Capítulo 21: El Portal Misterioso

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Toda la ciudad se había tornado color oscuro, solo la iluminaba la tenue luz de la luna que estaba en ese cielo color rojo, rojo como la sangre, en el viento flotaban pequeñas fibras como si se tratara de tela, un olor fétido aplastaba sus sentidos, y a lo lejos gritos y lamentos se escuchaban. No había duda de que toda la cuidad ya se había transformado en "el lugar oscuro".

Los muchachos no lo podían creer, salieron de la casa y estaban atónitos, ante tal evento, estaban con la boca y ojos bien abiertos.

-¿Qué carajos ha pasado? Preguntó Jaime

-No lo sé. Dijo Gerardo, quien no soltaba a Giovanna de su mano

-¿Es el fin del mundo? ¿Esto es un sueño, una maldita pesadilla? Preguntó Jaime sin dejar de mirar al cielo

-Sin duda estamos en el lugar oscuro, y sin duda todo es obra de Sekhmet, que ya está aquí. Dijo Sindy mientras tomaba el brazo de Jaime

-Entonces ¿ya es el fin? Dijo Giovanna presionándose fuerte contra los brazos de Gerardo

-Tranquilos chicos, no perdamos la fe, debemos seguir adelante y hacer todo lo que podamos, debemos encontrar cuanto antes a Angie y luego ver la forma de acabar con esto. Les dijo Sindy

-Pero ¿por dónde empezar? Dijo Gerardo mirando a todas partes

-Ya sé, ¿recuerdan que cuando agité el báculo, los cascabeles reaccionaron y encendieron una luz?

-Es cierto. Dijo Gerardo animado

-Es verdad. Dijo Jaime

-Pues haremos eso para localizar a Angie, y de paso a Layla y Christian, pues también tienen su cascabel y nos podrían servir de mucha ayuda. Sindy agitó su báculo, el cual emitió una luz de color dorado que salió disparada hacia el cielo.

Los cascabeles de todos comenzaron a emitir una luz de distintos colores dependiendo de cada uno, el de Gerardo, Giovanna, Jaime y los tres que traía Sindy. Y a lo lejos el de Layla y Christian que estaban juntos y que además no estaban muy lejos de allí.

De pronto, algo andaba mal con el báculo y se apagó de repente y se abrió un portal, el cual succionó a Gerardo, Giovanna y Jaime, para luego cerrarse sin dejar rastro. Sindy se quedó preocupada pues no sabía que había pasado, pero fue solo por un instante, ya que se abrió nuevamente un portal y los arrojó de regreso a todos, Layla y Christian ya estaban allí.

-¿Qué carajos fue eso? Dijo Jaime muy molesto mientras se levantaba del piso y sacudía su saco

-Se los juro que no lo sé chicos, me asusté mucho. Dijo Sindy sonriendo nerviosamente

-¿Qué sería ese lugar? Preguntó Gerardo

-¿Qué carajos voy a saber? Jaime seguía molesto y asustado

-¿Esos eran? Dijo Layla

-Sí, zombies, eran malditos zombies. Dijo Christian interrumpiéndola

-Pero ¿Qué sería ese lugar? o ¿Cómo fuimos allá? Dijo Giovanna

-Quizás sea otra dimensión o parte de una ilusión provocada por el báculo, pero no lo sé. Dijo Sindy

-Hey idiotas, ¿ustedes cómo llegaron aquí? Les gritó Jaime a Layla y a Christian

-No lo sabemos, estábamos en un parque y de pronto vimos como todo se tornó oscuro y luego nuestros cascabeles comenzaron a brillar, luego fuimos transportados a aquel lugar en donde había zombies, y después aquí. Dijo Layla

-Demonios, es todo tan confuso. Dijo Christian. -¿Que rayos es esto? ¿El fin del mundo?

-Miren allá. Señaló Giovanna mientras todos hablaban

El Hombre GatoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora