Bite Me, Beta

2

Tal vez ese alfa era un cobarde o tal vez era consciente de que estaba demasiado lastimado como para seguir intentandolo, pero a penas vio la mirada severa del beta, salió corriendo del callejón con la cola entre las patas.

—Fiuuuuu — Yoongi se apoyó sobre sus rodillas, permitiendose relajarse. —No peleaba así desde la secundaria. —miró al joven que seguía impactado en el suelo, con su espalda contra la pared. — Es que mi cara los intimida y deciden no pelear —trató de bromear, pero el chico seguía viendolo con grandes ojos. Se enderezó — Bueno, un omega de pocas palabras, eso es nuevo. Conozco un omega que no para de hablar y decir idioteces. — el joven castaño tragó saliva sonoramente. —Está bien, ten más cuidado la próxima vez. — su cara "amigable" cambió de nuevo a una seria y se dio la vuelta para irse.

—Gracias... —se escuchó el susurro tras de él. Miró al omega. —Usted es un héroe. — Yoongi pudo notar cómo sujetaba los extremos de su campera rota, tratando de cubrirse lo mayor posible.

—Claro que no. No hice nada que cualquiera no hubiera hecho —se quitó su campera militar.

—No es cierto. —se levantó, aún abrazandose a sí mismo. — Tres personas pasaron por allí antes de usted. Ninguno se atrevió a enfrentar a ese alfa.
Usted es un héroe y no dejaré que diga lo contrario.

Yoongi bajó la mirada, ligeramente avergonzado. Éste chico no hablaba y lo primero que se le ocurre decirle es eso. —Ten, usa mi campera. —se la extendió, alzando la vista.

El castaño se sorprendió, pero accedió, sacándose su propio abrigo y tomando el del pelinegro. Min tomó la campera del omega y, por curiosidad, se la probó, mientras el otro se ponía la suya.

El omega se prendió la campera e inconscientemente, llevó su nariz al cuello de ésta, olfateando el olor de ese supuesto beta, mientras lo observaba.

—Wow, hasta parezco millonario — Yoongi mostró una gran sonrisa, mientras se veía con ese abrigo aparentemente costoso —Claramente no eres de por aquí. ¿Qué hace una zona como tú en un omega como éste? —lo miró.

Inevitablemente, una risa salió del omega. El chico frente a él era muy particular, pensó que era un alfa agresivo, pero terminó siendo un "beta" bastante simpático, incluso pudo notar que intentaba bromear para que el mal rato quedara en segundo plano y lo estaba logrando.

— Digamos que me perdí.

—¿Y sabes cómo volver a tu casa?

—Uno siempre sabe cómo volver a casa —sonrió. —Soy Park Jimin —hizo un reverencia que Yoongi devolvió.

—Quizá deberías hospedarte en algún hotel de por aquí hasta que amanezca —sugirió — Alfas como los de hace rato suelen salir a esta hora donde es difícil controlarlos.

—¿Entonces porqué no darme hospedaje en su casa? —inclinó su cabeza hacia el costado, en un intento de cubrir la pregunta con inocencia.

Si Min hubiera estado bebiendo algo, lo hubiera expulsado por sus fosas nasales. — ¿Qué cosas dices? Apenas me conoces.

—Y tú a mí, aún así, viniste a ayudarme.

Yoongi notó cómo la educación y timidez de ese omega iba perdiendose a medida que avanzaban en la comunicación, eso lo preocupó.
Era sabido que muchos omega usan su género como ventaja, pareciendo sumisos y cooperativos, sólo para obtener lo que quieren. Un omega era una criatura tierna, pero también podrían ser los seres más manipuladores y maliciosos de todos.

—Pero yo no te invité a mi casa. —se cruzó de brazos. —Si buscas robarme, te aseguro que no obtendrás nada. No es que tenga algo de valor en casa. Así que, adiós. —salió del callejón.

—¿Me dejaras aquí solo? — Jimin lo siguió. — Por favor, no puedo andar solo por aquí, tú me lo advertiste.

Min se dio la vuelta y se encontró al joven con una cara de súplica.
— ¿Lo tenías planeado?

—¿Qué intentaran violarme? —preguntó con molestia — Claro que no.

— Pero sí tenías planeado ir a mi casa para robarme.

—¡No iba a robarte, tarado! — a Yoongi se la cayó la mandíbula, ¿qué carajos? — Iba a pedirle a alguien que me dé alojo por está noche. — se cruzó de brazos, abultando su labio inferior.

Yoongi achicó la mirada en desconfianza — Entonces no te perdiste, ¿me vas a decir que huiste de casa como un adolescente estúpido?

—No soy un adolescente —desvió la mirada, molesto.

—Pero sí eres estúpido.

—¡Aish! Es la última vez que confío en un tonto alfa.

—¿Alfa?

—Ja, ¿crees que me voy a tragar esa estupidez de que eres un beta? —rió sarcástico — Vi cómo le ganaste a ese alfa, tu contextura no es muy grande que digamos, pero tienes bastante bien trabajado esos músculos —se atrevió a apretar los brazos de Yoongi. — Eres algo pequeño, pero no me engañas, eres un alfa.

Yoongi ladeó una sonrisa.
—¿Entonces sí me veo como un alfa? —se cruzó de brazos.

— ¿Estoy convenciendote de llevarme a tu casa?

—¿Estás liberando feromonas para que yo acceda? — Jimin asintió, orgulloso de su trampa —No funcionará en mi. Lo único que lograrás es atraer más alfas.

—¡Maldita sea contigo! —se abrazó a sí mismo, mirando a sus costados.
Ese comentario lo asustó. Qué tonto fue en tratar de convencerlo de esa forma.

—Pensé que eras un omega en peligro, pero resultaste ser un verdadero fastidio. —suspiró, apretando el puente de su nariz — vamos, sólo te dejaré quedar una noche. Luego, vas a volver a tu casa y te dejaras de dramas adolescentes, ¿oíste?

Jimin hizo una mueca desconforme pero asintió.
Siguió a Yoongi y se abrazó de nuevo a esa campera, olfateando, otra vez, le era inevitable. Qué aroma tan tranquilizador.