El Hombre Gato

Capítulo 14: "S U E Ñ O"

Al día siguiente, los detectives habían tenido una mañana agitada, habían ido a varias casas en donde habían reportado diversos asesinatos, no cabía duda de que todos los asesinatos eran obra de El hombre gato, los cuerpos tenían los mismos daños y además de tener la cara desfigurada pero con forma de gato.

Estaban muy consternados y no sabían que hacer, Jaime no encontró los libros que quizás los hubieran ayudado, con lo único que contaban era con el sistro pero algo les decía que quizás algún día no llegaría a funcionar, el tiempo pasaba, y las victimas no cesaban, cada día y noche había mas. Eran ya las 5 de la tarde, estaban en la casa en donde había sido asesinada la señora Cari. Jaime ya les había contado lo que había visto la noche anterior en su casa pero Gerardo no lo podía creer.

-¿enserio Jaime?, viste a Sindy. Le preguntaba Gerardo con desconcierto

-enserio, justo cuando esa entidad se acercaba a mí, vi algo detrás de ella, y justo cuando me iba a atacar desapareció, allí fue cuando vi a Sindy. Dijo Jaime

-¿seguro que era ella?, le preguntó Gerardo muy atento

-sí, estoy seguro, luego después ya no la vi, salí a buscarla y le grité pero no la encontré por ningún lado. Le respondió

-qué raro, pero si la vimos morir. Le dijo Gerardo algo triste

-así es, eso es lo que no me explico, quizás aluciné o fue un sueño no lose, es todo tan confuso. Le dijo Jaime

-seguramente fue eso, porque hasta la sepultamos. Le dijo Gerardo

-así es. Le dijo

-y ¿esa otra entidad que viste era el hombre gato? Le preguntó Gerardo

-no, era otra, de hecho no te lo quería decir, pero vi también a la bruja.

-¿qué? ¿Cómo que también? se exaltó Gerardo

-sí, vi a la bruja, luego a esta entidad, estoy seguro que eran diferentes. Le dijo

-no puede ser, ya no sabemos qué está pasando, esto me volverá loco. Dijo Gerardo

-es cierto, como nos hace falta Sindy... Dijo Jaime bajando la mirada

-además lo de Giovanna, algo le está pasando, la veo mal, tiene estos sueños o visiones, no lo sé y temo que le pase algo malo, o que ya no regrese de ese lugar. Le dijo Gerardo

-es cierto, maldición todo está empeorando. Le dijo Jaime

-tenemos que seguir adelante, y no debemos mostrarnos mal ante los demás, porque sospecharan que sabemos algo que ellos no. Dijo Gerardo.

-maldición, ojala que esto acabe pronto. Dijo Jaime

-chicos, tiene que ver esto. Les dijo Giovanna

Rápido fueron a la habitación de la señora, y la vieron postrada en su cama, totalmente sin piel, sin lengua, sin ojos, sin nariz, sin oídos y con la cara en forma de gato. La habitación estaba siendo revisada por el equipo médico forense, tomaban fotos y revisaban detalladamente todo el lugar.

-sí, es igual que en la casa hogar. Dijo Gerardo mientras anotaba en su libreta de notas.

-así es chicos y miren esto. Les señaló al piso

Ellos miraron y se trataban de muchas huellas de gato marcadas en color rojo, pero no eran pequeñas, eran del tamaño de una pisada humana, solo que con esa forma.

-maldición ahora son más o ¿qué? dijo Jaime

-supongo que se multiplica, no se me ocurre nada más. Dijo Gerardo