Narrador omnisciente:
Izuku sentía que todo su mundo se iba para a bajo cuando el doctor le dio el diagnóstico de su madre, Cáncer de mama logró a escuchar. Era increíble como un segundo puede cambiar completamente tu vida.
¿Ahora que haría?
A penas había cumplido la mayoría de edad y comenzaba a prepararse para hacer el examen de la universidad, no estaba en sus planes un cambio tan drástico como el saber que la vida de su madre está en juego.
¿Cómo pagaría el tratamiento?
La familia Midoriya siempre fueron de escasos recursos, contaban con pocos ahorros pero no una fuente de ingresos externo al trabajo de su madre ya que su padre los abandonó cuando era un recién nacido.
¿Su madre moriría?
Esa pregunta no puede progresarla por el momento.
Pensamientos abrumadores era lo que atormentaban sin descanso a nuestro pequeño pecoso pero una agradable noticia se avecinaba.
Pasaron los días, los meses e Izuku pudo conseguir un trabajo estable para comenzar el tratamiento de su madre. Era un bar nocturno cerca de la carretera donde se asentaban los motociclistas para pasar el rato, su vecina era la dueña, le consiguió un buen trato con tal de que la obedeciera en todo.
Nada podría salir mal...
¿Cierto?
Hola queridas seguidoras y lectoras, perdón por no actualizar. Pero como recompensa habrá otro capítulo a parte de este.
Espero que les haya gustado.
Kai kai