16-01-20.
09:37
Llevo despierta bastante tiempo. No me he movido porque te tengo justo encima. Estás apoyada en mí y yo te acaricio la espalda. Como cuando era verano. Como cuando no me dolía nada.
Nat. De verdad que odio estar así. Yo no quiero estar así. No quiero ser así. Pero me puede. Me supera pensar que me han tocado. Me siento sucia constantemente. Me duele todo. No puedo casi respirar. Me cuesta moverme. Y cuando me le encuentro no soy capaz de nada. Soy como una marioneta. No puedo estar así. Me supera todo esto, Nat. Necesito ayuda. Y sabes perfectamente que me cuesta la vida pedir ayuda.
Te despiertas y yo sigo pasando las yemas de mis dedos por tu espalda. Sigo pensando que eres preciosa aunque ya no sienta casi nada.
-Buenos días Albi.
-Hola Nat.
-¿Has podido dormir?- Me encanta que te preocupes. Pero en serio, déjalo, da igual. No hace falta. Total. Para qué. Esto no vas a poder quitármelo.
-No mucho. Da igual. Me estoy acostumbrando.
-Esta noche nos vamos. Tú y yo. Y no volveremos a saber nada más de esto. Te lo prometo.
-Tus promesas no me convencen del todo- Levantas la cabeza extrañada. Perdón. No soy así. No quiero que te sientas culpable. Es la rabia. Es la impotencia. Es el dolor. Es todo eso lo que me come y me hace hablarte así. No es verdad. No me hagas caso. Por favor Nat.
-Albi...
-No, no digas nada. Las dos sabemos que fue tu culpa. Si no te hubieses movido de allí seguramente a mí no me habría violado. Yo no tendría este dolor que llevo. Yo no me sentiría una puta mierda. Ni querría morirme ahora mismo. Es todo tu culpa y las dos lo sabemos. Pero no lo decimos porque ay, que te sienta mal. Pero, ¿Sabes qué? Que seguro que yo me siento peor que tú ahora. Estoy destrozada. Me estoy muriendo por dentro y no fuiste capaz de sacarme de aquí. No quiero saber nada, Natalia. No puedo más.
-A-Alba...- Y tus lágrimas ruedan por tu cara con fuerza. Sollozas y no te miro porque todo lo que te he dicho no es verdad. No lo pienso así. No sé qué me pasa. Me siento fatal. Pero no sólo por eso. Por tratarte así. Estás aquí todo el rato. Me calmas. Me acaricias. Me cuidas. Te preocupas. Y yo te lo agradezco haciéndote sentir culpable. Natalia. Lo siento. Me duele todo. No soy yo. Te quiero.
-N-Nat... Lo siento... Y-yo...- Y me pongo a llorar. Joder macho. Esque estoy super contradictoria. Esta mierda me hace cambiar de humor constantemente. Me revienta hacerte sentir así. Perdón.
Me abrazas y no puedo dejar de llorar. Lloro en tu pecho porque es el sitio donde mejor me siento. Me siento fatal. No pienso eso de ti. De verdad.-Nat. Lo siento, y-yo... N-no soy yo...N-no pienso así...Pe-Perdón...- No puedo casi hablar de la llorera que tengo y tú me chistas y me acaricias la cabeza. Te quiero. Te quiero. Te quiero. Te quiero.
-Esta noche salimos de aquí y buscaremos ayuda amor. Vas a salir de esto.
No sé de dónde habrás salido pero eres la persona más bonita que existe. Te trato así y tú me acaricias. Me das refugio y me cuidas. Joder.
-Soy horrible.
-Eres preciosa- ¿Lo ves? Eres mi ángel.
-¿Cuál es el plan?- Te intentas alejar para mirarme pero yo me aferro a ti.
-No me sueltes- Susurro. Noto tu sonrisa y cierro los ojos sintiendo tus latidos- Cuéntamelo así. Por favor- Me abrazas mas fuerte contra tí y yo suspiro. Te quiero.
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𝑇𝑖𝑚𝑜𝑟 - Albalia.
Novela JuvenilNo sé qué pasa aquí. No entiendo nada. Me han traído a tu mansión. Y tú eres la que maneja el cotarro aquí. Estamos en el siglo XXI y nos tienen de nuevo como criadas. Como antes. Cuando trataban a la mujer como vientre de alquiler. O las maltrataba...