Leyendas urbanas.

Hitori Kakurenbo

Hitori Kakurenbo es un ritual japonés que consta de invocar espíritus a través de un muñeco de peluche, este ritual se trata de juegar a las escondidas con un muñeco de peluche. Necesariamente tiene que tener extremidades se le debe agregar un nombre, después abrirlo y sacarle el relleno; el peluche debe ser rellenado con arroz todo el peluche, luego viene el paso un tanto asqueroso pues la persona que empieza a jugar a esto necesita cortarse las uñas de los dedos de las manos y de los pies y colocarlos también como relleno.

Luego se debe coser el muñeco con un hilo rojo y lo que sobre del hilo hay envolverlo alrededor del muñeco, como siguiente paso tenemos que llenar una bañera con agua y vertirle la sal,el siguiente paso es apagar todas las luces de la casa y tener como única luz de ambiente una vela encendida. El siguiente paso es esperar hasta las 3 de la mañana para empezar a jugar y luego se tiene que decir el nombre del muñeco 3 veces y luego "Es mi turno" una vez dicho eso se debe colocar el peluche en la bañera e ir a escondernos y contar hasta 10.

Luego de baber contado hasta 10 hay que ir a buscar el peluche en la bañera y decir "Te encontré" y su nombre, una vez completado ese paso con un objeto punzante se debe apuñalar al peluche y rápidamente ir a esconderse muy bien pues las uñas en el interior del peluche crean un nexo con el jugador y si el muñeco te encuentra te apuñalara con el mismo objeto con el que lo apuñalaste.
Para cerrar ese ritual lo que hay que hacer es vertir agua con sal en una taza hasta la mitad y tomarsela pero no beberserla, luego buscamos al peluche y una vez que se lo encuentre hay que escupirle el agua y decir 3 veces "Yo gano". Se dice que si se gana 3 veces consecutivamente el peluche aceptará que el jugador gana el juego y nos responderá a todas las preguntas que se le hagan.

Aquí será un SesshInu, Inu interpretará al jugador y Sessh al espíritu invocado al jugar al Hitori Kakurenbo ;3

En una casa se encontraba una familia de 3 integrantes entrando con cajas y más cajas, esa familia iba a mudarse a esa casa, la cual era muy grande que parecía una mansión, tenía 5 pisos y un lindo patio con césped, cuando ya terminaron de adentrar todas las cajas a la casa el hijo de esa familia llevo 2 cajas a una habitación que prácticamente ahora sería su cuarto.

ーVaya que linda mi nueva habitación😊😊ーPensó en voz alta el chico, el cuál era un adolescente de 17 años de edad con cabello plateado y ojos dorados. En ese instante bajó a ver lo que hacían sus padres, los cuales notaron su presencia.

(Si quieren saber porque empezaré a escribir de esa forma les explicaré al final ;3)

ーInuyasha, tu madre y yo tenemos que ir a fuera a pagarle al conductor que nos trajo hasta aquí, tú puedes ir recorriendo toda la casa😉😉ーDijo el padre que en sí era muy parecido a él.

ーSí padre😊😊ーdijo alegremente mientras sus padres asentían e iban afuera de la casa a pagarle al conductor e Inuyasha fue rápidamente a recorrer la casa.

La casa le parecía muy hermosa y era tan grande que sentía que podía jugar a las escondidas con sus amigos y les sería más difícil encontrar al joven peliplata.
Inuyasha era bastante curioso y no había rincón de la casa que escapase de sus ojos, una vez que terminó de recorrer la casa les contó a sus padres que vio en cada rincón de la habitación y que estaba contento de vivir ahí, era fin de semana asi que sintió que se la iba a pasar muy bien en su nuevo hogar.

Luego en la noche Inuyasha estaba muy aburrido mientras mirando la televisión de su dormitorio y estaba abrazando a su perrito de peluche blanco con una pequeña luna creciente azul en su frente, ese peluche se lo habían regalado hace poco ya que pasando por una tienda Inuyasha lo vio y le gustó muchísimo, aunque fuera ya un adolescente para tener peluches eso no le quitaba su amor por ellos.