Amelia: Infinity War

XXII. El segundo chasquido

Ya que todos tenían la cabeza un poco más clara después de aquel trágico acontecimiento, los vengadores que quedaban se encontraron en un círculo mientras admiraban el guantelete que ya portaba las seis gemas del infinito.

—¡Boom! —gritó Rocket haciendo que Bruce, Tony y Amelia saltaran del susto, ganándose una mala mirada por ello— ¿qué? El guantelete está listo, la pregunta ahora es ¿quién hará el chasquido?

—Lo haré yo —contestó Thor al mismo tiempo que se dirigía con precisión hacia el guantelete y los demás se levantaron enseguida

"Hey" "no, no, no" "espera" "alto" dijeron todos al mismo tiempo mientras intentaban detener a Thor que no se veía dispuesto a ceder, por lo que Amelia tuvo que provocar la presión sobre su pecho una vez más.

—Deberíamos al menos discutirlo —dijo Scott

—Puedo hacerlo... por favor déjenme hacerlo —Amelia seguía arremetiendo el escudo contra él para que no hiciera algo inadecuado— ¡déjenme hacer algo bueno!

—Si hay algo en lo que todos estamos de acuerdo y sin quitar el hecho de que el guantelete tiene energía para iluminar a un continente es que no estás en condiciones de hacerlo

—Déjame ir —pidió el asgardiano a la chica mientras intentaba moverse y ella solo puso más presión sobre él— sentarnos alrededor de esa cosa y mirarlo no hará que los demás vuelvan, ¿puedes liberarme? —Amelia así lo hizo después de verlo a los ojos unos segundos— soy el vengador más fuerte, me corresponde hacerlo

—Si de eso se trata yo también puedo hacerlo —Thor se volteó frustrado negándose a esa posibilidad y no fue el único— el escudo se concentraría en mi mano, no puede pasarme nada

—¡Eso no lo sabes! Podrás ser una mejorada pero no te quita lo humano. Morirías por eso... no podemos permitirnos perder a alguien más

—Paren —escucharon la voz de Bruce mientras se acercaba a ellos— si hay alguien que debe hacerlo soy yo... ninguno de ustedes lo soportaría

—Bruce...

—Tal vez es la razón por la que fui creado

—¿Estás seguro de esto, Banner?

—No, pero la mayor parte de la radiación es gamma... es como si esta fuera la razón de mi existencia.

Los demás presentes cruzaron una mirada entre ellos y fue el capitán quien asintió para que lo hiciera pues tenía razón, aún cuando el poder de Thor era inigualable, o Amelia tuviera un escudo que la protegiera, era Hulk quien podría soportarlo mejor.

Así todos formaron un círculo a su alrededor con una distancia prudente; Thor se había posicionado adelante de rocket, Steve se cubría a sí mismo con su escudo de vibranium, Tony utilizaba uno de su armadura para protegerse junto con Clint y Amelia había creado su escudo del tamaño suficiente para cubrir a Pietro con ella. Hasta ese punto ninguno se había dado cuenta que alguien más del equipo faltaba, estaban tan concentrados viendo lo que estaba a punto de suceder y soñando con que aquello funcionaría.

Tony activó el protocolo ocho para evitar que cualquier accidente saliera de la base y entonces Bruce tomó el guantelete para ponérselo en el puño. La imagen que vieron fue aterradora, Hulk parecía estar usando toda su fuerza física y mental para soportar el dolor que el poder de las gemas le causaban, pero seguía bien, seguía vivo y eso les ayudó a calmarse cuando por fin alzó el brazo para realizar el chasquido.

—Recuerda, Banner —dijo Tony mientras se aseguraba que estuviera en orden— solo tráelos de vuelta, sin cambiar nada de los últimos años.

Él asintió y entonces cerró los ojos mientras el chasquido fue lo único que escucharon y una resplandeciente luz los cegó por varios segundos. Cuando recuperaron la vista, el guantelete estaba al costado de Bruce quien yacía adolorido y apenas consciente en el piso de la base. Todos corrieron hacia él, Pietro pateó el guantelete lejos de todos y se acomodaron al rededor de Hulk a por su ayuda.