Querido amigo que me ayuda a ser mejor persona:
Me rompiste el corazón. Y no sé como no pude notar que te había dado el poder para eso. Ahora me alegro de que te hayas ido.
Porque no necesito falsas ilusiones, ni que me toques el piano, ni ese beso en la frente. No me hace falta sentir la soledad, porque aprendí a vivir con ella hace tiempo. No necesito esto. No te necesito. No quiero necesitarte. Y no lo voy a hacer.