Capítulo 24

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-Jenner, creo que quiere que solo tu te montes en él- Dijo Tristán con tono de preocupación en su voz. -No me gusta la idea de que vayas tu sola- Me dijo Tristán con tono serio.


-Tranquilo Tristán, solo será un paseo, será rápido y volveré aquí sana y salva. – Le dije con un toque de humor en mi voz, ya que me pareció tierna su manera de actuar.


Me monté en el pegaso e inició el vuelo. Era todo precioso, la manera en que el viento chocaba contra mi rostro, la sensación de libertad, pero lo que mas me cautivó fue el hermoso paisaje que mis ojos observaban cautivados por tanta belleza.



Narra Tristán


Se veía tan hermosa con su cabello ondeando en el viento y su hermosa sonrisa adornando su precioso rostro, no podía dejar de admirarla.


Pero, un recuerdo pasó por mi cabeza. El ultimo pegaso que vi, fue cuando Amelia intentó proteger a uno de ellos de las garras del rey oscuro, que quería robarle la sangre a ese pobre animal. Y aunque Amelia hizo un gran esfuerzo, el animal resultó herido y terminó falleciendo.


Entonces ¿de donde ha salido este pegaso?


Cuando volví a ponerle atención a mi querida Jenner, me di cuenta de que el pegaso se estaba volviendo negro y su largo pelaje se encendía de un intenso fuego azul. Maldición.


-¡¡¡Jenner!!! – Solo alcancé a gritar eso cuando me di cuenta de que una figura bastante alejada de mi, le disparaba a ese extraño ser y salía corriendo hacia el lugar donde caería él y Jenner.


Me transformé lo mas rápido que pude y fui al rescate de Jenner, que gritaba asustada mientras caía.


-¡¡Tristán, ayúdame!!- Gritó ella totalmente aterrorizada.


No dudé ni un segundo mas para acelerar mi vuelo y llegar a ella.


Por suerte la atrapé unos metros antes de que llegase a cocar el suelo.


Cuando ella bajó de mi lomo, me transformé otra vez para poder abrazarla mientras ella lloraba del miedo que había sentido.


-Pensaba que te perdería- le susurré en la oreja.


Ella siguió llorando hasta que por fin habló.


-No vuelvas a dejarme sola nunca más – Me dijo ella con la voz aún temblorosa.


-Nunca princesa, nunca volveré a dejar que nada te pase, lo prometo. – Le dije mientras me separaba para verla a los ojos.


Volví la vista hacia donde estaba ese extraño ser, muerto, en el suelo, con la flecha que el extraño disparó, clavada en el corazón.


Me dirigí hacia el extraño, que me daba la espalda y le dije:


-¡¿Cómo has podido disparar esa flecha aun estando Jenner encima?! ¡¿Estas loco?! ¡Pudiste haberla dañado!


-Tranquilo Tristán, ¿es que ya no confías en tu mejor amigo?











Chan Chaaaaaaaaaaaaan, he vueltooooo, y aqui me quedo. Muy pronto, próximo capitulo. 

¿Ella es la princesa perdida?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora