10

426 57 4
                                        

El resto del día fue para ambos un acumulador de estrés. Tanto Ashiya como Abeno no tenían ni idea de cómo habían terminado comiendo en la azotea como de costumbre, pero ahí estaban, sin hablarse, ni siquiera verse. Ambos sentían que la incomodidad del silencio los estaba matando.

- U-Um, ¿Abeno-san? - dijo Ashiya.

- ¿Qué? - respondió Abeno.

- ¿De casualidad... Estás molesto porque falté al trabajo?

- ¿Ah?

- Bueno, me habías dicho que teníamos trabajo ayer, pero nunca mandaste a la Mononokean por mí. Me preguntaba si se suponía que tenía encontrarte en algún sitio.

Abeno se había olvidado. Sin embargo, no quería decirle a Ashiya que no pasó por él porque, en realidad, en aquel momento no quería verlo. Él se había encargado del trabajo solo sin decirle nada.

- No te llamé porque no pensé que hicieras falta para el trabajo. Resultó ser más fácil de lo que anticipé - fue lo que contestó.

Abeno era mucho mejor mentiroso que Ashiya, pero Ashiya lo conocía bien. La última vez que no lo había involucrado en un trabajo fue cuando Abeno recibió un pedido del Ejecutivo. También aquella vez con Egen-san. Pero Abeno le había prometido que le diría siempre que tuvieran un nuevo trabajo del yokai que conformaba uno de los tres poderes del Inframundo, e incluso lo involucraría. Antes de eso, fue cuando prestó su visión a Tomori-san y dejó de ver a los yokai, por lo que no podía llevarlo a trabajar. En pocas palabras, las únicas veces en las que no lo llevaba a trabajar consigo eran cuando algo andaba fuera de lo normal.

Ashiya lo sabía. Abeno estaba ocultando algo.

- Aún así, al menos podrías haberme mandado un mensaje o algo - reclamó -. Me preocupé porque pensé que algo había pasado.

- Ya.

- De todas formas, ¿qué quieres decir con que no hacía falta? Nunca me has dejado fuera de un trabajo por eso, sin importar que tan simple hubiera sido.

- Deja de quejarte. Además, ¿qué significa eso de "simple"? ¿Acaso quieres que te de más trabajo?

- ¡Quiero decir que estás actuando extraño!

Abeno se sorprendió. No esperaba que la conversación fuera hacia ese rumbo. ¿Ashiya lo había notado? No, espera, ¿por qué se sorprendía? Era obvio que lo iba a notar. Pensó que tenía que evadir el tema de algún modo, sin embargo, Ashiya no le dejó tiempo de responder.

- Desde el otro día tienes esta actitud como si algo te molestara, o como si estuvieras enojado conmigo, o con algo o alguien más. ¿Qué te sucede? ¿Acaso es algo que yo hice? ¿O fue algo que alguien te dijo?

- No es... nada - respondió Abeno, desviando la vista. Eso molestó a Ashiya. Normalmente, Abeno ocultaba las cosas mejor que esto, pero que tan abiertamente hiciera notar que no quería decirle qué le pasaba de algún modo lo irritaba. Sin embargo, pensó que era el momento de llevar a cabo su plan. Si no lo hacía ahora, ¿cuándo? Si esperaba terminaría por perder la determinación que tenía en el momento. Así que, Ashiya decidió comenzar con la apuesta.

- Mentiroso - dijo -. que algo te sucede. Tú... llevas así desde el otro día, cuando Fusshi y Saga...

- ¿Cómo?

- Tú sabes, cuando estaba con Fusshi y Saga... Y dije que... me gustaba alguien.

Abeno no sabía qué estaba insinuando ahora Ashiya, pero pronto llegó a una rápida conclusión.

- ... Ah. Así que de eso se trata.

- ¿Huh?

- Solamente quieres seguir hablando sobre esa persona que te gusta, ¿no es cierto?

Tomodachi Meter (Ship Ashibeno)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora