El tercer juego no fue muy fácil. Valía la clasificación para la semifinal Regional y tanto el equipo Metropolitana como la Universidad Americana, querían ganar.
Dinah decidió dejar descansar a Ally. La líbero seguía con la mano lesionada del último juego, y la técnica prefirió reemplazarla por Sarah. Ally estaba al cuidado de la Dra. Sandra y su esposo, el fisioterapeuta, Fabio.
Camila no estaba rindiendo tanto como en los dos primeros juegos. Primero porque ella y Lauren todavía estaban peleadas y luego porque había captado las miradas atravesadas de Malú para con la atacante. ¿Que estaba pasando allí? Todo eso la distrajo un poco.
La entrenadora le llamó la atención en uno de los tiempos solicitados durante el juego.
-Camila tienes que despertar!. El bloqueo está adivinando todos tus movimientos con Taylor y las chicas del medio. ¿Por qué no estás haciendo jugar a Lauren? ¡Ella está libre! Vamos a variar las jugadas.
-¡Lo haré, Dinah! – dijo la chica intercambiando una mirada con la atacante.
La levantadora siguió el consejo de la técnica y gradualmente el equipo Metropolitana volvió a levantarse. Lauren jugó con una furia que contagió al equipo. Cuando golpeaba la pelota, parecía que quería hundir la cancha adversaria.
Además, ella gritaba y celebraba cada punto hecho por el equipo. Abrazaba las jugadoras, saltaba, vibraba con ellas, animándolas y dándoles la garra y confianza para continuar el juego.
-¿Lo vas a dejar? – Taylor preguntó a Camila durante uno de los tiempos técnicos.
-¿Dejar qué? – preguntó la levantadora preocupada por el juego.
-¿Que la novata siga haciendo el papel que debería ser tuyo? – espetó la rubia –Si sigue así, Dinah la nombrará capitana antes del final del campeonato!
Camila volvió su mirada hacia Lauren, rodeada por las otras jugadoras, hablando y alentando sobre el juego.
-No me importar eso, Taylor. Solo el equipo!
Taylor se encogió de hombros burlonamente.
- ¡Si tú lo dices!
La levantadora no pudo evitar pensar en las palabras de su amiga. Nunca le había preocupado la vanidad. Solo quería poder jugar lo máximo posible y ayudar al equipo a ganar. Pero no pudo evitar preguntarse por qué Lauren estaba tan animada así.
Después del juego, una victoria sufrida asegurada, clasificación garantizada, las chicas querían celebrar juntas. Igual no queriendo, Camila decidió irse. Lauren también iría, tal vez podrían hablar.
El lugar elegido fue un bar. Todas servidas, hablando animadamente, Camila aprovechó que Taylor había llamado a Liam y se acercó a la delantera.
-¿Puedo hablar contigo un minuto? – preguntó.
Lauren asintió y ambas salieron del local. Es mejor escapar de los oídos ajenos.
-¡Te extrañé el fin de semana! – comenzó Camila – ¡Desapareciste!
-Te estaba dando tiempo para que pensaras y decidieras romper con Austin. Recuerdo que dijiste que aún tenías dudas.
-¡Lauren, no vamos a insistir en eso! Ya te pedí disculpas por lo que hice. ¿Por qué no podemos estar bien?
-Tal vez porque no confías en mí. ¿Y encima estás saliendo con un chico? –preguntó la atacante de forma sarcástica.
-Es que no me explicas las cosas, Lauren. Sé que fuiste a ver a Kendall durante el fin de semana. Y las dos sabemos que ustedes eran más que amigas. ¿Cómo quieres que me sienta? ¡Es normal que desconfíe!
ESTÁS LEYENDO
Jugando Con El Amor ||Camren||
FanfictionLauren una jugadora de voleibol estaba feliz por haber conseguido su tan soñada beca en la Universidad Metropolitana, más aún por estar nuevamente al lado de su familia. Pero por lo que no contaba es enamorarse de su nueva capitana de equipo, ésta q...