Yo se que me amarás

Capitulo 38-Confrontación

Desperté lentamente y noté la pierna de Derek sobre la mía. No podía creer lo que había pasado la noche anterior, por un momento logré olvidarme de todo lo ocurrido...del besuqueo de James con aquella chica...mi nueva relación con Derek, pero ¿en realidad lo quería? ¿o lo estaba haciendo para fastidiar a James?

no era capaz de jugar asi con los sentimientos de Derek. sería demasiado cruel, pero ¿que podía hacer ahora? no quería romper su corazón no quería decirle que realmente no lo quería que solamente estaba borracha y no pensaba claramente.

No podía seguir así... tenía que hablar con el...pero no ahora. Necesitaba pensar, necesitaba aclarar mis ideas y mi cerebro.

me levanté lentamente para no despertar al chico, seguido de esto me metí en el baño y cerréla puerta con seguro claro, después de haber metido ropa y mis cosas personales... no pensaba salir a mi recámara con Derek dormido ¿qué tal si despertaba y yo desnuda? ¡Que horror!. Abrí el agua caliente y me fui desvistiendo... pensando y pensando en cómo hablar con él...como decirle las palabras con el mayor tacto posible para que no fuera sentirse tan mal.

Me metí en el agua y duré ahí un buen rato, me puse shampoo y me enjaboné lo mejor que pude. Tenía un dolor cabeza de los 1000 demonios y eso no ayuda mucho a mi cerebro. Acto seguido me

aplique el acondicionador y lo dejé actuar; tomé el estropajo y le puse un poco de jabón líquido corporal, me enjabone todo el cuerpo y luego me situé bajo el agua caliente.

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Después de alistarme salí. Derek seguía profundamente dormido así que salí de mi habitación con el mayor sigilo posible, quería evitarlo a toda costa así que fui a la cocina Y me encontré con la persona que menos deseaba ver ahora: James.

-buen día enana, ¿como amaneciste? -dijo amablemente. No contesté.

Estaba molesta por lo de anoche, lo único que veía en mi cabeza era a ellos comiéndose a besos no entiendo cómo pudo hacerme eso, aunque ya lo había dicho:

James y yo no éramos nada más que amigos en siquiera me había preguntado si quería ser su novia y yo ya me estaba achacando el papel.

Definitivamente pondría un alto así que opté por ignorarlo.

me serví un poco de cereal y me dirigí al comedor. La casa ya estaba como si nada hubiera ocurrido la noche anterior, Danielle es el colmo de la eficacia...en serio no puedo creer que ya teng- todo tan arreglado como si no hubiera habido fiesta, es una chica genial ahora entiendo porque papá la contrató, aparte cocinar delicioso limpia y muy rápido. James entró al comedor y se sentó a mi lado.

-¿Estás bien?

-aléjate de mí-susurré

-¿Qué ocurre Isa? -preguntó un tanto confundido

-James...yo te...¿te gusto? -pregunté en voz baja. James me miró Y se pasó una mano por el cabello quebrado.

-Isa, sabes que si...realmente me gustaría intentar algo bien contigo pero aveces eres tan voluble que ni yo mismo te entiendo

-¿Voluble?...-pregunté y sonreí

-Cuéntame -continué...-¿quién erea la chica con la que te estabas comiendo a besos anoche? justo aquí en la cocina...

La cara de James cambió por completo. Su sonrisa se desvaneció y tornó sus ojos un tanto duros.

-¿quién te dijo esa horrible mentira? -Arqueé las cejas y me levanté de mi silla.

-nadie me dijo nada James...yo te vi, te estaba buscando porque de repente te desapareciste de la pista como si nada...decidí venir a buscarte y te encontré aquí con ella...no dije nada porque no quería que luego vinieras a rogarme y ¿sabes que? estoy tan arrepentida de haberme enamorado de ti. Estar enamorada de alguien que ni siquiera le importó es lo más patético...alguien que es tán cínico como para decirme que quién me dijo esa mentira. Quién sabe qué otras veces me no has sido sincero conmigo y no puedo creer que me hayas hecho esto; ya lo sé..no somos nada pero de todos modos creí que teníamos algo. Y ¿sabes? yo también soy uns estúpida. Por haber besado a mi guardaespaldas...por haberlo usado para darte celos...Sus sentimientos hacia mi son reales...y yo lo usé para darle celos a una persona que ni siquiera le importo y que es un maldito desgraciado y mentiroso...no te vuelvas a acercar a mi..¿de acuerdo?... -no esperé respuesta. Salí de ahí antes de que me fuera a dar un severo ataque de enojo o algo así. ¿Cuál era el siguente paso?...HABLAR CON DEREK...no podía seguir hacerle eso..

Entré a mi habitación y me senté en el sillon individual. ¿Qué le diría? •Oye Derek, en realidad son una perra. no siento nada por ti..lo siento• Si, claro...seguro funcionaría...Me cubrí la cara con las manos intentando

concentrarme pero una voz me interrumpió.

-Hola...-Me destapé la cara. Derek estaba sentado en el otro sillón viéndome fijamente.

-Hey..-susurré. El se acercó a darme un beso pero bajé la cabeza y sonreí.

-¿Podemos hablar? -logré articular con voz extraña. Derek asintió lentamente y se acomodó en el sillón.

-¿Pasa algo?...¿Tu papá se ha dado cuenta? -preguntó alarmado. Yo negué lentamente.

-No...no es...no es eso

-Bien...¿entonces que pasa?

-Lo siento tanto...-dije y me limpié una lágrima que resbaló por mi mejilla.

-¿Qué? ¿porqué? ¿que ocurre nena? ¿porqué lloras? -me preguntó y me tomó la cara entre sus manos para verme a los ojos.

Maldita sea...era tan inocente que me daba rabia haberle hecho esto a el...no lo merecía.. no no no...

-Derek...yo...esto, yo...todo fué un error... -El me soltó y me miró extrañado

-¿A qué te refieres?

¡PIENSA! dícelo lentamente para que lo digiera mejor...no no no...suéltalo rápido...pero no tan rápido si no no te entenderá y lo tendrás que repetir...

-Yo...yo no...-hice una pausa. ¡Dilo YA!...respira. respira. respira. No te alteres, todo estará bien... me armé de valor. Lo miré a los ojos y solté:

-Derek...no siento nada por ti...-Bien...creo que estuvo bien..lo dije..ya, estaba hecho...ahora...¿qué seguía?...