-Creo que eres sincero en que no sabías nada de esta aventura de tu tío, pero algo pasa que no quieres decirme, te conozco desde los 5 minutos de haber nacido, eres honesto, inteligente y te quiero como a un hijo, así que confió en ti, cuando puedas decirme eso que callas te oiré, mientras viviré como si todo fuera normal.

La mujer se levantó y se acercó a él, ofreciéndole la cara, que el beso como siempre, con genuino afecto, después la vio salir.

*-Liam.

De entre las sombras salió su fiel amigo.

*-Piensas que toda esta trama viene de parte de esa mujer que embauco a tu tío, para llegar hasta ti y facilitar tu muerte.

*-Del mismo modo que lo has pensado tú.

La puerta se abrió de golpe sin preámbulo, dando paso al maestro.

*-Tu tío, ... amaneció muerto en su calabozo. Envenenado

Y de repenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora