Cold

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Cómo abogada estaba acostumbrada a los días de mierda, esos días en los cuales te llegan hasta quince demandas, que tienes que resolver lo más pronto posible y de la manera más eficiente para tu cliente... Pero por mucho el día de hoy había sido el peor en mucho tiempo; no solo le había mentido a Harvey, sino que también había vuelto a herir a Frank12334.

Rendida, así era cómo me sentía en ese mismo momento, no podía más con mi alma así que me dirigía al hotel para poder descansar un poco, pero al parecer el de arriba no tenía el mismo plan para mi que yo, así que mi celular sonó en cuanto solté mi bolsa, vi la pantalla, ¿Qué es lo que querrá Jessica a esta hora?.-¡Jordan!.- conteste en tono neutro.-¿Hablaste con Freeman?.- tan directa cómo siempre, esa era una cosa que admiraba de Jessica.-Si.- conteste cansada pero sin llegar a ser grosera.-¿Y bien?.- preguntó esperando a que terminase de hablar.-¡Me hará el favor!.- conteste, se escucho el alivio de Jessica a través de la línea.-¡Gracias!.- exclamo con sinceridad, y eso era lo único que me alegraba el día hasta ahora.-¡Por nada!.- afirme algo más animada ya que era la primera vez que Jessica Pearson me daba las gracias por algo que hacia.-¡Hablamos mañana Jordan!.- exclamo volviendo a su tono neutro.-¡Descansa Pearson!.- exclame para después colgar.

Estaba tan cansada que no lo pensé mas y me metí a la cama quitándome todo, quedando solo en ropa interior ya que estaba tan cansada que no quería desempacar y buscar mi pijama, cerré los ojos y caí rendida ante el sueño. Sentía que la mañana estaba aquí, pero la flojera me invadió por completo y las ganas de no levantarme me obligaban a permanecer en mi cama, hasta que el ruido de alguien golpeando la puerta abruptamente me hicieron exaltar, ¿¡Qué demonios?!, tomé una bata lo más rápido que pude y corrí hasta la puerta ya que aquel horrible ruido no cesaba, sin siquiera fijarme por el picaporte abro la puerta, Harvey avienta la puerta una vez abierta y sin decir nada a una velocidad impresionante para estar caminando entra al cuarto principal de la suit e inspecciona todo a su alrededor, hace lo mismo con el baño, sin decir nada me senté en el sillón de la sala a esperar que terminara con su paranoia; ahora parado frente a mi con la respiración agitada le preguntó con toda serenidad.-¿Terminaste?.- su rostro denota ira en todo su esplendor.-¡Si!.- era lo primero que me decía y se escuchaba tan frío que un nudo se formó en mi garganta.-¿Quieres café?.- pregunte levantando la bocina para pedir mi desayuno.-¡No!.- volvió a decir cortante, sabía que no quería solo porque estaba enojado, así que al hablar con el recepcionista pedí desayuno suficiente para dos personas, me levanto y me dirigí al baño a tomar una ducha, no podía lidiar con Harvey en ese estado sin antes darme una ducha y tomar una taza de café.-¡Le abres la puerta al recepcionista por favor!.- exclame para después encerrarme en el baño.

Harvey POV

Acababa de irrumpir en su suit, ¿y no tenia nada para decir?, eso me estaba confundiendo, estaba haciendo que me sintiera mal cuando la que fue a pedirle un favor a su ex de siempre fue ella a espaldas de su novio actual, ¡NO YO!, me sentía desesperado y ahora con toda la calma del mundo estaba tomando una ducha, cuando yo apenas y había podido dormir algo ya que me pase todo el vuelo imaginando que Frank la estaba tocando como se le antojara en ese mismo momento, apreté mis puños nuevamente al pensar que eso pudo haber pasado sino fuese porque le marqué a Jessica para preguntarle por su reunión con Spencer.

Me levante desesperado, caminado cómo león enjaulado, dándole vueltas una y otra vez a lo que había pasado, ¿por qué mentir?, ¿por qué lo hiciste Spencer?, mis pensamientos fueron interrumpidos por el que creía que era el botones con el desayuno de Spencer, mire por el picaporte afirmando que era él, ya que tenía consigo el carrito con la comida.-¡Buenos Días!.- exclamo con alegría mientras entraba.-¡Puedes dejarlo por allá!.- señale hacia la sala, él me miro y sonrió.-¡Claro que si, señor!.- atentamente dejo el carrito en la sala, tomé un billete de 20 y se lo extendí cuando salió.-¡Gracias!.- afirmo con una sonrisa, le sonreí a medias y cerré la puerta.

Me senté frente al desayuno que olía sumamente exquisito e intenté volver a pensar en mi dilema, pero los rugidos de mi estómago resonaban dentro de mi cabeza, me levanté de un impulso y me dispuse a caminar nuevamente, el sonido de la puerta del baño me dejó congelado, Spencer sale del baño con una bata que apenas y está abrochada, se veía sumamente sexy mojada y semidesnuda, tanto que me estaba matando el verla así y no poder hacer nada.-¿Vamos a hablar o te quedarás ahí parado todo el día viéndome comer?.- preguntó mientras abría las bandejas observando con atención su contenido, ¿cómo era posible que ella tuviera el control de todo?.-¿Quieres decirme que era lo que hacías con Freeman a mis espaldas?.- pregunte retándola a que hablara de porque no me menciono nada, ella levantó la vista me sonrió.-Le hacía un favor a Jessica, uno que tú me pediste que hiciera.- si tono era tan tranquilo que no podía creer lo que me estaba diciendo.-¿Ahora todo es mi culpa?.- pregunte incrédulo.-¡nunca dije eso Harvey!.- se defendió, pero no era mi culpa que me mintiera y estaba dispuesto a hacerlo notar.-¿Por qué me mentiste entonces?.- pregunte levantando la voz, ella  soltó un suspiro.-¡Sabia que no lo comprenderías!.- nuevamente estaba asumiendo que todo esto era mi culpa.-¡No hagas esto sobre mi Spencer!, ¡FUE TU MALDITA DECISIÓN MENTIRME DESCARADAMENTE!.- no me pude controlar mas y comencé a gritarle.-¡Lo hice para conseguir el maldito trato que le regresara su licencia a Jessica!.- su tono era frío, algo que nunca había escuchado antes en ella, cómo si no le importara más lo que yo pienso o siento, no supe que contestar, su tono me dejó helado.-¡Si no tienes más que decir, retírate Harvey!.- nuevamente con ese tono frío, tenía que hacer algo, esto no se podía quedar así.-¡No me iré sin antes arreglar esto!.- exclame firme mientras me sentaba afirmándole que no me movería de aquí.-¡Bien, cómo gustes!.- ella se levanto mientras veía su teléfono y se encerró en la suit.

El silencio me estaba matando, no escuchaba que estuviera haciendo algo, escucho sus pasos acercarse a la puerta en donde tenía mi oído pegado, retrocedo rápidamente hasta adoptar una posición de relajación en el sofá, escucho la perilla girar y volteó a la puerta, ella está ahí parada preparándose para salir, con un vestido que parecía nuevo, se veía increíble, ese vestido negro junto con su saco blanco hacía que se viera simplemente hermosa, pero sin decir ni una palabra más salió de la habitación, dejándome a mi atrás cómo un tonto, y lo peor era que ambos sabíamos perfectamente que esperaría por ella.

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