introducción

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parte cuatro

Los ninjas y los magos no se llevan muy bien siempre se discriminan entre sí y existen confrontaciones, mi madre quiere cambiar eso y que exista paz entre ambos lados por eso cada cierto tiempo visita ciudades en donde sólo viven magos para crear alianzas.

Siempre he admirado como a mi madre al lugar al que va la respetan y admiran por ser una mujer fuerte y segura, me pregunto si cuando yo sea reina me tratarían del mismo modo, seguro que no.

Un día llegó al castillo la noticia de que un demonio atacó un pueblo destruyendolo totalmente, por lo que le pedían ayuda. El nombre de ese demonio era Deliora.

Acompañe a mi madre ese día, el desastre era total no quedaba nada y al parecer los sobrevivientes eran mínimos, cualquiera diría que para una niña de 6 años era horroroso ver eso pero la verdad es que yo había visto cosas peores.

Pasaron los días y mis padres decidieron que seria bueno ir de vacaciones a Hokkaido para distraernos un poco y pasar un rato en familia.

Hokkaido es realmente hermoso, por eso mi padre amaba ese lugar. El frío era increíble a pesar de que mi vestido era grueso debía usar un abrigo y como siempre llevaba mi velo que cubría mis ojos.

Cuando ya desempacamos nuestras cosas mi madre le dijo a mi padre que podríamos ir a visitar a Ul. Yo me alegre mucho al oír eso, yo la adoraba ella era para mí como mi segunda madre siempre me visitaba y me enseñaba lo hermoso que era la magia de hielo.

Mis hermanos optaron por ir a jugar fútbol mientras mis padres y yo fuimos a visitar a Ul. Cuando llegamos ella se alegro mucho y nos hizo pasar a su casa.

- ¡vaya pero que sorpresa!-dijo Ul-

-lamentamos no avisar con anticipación que veníamos- dijo mi madre-

-no se preocupen, y tu pequeña -refiriéndose a mi- ¿como has estado?

-amm bien

-vaya veo que aun no te quitas ese velo de los ojos, sabes si sigues así no encontraras un novio

-déjame, además para que quiero un novio a los 6 años.-dije molesta-

Ul río.

-tienes razón me acarició el cabello- Fubuki, Sango vieron lo que sucedió en ese pueblo, con el ya saben demonio.

-Sango fue a ver como estaba la situación allá.

-es horrible lo que paso.

En ese momento hubo un silencio y Ul nos dijo que nos sentábamos en la mesa y empezó a hablar con un rostro muy serio.

-Tengo aquí a uno de los sobrevivientes

Todos nos asombramos.

-¿quien es? -dijeron mis padres

-en este momento no está aquí es uno de mis aprendices, su nombre es Gray Fullbuster, tiene la misma edad que Misaki.

- ¿y que paso con su familia? -dije

Ul suspiro antes de responder y dijo:

-a todos los mató Deliora.

-vaya -dijo mi madre

Después de tanto hablar mis padres se fueron a casa pero yo decidí quedarme un rato mas en casa de Ul.

-vaya -dice ella mirando por la ventana- al parecer ya llegaron.

-¿quienes?

-Gray y Lyon

Mire a través de la ventana y vi a dos niños en ropa interior.

-¿por qué están así con el frío que hace?

-es parte de su entrenamiento

- ya veo ... ¿quien es Gray?

-el chico de cabello negro

Por alguna razón no podía dejar de verlo algo en el me llamaba mucho la atención. Pase un buen rato mirándolo, observando cómo entrenaba.

-¿sabes? si le sacas una foto dura más me dijo Ul al oido-

- ¡ah! -sonrojada- no se de que me hablas

- no puedo ver tus ojos pero puedo ver que te sonrojaste.-dice sonriendo- ¿ si quieres te presento ante él?

-¡NO!... no quiero que sepa de mi.

- ¿ y por qué?

- porque... porque el ya ha sufrido mucho, y yo lo único que hago es traer la mala suerte -dije triste-

-veo que aun no superas eso ¿eh? esta bien no le diré nada de ti.

Al día siguiente también fui a ver a Ul y a escondidas veía a Gray entrenar, cuando él entraba a casa yo me escondia, así el nunca me vería.

Un día mirando a Gray por la ventana alguien me sorprendió

- ¡ hey!

Del susto casi en caí de donde estaba.

- ups! lo siento no quería asustarte, pero es que estabas muy concentrada mirando por la ventana, tu eres Misaki ¿verdad?, yo soy Lyon.

Mire furiosa a Ul y se que a pesar de que no pudiera ver la ira en mis ojos tapados por el velo, ella noto que estaba molesta.

-¿que? me dijiste que no le dijera a Gray que estabas aquí no a Lyon.

-uffff

-descuida yo no le diré nada a él -dijo Lyon-

-esta bien -dije

Y fue así como pase mis vacaciones familiares en casa de Ul observando a escondidas a Gray con ayuda de Lyon, ya que él me avisaba cuando venía para esconderme.

Me dio mucha tristeza cuando mi madre me dijo que volveríamos a la aldea, yo no vería a Gray nunca más.

Fairy Tail, la gran familiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora