Capítulo XIX Un Baile

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nota: reproducir "fall de Ed Sheeran" cuando os lo indiqué.



MIMI

-¡Tienes que elegir Mimi! ¡No trates de tener a todas las mujeres del mundo! -Patricia dijo con las manos en sus caderas, esperado una respuesta.

-Dios, ¿por qué sigues molestándome?

-¿Me dejaste para ir detrás de secretarias y strippers? ¿Es eso correcto?

-Mira lo que dices. ¡Te aseguro que soy mucho mejor que tú! -Ana dijo enfadada.

-¡Si no pudiste mantenerla es porque no fuiste lo suficientemente buena! -dijo Alicia.

¿Qué demonios tenía que hacer ella con mi vida? Después de todo lo que me hizo sigue teniendo la audacia para dictar con quién debo y con quién no debería salir. Esto no podía ser real: estás sentada en una mesa en la cual en frente estás; tu ex, y dos mujeres que te hacen perder la cabeza. Era de lo más loco, las tres esperando una respuesta que no sabes dar. ¿Ana, Patricia o Alicia? ¿A quien elegirías?

-Por favor, ¡nadie puede hablar con alguna de ustedes tres así! -Estaba furiosa, me levanté de la silla. -¿Quién demonios les dio permiso de venir aquí para pedirme una respuesta?

Las tres se quedaron calladas, mirándose entre ellas. Podría reírme de la situación sino fuera tan trágica.

-¡Estoy esperando por ti para que mandes a las otras dos fuera! -el tono de enfado de Patricia fue más fuerte.

-¡Quiero que te vayas!

La mujer me miró sin entender a lo que me estaba refiriendo.

-Patricia, por favor. No tenemos nada, ¡no sé ni si quiera porqué has vuelto!

En perfecta sincronización Ana y Alicia dejaron enseñar una sonrisa triunfante, dejándome sin respiración, ¡mierda!

-¿Es esto realmente lo que quieres? ¿Echar de tu vida a la única mujer que te valora?

Bendita ironía de la vida, Patricia ha sido la mujer que más me ha menospreciado en la vida, en el buen y mal sentido a la vez, pero claro está, quedao fue antes de haber vuelto a Barcelona y haber conocido a estas dos preciosas chicas que estaban en silencio.

-¿Valorar? -Reí irónicamente. -Fuiste un error en mi vida, ahora, por favor, vete.

Sí Patricia tuviera el poder de matar con la mirada, probablemente hace mucho tiempo que ya no habitaría la Tierra. Su mirada era de odio y enfado que no me afectó en lo más mínimo Patricia hoy en día, ni siquiera me importaba un 1% de lo que solía importarme algún día. Patricia quitó sus ojos de mí para mirar a Ana y luego a Alicia, la que incluso iba en ese momento con máscara. ¿Vería alguna vez su cara? ¿Sabré alguna vez quien es en realidad?

-Te vas arrepentir de esto, Mimi. -Patricia dijo dejando la habitación con un portazo.

Me senté de nuevo en la silla, cerrando los ojos y tratando de relajarme por unos minutos de todo el estrés. Cuando sentí dos manos yendo de arriba hacia abajo por mis hombros haciéndome un masaje.

-Esto me hace sentir bien.. -dije, dejando a mi cuerpo relajarse ante esas suaves manos.

-Así es como se debe te debe cuidar. -Oí la voz de Ana, tan dulce y tranquila, haciéndome sonreír.

-Yo se exactamente lo que te gusta. -ahora era Alicia con su voz más sensual. Sentí su aliento caliente cerca de mi cuello, causando que un impulso nerviosa recorrerá mi espinal dorsal.

The Stripper (Warmi) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora