Erine Scamande tiene muy claras sus metas, el amor no es algo que se encuentre dentro de estas pero todo cambia cuando se reencuentra con Charlie Weasley.
Y es que, ¿quién puede resistirse a sus encantos?
( charlie weasley x oc )
( harry potter...
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Mi nombre es Erine, Erine Arissa Scamander, hace casi cuatro años que terminé con mis estudios en Hogwarts y comencé con mi entrenamiento para convertirme en aurora.
Aunque mi entrenamiento lo comencé hace tres años, pues al principio no estaba muy segura de lo que quería y al final lo decidí.
Soy la alumna y protegida de Kingsley Shacklebolt, uno de los mejores aurores que tiene el ministerio y toda la comunidad mágica. Él era un buen amigo de mi madre, por lo que no dudó en hacerme su pupila en cuanto le dije que deseaba convertirme en aurora.
-Tus habilidades son buenas, pero no es suficiente, debes mejorar- su voz era dura aunque ya me había acostumbrado.
Intentaba recuperar la respiración, puse mis manos en mis rodillas e inhale y exhale hasta regular mi respiración.
Me incorporé y miré a mi maestro con una sonrisa para seguir atacándolo. Sin mayor dificultad, el hombre esquivaba mis ataques.
-Busca el punto ciego, intenta predecir los ataques de tu enemigo antes de que los lancen.
Hacer magia no verbal era lo que más se me complicaba y debido a ello, Kingsley me hacía practicarlo más.
Lancé un hechizo y enseguida otro, hice una aparición y mientras mi profesor esquivaba el segundo hechizo, lo ataque por la espalda.
Mi táctica había funcionado y el moreno me sonrió satisfecho mientras se levantaba del suelo.
-Muy bien, Scamander. Me complace decir que has concluido con tu entrenamiento como auror.
Sonreí emocionada.
-Gracias, Kingsley. Eres el mejor maestro y sin tu ayuda nunca lo hubiera logrado.
Me dejé caer en el suelo y me relajé un poco. Aún estaba llena de sudor y muy acalorada por lo que el suelo me refrescaba bastante.
Cerré los ojos y disfruté mi corta tranquilidad.
-No cantes victoria aún, debemos irnos.
Abrí los ojos y el hombre me dirigió una mirada que comprendí a la perfección.
-Entiendo.
De un salto me puse de pie y limpié el sudor de mi frente con el borde de mi blusa luego sacudí el polvo de mi pantalón.
Rápidamente fui a asearme y cambiarme de ropas. Una vez lista, me encontré con mi maestro y salimos de aquel edificio.
Amarre mi cabello en una coleta y acomodé mi túnica mientras caminábamos. Era tarde y sentía el frio de la noche recorrer mi rostro.
-Creí que debías cuidar al primer ministro muggle- dije al recodar.
-Hay cosas más importantes que el primer ministro, además le pedí a alguien que me cubriera.
Sonreí y tomé el brazo de Kingsley para hacer una aparición.
Desde que Dumbledore hizo el llamado para re agrupar a la orden, no dudé ni un segundo en unirme.
Aparecimos en un lugar que no conocía, allí habían algunas personas pero al primero que vi fue a Ojo loco.
Corrí a abrazar a Tonks en cuanto la vi, con ella paso la mayor parte del tiempo cuando estoy en el ministerio, además de que fuimos compañeras en el colegio.
Yo era ravenclaw y ella hufflepuff. Ella es dos años mayor que yo. Recién cumplí los veintiuno.
-Me alegra tanto verte- le dije. Hacía días que no pisaba el ministerio por lo que no había visto a mi amiga.
-Y a mi- nos separamos- Mira esto- me mostró su mano con emoción.
Había un anillo en su dedo anular y no pude evitar gritar emocionada.
-Felicidades- la abracé con fuerza. Miré a Lupin- a los dos.
-Basta de sentimentalismo- dijo ojo loco. Reí- repasemos el plan.
Formamos un círculo a su alrededor. Me quedé junto a mi maestro y presté atención a las palabras del hombre.
-Debemos extraer a Harry Potter y llevarlo a un lugar seguro. Voldemort no tiene ni idea, pero debemos tomar todas la precauciones posibles e imaginar que sabe cada uno de nuestros movimientos y por ello todos deben dar su consentimiento, si alguien no accede, se puede marchar ahora mismo.
Moody miró a todos los presentes uno por uno. Ninguno dijimos nada, todos estábamos de acuerdo y consientes de las posibles desgracias que podrían ocurrir.
-En realidad, yo prefiero no ir- todos miramos a Mundungus.
No me agrada en lo absoluto ese sujeto y realmente no entendía que hacía allí.
-Tu no tienes opción- le dijo Moody.
Mundungus miró mal al mago pero no volvió a hablar.
Moody nos explicó el plan.
-Siete de ustedes tomarán una poción multijugos y se transformaran en Potter. Comencemos con eso, ¿quiénes serán los valientes?
Miré a Kingsley y este me dio un asentimiento.
Di un paso al frente al igual que otras seis personas.
Ron, Hermione, Fred, George, Fleur, Mundungus y yo seríamos los falsos Potter.
-Bien, los demás protegerán a un Potter, pero ya veremos eso luego cuando estemos todos- hizo una pausa y nos miró- Creerán que haremos la extracción el día treinta pero esa es una falsa pista. Lo haremos una semana antes. Hasta entonces.
Y se desvaneció, al igual que todos los demás.
Al día siguiente fui al ministerio para ser registrada oficialmente como auror y después de algunos exámenes de todo tipo fui registrada. Era oficial, además me habían dejado bajo el cargo de Kingsley.
Nada me podía hacer más feliz.
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