Bite Me, Beta

10

Cerró la puerta de la habitación, saliendo de la casa.

— ¿Y? ¿Hyung, hay algo malo? — Jungkook preguntó al ver la cara impactada de Yoongi.

— Tengo un omega en celo en mi habitación.

Namjoon aguantó la risa — ¿Qué?

— Park Jimin, el omega de anoche, está en mi habitación y creo que ha hecho un nido con mi ropa.

— ¿Qué? ¿Quién es Park Jimin y por qué se cree con el derecho de entrar a su casa para hacer eso? — esquivó a Yoongi, entrando a la casa y dirigiéndose hacia la habitación

— ¡Jungkook, no! — lo siguió pero no tuvo que detenerlo. A penas Jeon llegó a la puerta del cuarto, se apartó, tapando su nariz — Caray, éste omega está liberando muchas feromonas.

Namjoon también entró y tuvo que tapar su nariz. Al estar unido ya a una omega, la feromona de otro buscando atraer a una pareja, le resultaba desagradable.

Sin mencionar que se podía oír un quejido de dolor desde el otro lado de la habitación, algo que ponía los pelos de Yoongi en punta.

— Perdón, Yoongi, creo que me voy a arriesgar a volver a casa antes de que su olor se me impregne y me vaya peor. — Kim se apresuró a salir.

— No, no, no. Tienes que ayudarme, ¡yo no sé de estas cosas! —pero Namjoon ya había salido.

— Hyung, yo lo voy a ayudar — Jungkook aún cubría su nariz — Sólo dígame qué hacer.

— ¿Y hay algo que hacer durante éste período?

— Bueno, yo siempre he usado inhibidores, lo que disminuye los síntomas y no siento dolores o molestias, incluso oculta un poco mis feromonas. Sin embargo, me pongo muy cachondo y necesito urgentemente atención, si sabe a lo que me refiero.

— Caray, ustedes son tan... — Yoongi rascó su nuca. — Siempre he evitado visitarte durante ese período, incluso me salía de casa cuando a mis madres les pasaba, ustedes son tan raros.

Jungkook rió — Hyung, el raro es usted. Aún así, éste omega parece estar en pleno celo, debe estar sintiendo mucho dolor, incluso un poco de estrés si es que ha hecho un nido con sus ropas.

— Sí, eso mencionó.

— ¿Hace cuánto que lo conoce? Ha de tener un gran lazo con usted, o le ha de tener mucha confianza como para usar su ropa como nido.

— ¿Por qué te estas riendo? — preguntó ante la sonrisa burlona que Jungkook le daba.

— ¿No cree que debe ayudarlo, hyung?

— No tengo otra opción, está metido en mi casa, echarlo a la calle sería una locura.

— Pues... Ayudelo —se alzó de hombros.

— Si supiera cómo. Tal vez deba preguntarle. — sostuvo la perilla de la puerta y Jungkook retuvo su mano.

— Hyung, ese omega en celo sólo busca una cosa, y esa única cosa es la que calmará sus dolores.

— ¿Cómo pastillas o algo así?

— Más bien pensaba en su pene, hyung.

— ¡Bastardo! —se sonrojó rápidamente, dando un golpe en la cabeza al menor. — Ahora no sé con qué cara entrar, desgraciado — cubrió parte de su rostro con el brazo.

— Es broma, hyung. Sólo hágalo sentir seguro y todo pasará rápido.

— Entiendo.

— Iba a quedarme a dormir, pero se ve que no podré — sonrió inocentemente. — Volveré a casa, hyung. Prometo venir bien temprano mañana a ayudarlo. Aunque no dude en llamar si necesita algo.