"-No puedo pasar toda la mañana mirándola!" – pensó Camila tratando de apartar la vista de la figura de Lauren en pantalones cortos y biquini, divirtiéndose en la piscina con los niños.
¿Cómo podría lucir aún más hermosa, incluso con el pelo mojado, saltando y peleando por el balón con los mocosos? Parecía completamente cómoda entre ellos. Como si fuera nada más que una niña grande.
-¡Una deliciosa "niña"! – recordó Camila con un escalofrío recorriendo su cuerpo.
En el pequeño campo donde se improvisó una cancha de voleibol, la niños se divirtieron mucho y compitieron con uñas y dientes. Todos querían ganar y varias veces la "tía" Camila tuvo que entrar en cancha para evitar que las discusiones generaran peleas.
Dentro de la casa, Sandra y algunas médicas y dentistas, atendieron a los niños del Hogar y de la región. En la cocina, las "comadres" que se encargaban del orfanato y varias madres de los alrededores, preparaban un almuerzo especial, gracias a las donaciones que habían conseguido. El delicioso olor de la "comida de olla", salía por la ventana e hizo que todos tuvieran hambre.
Fue después del mediodía cuando toda esa tropa de 30 niños, más los agregados vecinos, se sentaron en el patio cubierto para almorzar.
Camila vio a Lauren recoger de la piscina una serie de pelotitas de plástico que había usado en los juegos.
-La sirena en el agua y la gatita junto a la piscina, ¿no vendrán a comer? – preguntó la Dra. Sandra, con su plato ya hecho y los utensilios en la mano.
Las dos jugadoras se voltearon sonriendo.
-Ya nos vamos, Sandra. – dijo Camila. Y luego dirigiéndose a Lauren – Deberías salir de ahí, te vas a enfermar por estar tanto tiempo en esa piscina.
Lauren sonrió. Saber que Camila realmente se preocupaba por ella, valía varios resfriados seguidos.
-¿Me traerías el albornoz, por favor? – Preguntó la chica subiendo la escalera y tiritando de frío – ¡Me estoy congelando!
Camila le entregó el albornoz a Lauren. Y la observó vestirlo atentamente.
-Te llevaste bien con los niños. – comentó mientras servían la comida puesta en una gran mesa – No pensé que estarías tan entusiasmada.
Lauren sonrió. Era la segunda vez en dos días que alguien le decía eso.
-¡Estoy descubriendo mi lado niñera! – reveló – Acabo de ganarme una hermanita muy linda, ¿lo sabías?
Camila lo extrañó. No recordaba que Clara estuviera embarazada.
-¡No es de mi mamá! – Aclaró Lauren al ver la cara confundida de la chica – Mi papá lo estuvo engañando y embarazó a la mujer, ahora los dos se separaron.
Camila lo escuchó todo muy sorprendida.
-¿Por qué no me lo dijiste, Lauren? Debe estar siendo difícil para ti! – dijo la chica cuando se sentaron lado a lado en una mesa para almorzar.
-¿La separación? ¡Nah! Chris y yo solo nos enteramos ahora, pero hace dos años que ellos mantenían un matrimonio de fachada.
Camila se sorprendió con la noticia. ¿Cómo podría Lauren mantener el control y la calma mientras su familia se desmorona? Tenía que tener la sangre muy fría.
-Y tu hermana, ¿como es ella?
-¿Taylor?
-¿Ese es el nombre?
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Jugando Con El Amor ||Camren||
FanfictionLauren una jugadora de voleibol estaba feliz por haber conseguido su tan soñada beca en la Universidad Metropolitana, más aún por estar nuevamente al lado de su familia. Pero por lo que no contaba es enamorarse de su nueva capitana de equipo, ésta q...