Taylor apenas había podido dormir bien esa noche. Había esperado la llamada de Camila hasta tarde, pero su amiga no había llamado. ¿Que habría pasado? ¡Ella nunca le había fallado antes!
Hace unas semanas, la chica había tenido una sorpresa desagradable. Su menstruación, siempre correcto y en la misma fecha, no había llegado. A pesar de parecerle extraño, la jugadora de voleibol no se preocupó. Los retrasos menstruales les pasaba a todas.
Lamentablemente pasaron los días y la tan esperada menstruación no apareció. Eso le puso a Taylor un poco nerviosa, principalmente porque sabía que hace algún tiempo había estado teniendo relaciones sexuales con Liam.
Ella no era virgen cuando conoció al nadador, pero su fama de mujeriego, la hizo preservarse por más tiempo y no ceder ante las constantes peticiones del hermano de su amiga.
La primera vez fue después de más de dos meses de estar saliendo. Y desde entonces, lo estaban haciendo con más frecuencia. A veces recordaba aún más preocupada, que el deseo habia sido mayor que la responsabilidad y ellos tuvieron sexo sin condón.Decidida a compartir esa preocupación con alguien, Taylor había llamado a Camila el día anterior. Pero no había conseguido hablar con su amiga.
En aquella mañana lluviosa de martes, salió de casa decidida a contarle todo a Camila y tomar la valentía de hacerse una prueba de embarazo.
Tampoco quería considerar las consecuencias si se confirmaba esa posibilidad. Liam era un irresponsable y ella tenía toda una carrera como jugadora por delante. ¡No podía estar embarazada! ¡Eso arruinaría por completo su vida!
Muy ansiosa y preocupada, la chica permaneció en silencio camino a la universidad.
"-Ayúdame Dios mio! Si me ayudas, prometo no fallarte más!" – ella rogó un poco nerviosa.
Lo último que quería Camila después de aquel infernal lunes era escuchar el lloriqueo de Taylor tan temprano en la mañana. Pero su amiga tenía una cara tan preocupada, que la levantadora pensó que era mejor escucharla.
-¡No puedo creer que hayas tenido sexo sin condón, Taylor! – fue lo que logró decir después de ser sorprendida por las sospechas de su amiga – ¡Aún más sabiendo que mi hermano es un mujeriego!
-No me regañarás ahora, ¿verdad? – preguntó con una cara triste. – Estoy desesperada, ¡Mila! ¡No puedo estar embarazada! ¿Que dirán mis padres?
-Creo que deberías hacerte una prueba pronto. ¡En la farmacia venden a montones! – dijo Camila – Después del resultado, pensaremos en qué hacer. ¿Ya le has dicho a Liam?
-¡Por supuesto que no! ¿Estás loca? Él pensará que fue a propósito!
-Él es el padre de ese bebé si estás realmente embarazada. ¡Y tendrá que asumir la responsabilidad de lo que ha hecho!
-¡Las cosas no son tan simples, Mila!
-Sí lo son. Ustedes lo hicieron juntos, y si ésto se confirma, juntos asumirán las consecuencias.
-¿Vienes conmigo a la farmacia después de la clase? – preguntó Taylor con un tono suplicante en su voz. – ¡No quiero pasar por ésto sola!
Camila asintió con la cabeza.
-¡Por supuesto que lo haré! ¡Anímate y todo estará bien! Ya lo verás.
En ese momento, Lauren y Ally pasaron conversando por ellas. La primera todavía se volvió y miró a Camila. Pero la chica bajó la cabeza. No quería el menor contacto con ella. Tenía que olvidarla.
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Jugando Con El Amor ||Camren||
FanfictionLauren una jugadora de voleibol estaba feliz por haber conseguido su tan soñada beca en la Universidad Metropolitana, más aún por estar nuevamente al lado de su familia. Pero por lo que no contaba es enamorarse de su nueva capitana de equipo, ésta q...