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-¿Que tanto preparas?.- Pregunto su amigo tras verle aun en la cocina.

Primero pensó que iba a buscar algo de comida.

Luego como paso dos horas ahí, creyó que estaba horneando las galletas. Y aunque no se equivocó en eso, no podía tardarse dos horas preparando la masa.

Al final, decidió ir. Mirando una pequeña canasta que no hace mucho su amigo había comprado, mirándola de cerca, observando un pequeño pastel adentro, que por el merengue deducía que era de fresa, al igual que las galletas que contenían una cierta palabra, leyendo las de arriba.

-Feliz...... ¿Feliz navidad?. ¿A quien piensas regalarle todo esto?.- Pregunto sabiendo que estaba haciendo un obento con esmero, miro a un lado el termo a un lado, lo tomo y lo coloco en la canasta, observando a su amigo acercarse a él, apagar la estufa y dejar el obento en la canasta. Mirando su rostro.- ¡Santo Kamisama, Gakushuu, eres un jitomate!.

-Callate.... Yo.....- El castaño leyó entre silabas, sabia que su amigo a pesar de estar enojado por su cumplido, había apartado la vista hacia, canasta, quedándose mirando todo de adentro.

-¿Para quien es?.- Decidió preguntar de una vez, su amigo suspiro ante eso, y por un momento Ren pensó en ponerlo de adorno en el árbol se navidad.

-Pues....... Es para..... Akabane.

-¿Akabane?.- Repitió, sonriendo después de unos segundos de estar asombrado.- Iras a festejarle feliz navidad.

-Idiota, hoy es su cumpleaños.

-¡¿Que?!. ¿Nació el 25 de diciembre? ¿Porque no me dijiste? Pude haberle comprado algo.

-¿Tu? ¿Porqué?.

-Debo llevarme bien con el novio de mi mejor amigo, además que seré el padrino de los anillos.

-.... Ren.

-No te preocupes. Conseguiré pareja para ese día y estaré casado. Y tu también vas a ser mi padrino de luna de miel.

-¿Porqué yo?.

-Eres bueno eligiendo.

-.... Esta bien.

-Pero como no le compre nada te acompañaré.- Le dice, este dudando unos segundos antes de sonreír.

-Esta bien, solo ayudadme a cubrirlo bien. No quiero que llegue frío.

-Entendido. Conservaremos tu calor de amor adentro.- Vio como se sonrojo aun más.- En cerio debería considerar ponerte como adorno.

-¡Callate Ren!.- Este río. Ayudándole a tapar bien las cosas de adentro hacia afuera. Dejando la Gaza, llevándola Gakushuu.

-Oye, ¿si lleva tu nombre adentro, no?.

-....- No respondió, en realidad no quería que el pelirrojo se enterase que había sido él, Ren enseguida pensó en una forma de hacerle saber al pelirrojo que había sido de su amigo. Esperaba que estuviera en casa.

Cuando llegaron, observo a su amigo poner la canasta en la casilla, que si ni siquiera el sabia que tenía, dejando adentro la canasta. Le vio suspirar, aunque igual el sonrojo no se iba.

-Listo, vámonos para celebrar la navidad con tus padres y el mio.- Le dijo, avanzando rápido pues no quería que nadie más que Ren se enterasen de lo que hizo.

-¡¡Akabane, feliz cumpleaños!!.

Mientras adentro, el pelirrojo se mantenía aburrido, miraba las típicas películas de navidad que transmitían ese día. No había querido pasar la navidad con ninguno de sus amigos, se sentía mal el solo pensar en como sus padres estaban lejos y como nadie se acordaba de su cumpleaños por el simple hecho de ser Navidad. Odiaba ese día. Y odiaba quedarse solo.

-¡¡Akabane, feliz cumpleaños!!.- Escuchó que dijeron, mirando su alrededor. Tenia las luces apagadas, ¿como supo que estaba en casa? Y lo peor, ¿como supo que era su cumpleaños?.

Se acerco de prisa a la ventana de su cuarto, quitando el empañado para poder ver. Observando a Ren afuera. ¿Que hacia aquí?.

-¡¡Akabane, si estas!! ¡¡Que sepas que Gakushuu-. Este no pudo continuar, pues el rubio fresa le había tapado la boca. Dando un latido fuerte al corazón del pelirrojo al verlo ahí.

Definitivamente les iba a dejar entrar. Comenzó a bajar de prisa.

-¡¡Gakushuu te preparó la-.

-¡Callate, Ren!.- Le grito, sintiendo como se suelta.

-¡¡Te preparó la comida!!.

-¡¡Callate cabezotas!!.- Le grito, a la vez golpeaba de una vez su nuca de este, dejándole inconsciente, aprovechando para salir del lugar sin más distracciones.

Para cuando el pelirrojo salio, el frío lo golpeo por todo el cuerpo. Y lo peor de ese día, Gakushuu y Ren ya no estaban, sin embargo recordó lo que Ren había intentado decirle. Mirando a su alrededor sin ver nada hasta abrir la casilla, abriéndola encontrando una canasta. La tomo sintiéndola aun calentita. Metiéndose, suspirando cuando la dejo en la mesa, prendiendo la luz para ver todo lo que contenía. Mirando el pequeño pastel de fresa, las galletas en una bolsa con sílabas, observando el "Feliz" primero. Sacándolas, abriendo la bolsa para hacer la oración, comenzando por feliz navidad, que al final no salio. En primera, no había "D" y en segunda no había "v", y en tercera porque sobraban galletas. Y probó con su cumpleaños, sonriendo al ver lo que salia.

Feliz cumpleaños, Karma.

Sonrió más al ver que utilizó su nombre, ahora iba a sentirse mal si se las comía. Saco lo demás, mirando el obento y el termo. Definitivamente sus favoritos de ahora en adelante, abriendo ambos, mirando la comida apetitosa del obento junto con él te negro del termo. Dándole un sorbo a este, sintiendo su cuerpo calentarse debido al calor que la bebida tenía, el calor reconfortando su cuerpo. Miro la comida antes de ir por unos palillos a su cocina, tomándolos.

-Itadakimasu.- Dijo antes de decidirse porque probar primero, decidiendo por el sushi, apareciendo un pequeño sonrojo en sus mejillas.

Estaba delicioso.

Pero lo estaría más si Gakushuu estuviera a su lado.

Asano Gakushuu y Sakakibara Ren. Cosas De Todos Los Días (RANDOM)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora