I'm Not For You (Posie)

Capitulo 5: Bes

*Horas más tarde*

Las tres chicas iban en un taxi de camino a encontrarse con MG en la puerta del estudio de tatuajes.

- No entiendo porque tuvimos que tomar un taxi, no te bastó con hacerme mudar a ese nido de ratas donde no puedo pegar un ojo porque si me duermo, estoy segura de que la rarita es capaz de secuestrarme para sacarme la piel y hacerse un abrigo.

Protestó la pelirroja nuevamente.

Desde que Penelope le había arrebatado de un manotazo las llaves de su auto, la cara de Hope no había cambiado.

Se subió al taxi, se cruzó de brazos y se encargo de actualizar sus protestas a cada rato.

- ¿Qué tienes contra mi Penelope? ¿Por qué no dejas que use mi hermoso coche?.

Penelope no quería volver a contestar la misma pregunta, no quería que Hope la sacara por tercera vez de sus pensamientos.

Su mente estaba en el lugar que quería y no quería interrumpirla, así que decidió ignorar a su amiga una vez más.

La empresaria no entendía su cuerpo, no entendía su mente, no entendía como se comportaba cuando Josie estaba frente a ella.

Cuando la chica dormía, que más hubiera querido Penelope que acostarse a su lado y mirarla sin cansancio.

Cuando despertó asustada por el exabrupto de Lizzie, Penelope no pudo evitar querer tomarla entre sus brazos y tenerla segura entre ellos hasta que la tatuadora se tranquilizara.

¿Pero cómo podía hacer eso si la otra chica apenas permitía que estuvieran a unos cuantos pasos de distancia? Se preguntó a sí misma.

Pregunta que la hizo mirar a la rubia que tenía a su lado, Lizzie.

Lizzie había visto lo mismo que ella, la bailarina también había presenciado la forma en que Josie llegó a temblar por el solo hecho tener las manos de Penelope en cada uno de sus brazos.

Evidentemente a la castaña la ponía incomoda la presencia de otras personas a su alrededor y ni hablar de que otra persona se acercara a ella o intentara tocarla.

La misma Penelope alcanzó a ver como apenas ellas salían por la puerta del departamento, todo el cuerpo de la otra chica se relajaba y si no hubiese sido porque en ese momento Hope había empezado con sus chillidos, la pelinegra hubiera jurado que escuchó a Josie suspirar.

- Si yo hubiera manejado ya hubiéramos llegado ¿Sabes?.

Al parecer Hope no se callaba.

- Si yo hubiera manejado MI COCHE, no tendríamos que ir todas apretujadas en este mugriento carcacho y...

- Hazme el favor de callarte Hope.

La pelirroja lo había logrado, había logrado que Penelope saliera de sus pensamientos.

- ¿Cuántas veces tengo que explicarte que por unos meses hay que tratar de pasar desapercibidas? ¡Contéstame Hope! ¿Cuántas veces tengo que explicarte?.

Insistió irritada, la pelirroja cruzó aun más sus brazos de ser posible.

- Si no me dejaste usar mi Porsche, al menos hubiéramos salido en tu Mercedes.

Alcanzó a murmurar, gracias a Dios que el taxista frenó antes de que Penelope pudiera contestar.

La pelinegra pudo divisar a un impaciente MG en la acera.

- Dijeron en una hora.

Les reclamó el chico apenas las tuvo de frente.

- Deja quietos tus pies o tus zapatos caros van a desgastarse y no me mires así.