I'm Not For You (Posie)

Capítulo 45: Que sea lo que Dios quiera

- ¿Jo?.

La castaña no había cambiado su cara de confundida desde que Valentina entró a su departamento.

No paraba de mirar entre ambas mujeres y de moverse en forma nerviosa.

Su cabeza y su cuerpo tenían una terrible necesidad de que Penelope estuviera a su lado.

- Hola hij… hola Josie.

Saludó la mujer tratando con cuidado a la persona que tenía en frente.

Josie se alejó varios pasos y Josette sintió como la mano de la joyera iba a su espalda para darle fuerzas.

La mujer de ojos azules agitó la cabeza en señal de que estaba bien.

Entre las charlas con su marido, las charlas con las mellizas, los señores Park y todos lo que tenían algo que ver en la vida de Josie, Jo había aprendido que alrededor de su hija se tenía que mover como si caminara sobre vidrio, con sumo cuidado.

- ¿Qué… qué… que haces aquí?.

Josie aun no relacionaba el favor que tenía que hacerle a Valentina con la presencia de su madre aquí.

- ¿Por qué la trajiste? ¿Por qué…

No podía evitar sentirse un poco enojada con su amiga.

Valentina y Jo se miraron y fue la joyera la que tomó la palabra.

- Tu madre…

La castaña apretó sus labios y la elegante mujer se apuró en corregirse.

- Jo estaba trabajando en la empresa cuando mi padre entró para obligarme a ir a esa fiesta. Escuchó nuestra pelea sin querer y la terminé de usar como terapeuta para contarle la situación. Ella misma se ofreció a cuidar a las niñas.

Resumió los hechos ocurridos en Carvajal & Co.

Ante el silencio y la cara de preocupación y confusión de su hija Jo decidió hablar.

- Se que probablemente no te guste mucho la idea pero yo amo a esos tres niños. Dos son mis nietos y la otra es casi como si lo fuera, los voy a cuidar mejor que a mi misma.

Agregó segura.

Josie agitó la cabeza en negativa.

Eran sus hijos y su sobrina, ella los iba a cuidar.

- Por favor Josie.

Valentina insistió mostrándole el smoking.

- Estoy desesperada.

La voz le salía como un chillido.

- Penelope… quiero hablar con Penelope…

Josie necesitaba que su novia le dijera que todo iba a estar bien.

Esta vez fue Jo la que agarró su celular e intentó llamar a la empresaria.

Sabía que si alguien podía sacarle la cara de pánico y de sufrimiento a Josie era su nuera.

- Lo siento.

Se disculpó cerrando la llamada.

- No contesta…

- La señorita Mikaelson tampoco.

Valentina había intentado por otro lado.

- Entonces es mejor que me qued…

- Josie.

Dijeron las dos mujeres al mismo tiempo.

Valentina le hizo un gesto a Jo cediéndole la palabra.