Jugando Con El Amor ||Camren||

Las varias formas de ganar...

Lauren se despertó la mañana del juego, siendo sacudida por su hermano. Chris vestía el abrigo deportivo de la Metropolitana y parecía muy emocionado.

-¡Hey, Laur! ¡Despierta! – Le dijo a su somnolienta hermana. – ¡Tenemos que ir al juego!

Perezosamente la chica se obligó a levantarse. Extrañaba el cálido cuerpo de Camila junto al suyo. Su novia había preferido dormir en su propia cama en la víspera del juego.

-¡Dejar la cama contigo durmiendo es mucho más difícil! – eso fue lo que  dijo sonriendo cuando la delantero preguntó el por qué de aquello – ¡Tengo que concentrarme Lo! Y cerca de ti es mucho más difícil.

Mismo sin entender la preferencia de su novia, Lauren no dijo nada y las dos durmieron separadas. Combinaron de encontrarse en el gimnasio, un poco antes del partido.

Media hora después de ser despertada por Chris, Lauren finalmente salía de casa acompañada de su hermano y su primo. Todavía se detendrían en la casa de Rebecca para recogerla a ella y a Tay por supuesto. Todos querían ver ese juego decisivo para la universidad.

Las filas para ingresar al gimnasio de la Federal estaban inmensas, pero gracias a la presencia de Lauren, con la tarjeta de jugadora, lograron burlar la seguridad y entraron sin mayores problemas. Todos pensaban que era más una atleta de la Metropolitana que llegaba con su familia.

Consiguieron un buen lugar y después de acomodarse y garantizar las sillas, Lauren y su hermano fueron a buscar a sus respectivas novias.

Chris encontró a Ally en la entrada de los vestidores y allí se quedaron hablando. Lauren solo pudo hablar con Camila después de que la levantadora haya escuchado todas las instrucciones de la técnica.

La sintió nerviosa cuando la abrazó.

-¡Amor, estás temblando! – dijo – ¿Estás bien?

La levantadora asintió.

-Tengo mucha presión encima. Todos esperan mucho de mí hoy – dijo la chica, señalando un rincón de las gradas, donde algunos hombres hablaban – Son unos cazatalentos de grandes equipos del Sur. Vinieron especialmente para ver este juego.

-Lo sé, Camz. Pero no te dejes llevar por eso, ¿de acuerdo? ¡Concéntrate en el juego!

Camila abrazó a Lauren con fuerza.

-¡Gracias por estar aquí, Lo! ¡Es muy importante que estés aquí conmigo!

-¡Siempre te apoyaré y te animaré, mi ángel! ¡Para mí ya ganaste!

Las sonrisas y el beso fue inevitable, incluso allí, a la vista de tanta gente.

-¡Te amo! – dijo Lauren antes de escuchar a Dinah convocar a todo el equipo. El juego finalmente iba a comenzar. – ¡Buena suerte!

La levantadora le arrojó otro beso y fue a reunirse con sus compañeras.

La hinchada de la Federal en sus camisetas rojas dominaron la mayoría de las gradas. Festejaban todo el tiempo, gritando, cantando y abucheando. Valía de todo para desconcentrar a las jugadoras del equipo de la Metropolitana.

En un número más pequeño, pero confiados, los hinchas del equipo de Camila agitaron sus camisas y banderas azules, gritando los nombres de las jugadoras, incentivándolas.

Los sets fueron todos muy equilibrados. Disputados punto a punto. Parecía que ambos equipos estaban dando su vida en ese partido, lo que proporcionó a los espectadores un gran espectáculo de voleibol.