-No puedes estar enojado conmigo toda tu vida, eramos adolescentes, Jaemin,-sus pasos rápidos detrás de mi me hacían caer que estaba corriendo lejos de ese bar al que algunos trabajadores estábamos invitados como reunión de trabajo.
Ya todos se habían ido, solo quedábamos él y yo, hasta que decidí irme, casi corriendo.
-Pues quiero y puedo,-hable casi gritando, estaba actuando como un niño, inmaduro y sin superar algo que ya había pasado hace cinco años, algo que me dejó marcado y también muy inseguro. ¿Qué si conseguía otra pareja que me abandone de la nada?.
-Jaemin, ya estamos grandes, ven aquí y hablemos,-su voz fuerte detuvo mi paso, después de todo era mi jefe, no quería que me hechara, estaba siendo demasiado insolente.
-¿Qué? ¿Alguna vez pensaste en lo mal que me pude haber sentido? Nunca pensaste en mi,-hable llegando hasta él, quedando frente a frente, tal vez demasiado cerca.
-Cada día pensé en ti, cada puto día...tú no sabes como me sentí, pero si, tienes razón, fui egoísta, tenía miedo y nada me ayudaba a superar ese temor, ahora solo quiero que estemos bien como jefe y empleado, ¿se entiende?,-hablo suave pero autoritario, pegado a mí, tanto así que nuestros pechos estaban a punto de tocarse. Asentí, alejandome para irme a mi casa, ya cansado,-¿me perdonas? De verdad siento todo lo que te hice pasar, entendí al año que había sido una basura, ya no podía volver a Corea, no tenía tu número...nunca contestaste mi carta,-mire hacia otro lado, nisiquiera había abierto su carta, solo la recibí, la deje en mi mesada y ahí se quedo para siempre, hasta que tuve que mudarme, por lo que la cambie a una caja con algunas fotos, en donde sigue al día de hoy, sin ser abierta.
-Somos empleado y jefe, con eso estoy bien,-dije a lo que él asintió.
-Leela.
⟲ ⟳
No sabía si debía hacerlo, lo que me dijo antes de que me vaya había sido algo así como una recomendación, bueno, así lo había tomado yo, pero ahora estoy sentado en mi cama, con el piyama puesto, una toalla en la cabeza y la carta en las manos, sin saber qué hacer.
20/9/2020
Jaemin: la chica del correo me miro raro cuando le di la carta, esas cosas ya no se usan, intente buscarte en instagran y todas esas cosas, pero no te encontré, supongo que estoy bloqueado. No importa, te entiendo, fui una mierda contigo, ahora puedo verlo, tuve miedo, a mamá nunca le gustó que yo fuera gay, mucho menos le hubiera gustado que te tuviera de novio, pero eso no es tu culpa, nunca lo fue, tendría que haberte hablado y dicho todo lo que sentía, haberte dicho que papá me quería mandar a Londres a estudiar.
Tendría que haber echo tantas cosas, despedirme por ejemplo.
Te extraño, mucho, quiero llenarte la cara de besitos, tenerte al lado mio todo el dia, molestandome, arriba mio acurrucado por el frio, te necesito mucho mucho mucho.
Nada de esto fue planeado, me di de la nada y se que eso seguro te rompió, no me despedí de ti ni de nadie, no deje rastro, nisiquiera algo para saber en dónde estaba. Perdón, no me alcanza la vida para pedirte perdón por lo mal que seguro te hice.
Te extraño más de lo que te puedes imaginar, y ya no se qué poner, tengo miles de cosas pero no se cómo decirlas.
Dotori
Sonrei al ver ese tonto apodo que alguna vez le puse, era tierno. La carta no decía nada y decía todo, no fue la desicion de él irse, pero si fue su decisión irse sin decir nada, por miedo a lo que su madre pueda decir o hacer, supongo.
-ya leí la carta, ¿de qué tenias miedo?
Lee Jeno:
-de lastimarte, creí que si me iba sin decir nada, te dolería menos, que si cortaba todo de raíz iba a ser mejor. Preferí que me odiaras antes de que me extrañarás.
-lo lograste, te odie por mucho tiempo
-que descanses
Deje mi celular a un costado, habían sido muchas emociones, muchas cosas para pensar y peor aún, mañana tenía reunión con él.
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Me desperté más temprano de lo usual, con energía y listo para darme un baño caliente, lo cual hice. Seque mi pelo acomodandolo un poco, me puse perfume y hasta un poco de crema con olor vainilla.
Al llegar estacióne mi auto en mi lugar, había llegado algunos minutos más temprano, listo para preparar alguna que otra cosa para la reunión, preparar mi café, el de Sorn y Yeeun que siempre llegaban un poco más tarde a causa de que sus casas quedan bastante lejos del trabajo.
Estaba tranquilo, bastante. Aunque nervioso por tener que ver a Jeno después de haber aclarado ciertas cosas, ahora no sabía cómo iban a quedar las cosas porque bueno, es difícil olvidar de la nada, pero se que los dos eramos adolescentes, tontos, algunos hechos deberían quedar en el pasado, hay que pasar página.
La hora de la reunión había llegado, ya todos estábamos ahí, el entró algunos minutos más tarde, saludandonos a todos con una ligera sonrisa, la cual no parecía muy real para mi, sus ojos no se hicieron lunitas.
Tuvimos que hablar, debatir y él parecía contento cuando yo daba mi opinión sobre algunos temas, hasta cuando yo tuve la razón y no él, parecía habersele olvidado que hace un día me dijo que quería que fuéramos solo jefe y empleado. Hombre tonto.
-Y con eso, damos por finalizada la reunión,-todos aplaudimos y poco a poco se fueron retirando, menos yo, que se me cayeron algunos papeles,-siempre tan torpe,-río apoyándose de brazos cruzados en la mesa, en la cual yo seguia acomodando mis papeles.
-Y tu siempre mezclando lo personal con el trabajo, ¿no?,-dije a lo que el rio,-dijiste que solo somos jefe y empleado, un jefe no me habla así a su emple...
-Bueno si, mentí, me hice mejor en ese campo, ¿no crees?,-dijo sonriendo, mi ceño se frunció y me levante rápido, aunque su mano rápidamente fue hasta mi cintura, haciendo que no pueda salir de la habitación,-hey, tranquilo, solo juego...ten, quiero que, como tu bien dijiste, tengamos una reunión jefe empleado en un lindo restaurante con comida londinense, si no vas, por lo que veo ya tienes mi número, ¿qué te parece?,-negué lentamente, saliendo de sus brazos, más fuertes de los que recordaba.
-No voy a ir.
-Yo también soy bueno con la mentira, ¿no lo crees? Hubieras visto tu cara cuando te rechaze, puedes pasar por mi a las nueve, tengo que volver temprano porque mañana trabajo ¿Quedo claro?
