La joven del listón azul

Mi amor por ella

Al día siguiente, después del trabajo fui instantáneamente a la plaza, tenía que hablar con Elizabeth al respecto. Llegué y ella estaba allí sentada, concentrada en su lectura.

-Hola…siento lo de tu padre…

-No es nada, ya estoy acostumbrada a eso, además de nada sirve lamentarse, aproveché mucho el tiempo con mi padre, no me arrepiento de nada, es obvio que la muerte de alguien cercano duele, pero no hay que pensar en la muerte, si no que en los buenos momentos que se pasan… yo… fui feliz…- vi como una lágrima caía por uno de sus hermosos ojos, pero se secó enseguida, sonrió y volvió a su lectura- ya no importa…

-Y… ¿cómo está eso de que ya nos conocíamos?-traté de cambiar el tema.

-Pues así es…

-¿Y por qué no me lo mencionaste antes?

-Pues porque yo pensé que lo recordabas, pero me di cuenta que no era así…, así que preferí callar, me puse muy nerviosa cuando fuimos a ver a tu madre, sabía que ella si lo recordaría- ahora si me sentía mal, fui un idiota.

-N-no, no era así…

-Igual había algo importante que debía decirte… pero no sé cómo hacerlo…

-¿Qué es?, sólo dilo.

-Es difícil, verás, es que yo… yo… desde que nos conocimos yo tuve un gran aprecio por ti… tuve tanta felicidad de volver a verte a finales de Diciembre y… es sólo que, guardé mi amor por ti durante tanto tiempo, sólo pensaba en ti… hummm… lo siento…- agachó su cabecita, yo la miraba y veía como su cara se volvía de un color rojizo.

-Pues te digo que tus sentimientos… han sido bien correspondidos…- levantó su cabeza y me miró.

-¿Eh?

-Elizabeth Jhons, te amo…- un impulso me llevó a abrasarla, y la besé. No se negó, pero luego me miró fijamente, y se fue sin decir nada, yo me quedé allí solo.