Fate/Stay Night: Un Nuevo Servant

El Rey de Héroes

Lancer: [¡Gae Bolg!]

Klaus: [¡Hageshī Kaminari!]

Con mi lanza envuelta en Electricidad fui a por el Servant enemigo, quien venía hacia mí. De repente vi como su lanza comenzó a hacer ángulos imposibles para ese arma mientras iba a por mi corazón; pero ya había visto esa técnica cuando luchó contra Saber, solo debía esquivarla.

Entonces cuando la había esquivado, vi como si el tiempo fuera hacia atrás y la lanza carmesí de Cu Chulainn tomó otro ángulo distinto para ir de nuevo hacia mi corazón. Pero ya estaba preparado para eso y esquivé el segundo ataque, quedándome a la distancia suficiente como para atravesar el corazón del contrario de una estocada mientras que él solo pudo hacerme un corte en la mejilla.

Lancer: H-Has esquivado totalmente mi ataque, pero ¿sabes qué todavía no estoy muerto?

Habló el peliazul mientras escupía un poco de sangre y agarraba su arma con las fuerza que le quedaban.

Klaus: Sí, un héroe como tú no moriría solo con esto. Pero ya no debes pelear más.

Le susurré mi deseo y sus ojos se abrieron como platos.

Lancer: ¡¿Piensas usar tu deseo para eso?!

Asentí y pude ver la cara del Servant de ropajes azules pasar de una de asombro a una de felicidad. Soltó una pequeña risa y retiré a Cenibel de su pecho, viendo como seguía en pie a pesar de aquella herida mortal, sangrando por la boca y por el agujero que tenía en el pecho.

???: Patético, Lancer.

A una gran distancia de nosotros se encontraba el cura de la iglesia con una cara de decepción hacia su Servant.

Lancer: Ja, así son las cosas Master, me ha tocado perder.

???: Típico de un perro como tú.

Esa voz ya no era la voz del cura. Detrás del religioso salió aquel héroe de armadura dorada.

Lancer: ¡¿EH?! ¡¿A quién llamas perro?!

Con la poca vida que le quedaba, agarró fuertemente la Gae Bolg y se lanzó a por el rubio, pero no pudo dar ni dos pasos antes de un gran número de armas le atravesaran.

Gilgamesh: Zashu.

Cura: Al fin nos hemos librado de Lancer.

Gilgamesh: Sí, ahora solo queda acabar con-

Parecía que el Servant dorado no se había dado cuenta de mi presencia, pues se sorprendió mucho al verme.

Gilgamesh: ¡Onore!

No sé que había pasado pero el contrario hizo aparecer mucho portales detrás suya mientras yo me ponía en guardia. Las puntas de las armas asomaban por los portales y estaban a punto de salir disparadas, cuando...

Cura: Detente Gilgamesh, nuestro principal objetivo es el Grial, y ya tenemos lo necesario para invocarlo.

Gilgamesh: ¡Kotomine!

El Servant aceptó a regañadientes y los portales desaparecieron mientras mi expresión pasó a ser una de felicidad, al ver a Cloe, sin un rasguño, pero de odio y terror por saber que estaba en las manos del rubio.

Klaus: *Aún está bien. ¿Podré salvarla a tiempo? ¿Seré lo suficientemente rápido?*

Esas preguntas daban vueltas en mi cabeza, pero antes de poder actuar los dos se fueron sin que me diese cuenta. Me quedé allí paralizado como un idiota hasta que la voz de un chico me devolvió a la realidad.