¿Ella es la princesa perdida?

Capítulo 4

El trayecto fue incómodo después de que Liam me dijera eso. Cuando llegamos a la mansión salí corriendo del auto , gritándole un gracias, mientras corría para ir a la habitación de mi amiga. Salude al portero y entre, pase por la sala saludando de la misma manera a las señoritas de limpieza.

Subo los miles de escalones para llegar al cuarto de mi amiga. Dios santo ¡Su cuarto está hasta arriba! Ya cuando llego segundo piso tomo un respiro y veo al pequeño James leyendo un libro.

-Hola- le saludo

Levanta la mirada encontrándome con sus ojos azules. - Hola, Jenn.

- ¿Qué lees,pequeño?

- El principito. Deberías leerlo, te hace reflexionar bastante.

Wow, este niño es todo un prodigio.- Si, lo leeré. Adiós, al ratito.

Me hace un ademán de despedida y sigo subiendo las escaleras.

¡Al fin llego! Malditas escaleras.

Entro y veo a mi amiga hablando con las que son al parecer las estilistas.

- Si, ese color creo que le haría quedar bien.- se encuentra de espaldas mi amiga.

Simulo una tos. Voltea.

- Hola, amiga. Hasta que llegas, justo estábamos hablando de ti.

-¿si?- dejo mi mochila en una silla para ir con ella.

- Si, ven.

Mi amiga me presenta las estilistas; son dos rubias y dos morenas (dos para cada quien). No se me quedan los nombres. Pero las llamaré rubia número uno, rubia número dos y de la misma forma haré con las morenas.

Empezamos exfoliando las manos, la cara y todo hasta que nuestra piel quede suave y limpia. Nos peinan y arreglan nuestras uñas. Nos maquillan y al final nos ayudan con nuestros vestidos. El mío es un rosa pálido, el de Liz es de un azul verdesito, le queda bien siendo pelirroja.

Sé ve hermosa mi amiga.

Las estilistas se retiran dejándonos a mi amiga y a mi.

Nos miramos en el gran espejo que tiene mi amiga. Las dos nos vemos hermosas.

- Nos vemos bien- dice la pelirroja.

- Si, no me gusta poner vestidos pero creo que ahora los adoro.

Nos reímos las dos viendonos en el espejo.

- Te diría que te extrañaría pero por mal suerte trabajaras conmigo- bromeó.

- Ja,ja lo mismo digo - rueda los ojos. Y nos reímos - Hoy es nuestro día. - suspira.

- Si , aún no se me queda en la cabeza que hayamos terminado la universidad.

- Si, a mi también.

- Vamos, que tal vez nos esperan.- alego.

- Espera. Quiero decirte algo importante.

-Dime, querida amiga.- la veo atrás de mi mientras me observo en el espejo viendo como me quedo mi maquillaje.

- Es sobre Liam.

- ¿ Qué tiene? ¿Le paso algo malo?-Me giro para verla un poco asustada.

- No, no. No te asustes. Es algo bueno.

Suspiro de alivio. - Bueno, dime.

- Quiere invitarte a salir - suelta así de la nada.

-¿Qué? Debes estar jugando.