I'm Not For You (Posie)

Capítulo 25: Te amo

- ¿Se puede saber por qué carajo tuve que pagar por cuatro cajas de pizza Penelope?.

A Hope le habían prometido una cena y eso era lo que quería y lo iba a defender hasta morir.

Atacó a la ojiverde y a Josie apenas las vio salir de la cocina.

- ¿Qué pasó con el aroma exquisito que salía de la cocina? ¿Qué pasó con los mariscos que vi que estabas usando? ¿QUE CARAJO PASO CON MI CENA?.

Les reprochó con mala cara.

Penelope giró los ojos mientras tiraba de la mano de Josie.

- Cálmate Hope, la comida se quemó, eso es todo.

Les informó.

-A mi dame una buena pizza con mucho grasoso y delicioso queso y haces mi noche.

Opinó Rafael que aún seguía muy relajado en el sillón.

- Cállate idiota.

El horno no estaba para bollos.

- Puedo... puedo...

La castaña se quería soltar de Penelope para volver a la cocina.

- Puedo intentar hacer algo con la comida que queda.

Dijo.

Penelope no aflojó su agarre si no que tiró más fuerte haciendo que Josie se acercara a ella.

- Tu no vas a cocinar nada, Hope no entiende cuando se le dice que no, es una malcriada.

La cena no iba por buen lado.

- Cierra tu boca pelinegra idiota, tu no tienes derecho a decirme malcriada a mi, cuando hace dos segundos llorabas porque la rarita prefiere este buen par de tetas a tu enorme culo.

Lo acompaño con gestos.

- La cola de Penelope es perfecta.

Josie habló sonrojándose cuando el chico que estaba al lado de Hope la inspeccionó.

- Y tus tetas no están nada mal.

Opinó el tatuador.

- ¿CUANDO VAS A CERRAR TU SUCIA BOCA ESTUPIDO?.

Le reprochó Hope.

- No le hables así a Rafael.

Le advirtió Lizzie.

Penelope estaba a punto de estallar, su cabeza no podía aguantar una discusión más entre estas tres personas y de hecho hubiera salido a frenarlos con uno de sus gritos de alto si la cara de su novia no le hubiera llamado la atención.

Con sus brazos en su espalda y balanceándose en sus talones miraba a Hope con su cabeza torcida y su típica cara de idea.

- Jojo...

Penelope quería saber que le llamaba la atención.

La castaña la miró rápidamente respondiendo al llamado.

- Perdón... Es que...

Josie golpeó su frente con su palma reprochándose su actitud.

Después de la "charla" en la cocina la tatuadora se había prometido no dejar que Penelope se sintiera dejada de lado por ella.

Penelope se acercó a ella y sacó la mano de la frente de la chica.

- No te pegues.

Acarició el sector y dejó un pequeño beso sobre él.

- Me gusta esa cara, tu cara de idea.

Confesó.

- ¿Mi cara de... tengo una cara de idea?.