I'm Not For You (Posie)

Capítulo 39: Uuu... uuu

*En el jardín*

Penelope llevaba casi una hora viendo jugar a su novia con sus dos hijos desde una de las reposeras que rodeaba la pileta.

- Dios mío, no se cansan nunca.

Murmuró la pelinegra para sí misma.

Es que si bien disfrutaba con la risa de sus tres personas preferidas, le era imposible evitar que su cuerpo deseara a Josie con tanta ferocidad, su cuerpo hervía y no era precisamente por el sol.

Penelope no sabía si era por sus hormonas, o porque carajo, pero necesitaba a Josette Forbes ya mismo.

No aguantaba más y lo más probable es que le quedara poco tiempo para que la casa se volviera a llenar de gente de nuevo.

Miró su caro reloj y decidió tomar cartas en el asunto.

- ¡HORA DE LA SIESTA!.

Anunció y se levantó de la reposera para agarrar dos toallas e ir a recibir a sus hijos.

- ¡NOOOOOOOOOOOO!.

Josie y Beth se quejaron.

En un descuido y por la recepción de la mala noticia, la castaña soltó a Pedro y el pequeñito se hundió de inmediato hasta que la tatuadora la rescató a los segundos.

- ¡NOOOO! ¡LLENA! ¡GRRRRAAA!.

Pedro reaccionó más tarde apenas su cabeza salió a la superficie.

Escupiendo un poco de agua y con una enorme sonrisa, que demostraba que para nada le molestaba hundirse en el agua y se la aguantaba bastante bien, protestó el fin de la diversión.

Al parecer el pequeño morenito se había quedado fascinada con la ballena inflable gigante.

Penelope miró a los tres con una ceja levantada.

De inmediato llevó sus manos a su cintura para resaltar su punto con su postura.

- ¡Yo puedo hacel eso!.

Anunció Beth desde el agua mostrándole a Josie y Pedro como movía sus cejas igual que Penelope.

- Hacer Beth.

La corrigió Penelope.

- Hacerrrr.

Resaltó la erre.

Josie y Pedro fruncieron el ceño de forma tan idéntica que Penelope no pudo evitar soltar un bufido.

Ambos querían levantar una sola ceja pero siempre terminaban frunciendo el ceño o levantando ambas cejas.

Beth miró de inmediato a Penelope y el aire de superioridad de la pelinegta la hizo reír de nuevo.

Penelope estaba segura de que iba a perder esta batalla.

- No pueden hacerrrrrlo.

Se burló la pequeña levantando su ceja.

- ¿Los viste mamá? no pueden hacerrrrlo.

Se rió un poco más.

- Por supuesto que no cariño, solo las ojiverdes podemos.

Agregó malvadamente.

Beth miró a Josie y Pedro.

- ¡LAS OJIVELDES AL PODERRRR!.

Salpicó agua desde su ballena hacia las otras dos.

Josie protegió a Pedro con su propio cuerpo.

- Pedro aguanta la respiración.

Le dijo Josie protegiéndolo del agua que salpicaba Beth.