Capítulo 17 "Erika"

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—Hola, ¿Quién habla?

—Hola Erika, habla Leonel.

—Leonel... ¿pasa algo?

—Quería saber si estabas bien.

—Mañana hay que vernos y platicamos en la escuela. ¿Sí?

—Por supuesto.

Leonel había llegado a la escuela, siendo ya jueves, encontrando a Erika en la cooperativa donde habían acordado verse.

—Hola Erika —saluda Leonel mientras se sienta frente a ella.

—Hola Leonel —contesta Erika sin energía.

—¿Qué pasa? ¿Tienes algo?

—Bueno..., si hay algo, ya sabes, lo de mi primo y mi ex, pero no es todo, tengo problemas en casa, ya sabes, mi padre no es bueno y sigue maltratando a mi madre.

—Entiendo..., bueno, eso es...

—No es todo —desviando la mirada a todos lados, menos a Leonel, bajando la voz—, estoy..., estoy embarazada.

—¡Qué? —Pensó Leonel—, mate al padre del hijo de Erika.

—Y-o, yo tenía un plan para irme a vivir con mi ex, pero todo se fue al carajo..., y no sé qué hacer, ¿entiendes?, mi padre me va echar y no sé... —explica entre limpiándose lágrimas.

—Yo te ayudaré, ahora mismo tengo dinero, me dieron un anticipo pero me darán la otra parte el sábado luego de verme jugar en un partido, si juego bien, me darán una gran suma de dinero, yo te pago un departamento para que puedas vivir ahí, ¿te parece?

—Leonel es muy generoso eso pero..., no puedo aceptar eso de ti.

—Acéptalo por favor, es lo menos que puedo hacer, me importas aun y quiero ayudarte —insiste Leonel mostrando mucha generosidad, pero por adentro otra cosa.

—¡Culpa! —susurra al oído Peccatum—, sientes una gran culpa y por eso haces esto. No es que te importen los demás, es culpa..., ahora deseas no haber deseado tales deseos, ¿no es así?, pero eres egoísta, no pensaste en los demás —exclama Peccatum.

—Muchas gracias Leonel, sabía que eras buen muchacho —algo calmada y con voz suave Erika.

—... ¿podemos ir a ver los partidos de voleibol?

—Claro, vamos a ver, pero primero voy a comprar algo y vamos.

—Por supuesto.

Fueron entonces a las canchas de voleibol a ver los partidos, apenas en la ceremonia del torneo. Comieron y charlaron un poco en cada partido, Leonel intentando animar a Erika, quien se dio cuenta hasta la final, que Ashley no estaba presente jugando, siendo una de las mejores, aunque sin ella el equipo igualo logro ganar el torneo, aunque a duras penas.

—Ashley...

—¿Qué? —pregunta Leonel quien apenas escucho a Erika.

—Ashley perdió a su novio también, pero no es para no presentarse, digo, sé que sus padres no están con ella, pero es muy rica, guapa y talentosa, yo me sentiría mejor si fuera ella —expresa Erika.

—No Erika, te equivocas —piensas Leonel—, no sabes lo que se siente que tus padres no estén, ella odia a los suyos, pero ella ha de sufrir porque casi nunca los tiene, no fue educada y por eso es así, es triste, pero no es su culpa ser así, además ella se ha sentir muy mal, engaño a su novio..., conmigo.

—Si es que piensas eso, alégrate entonces en su lugar, que eres fuerte —comenta Leonel.

—Eres falso —susurra Peccatum—, no dices lo que sabes, o no lo dices totalmente, quieres gritar a todos que se equivocan, quieres que te escuchen, y sabes tienes razón, pero no hablas, curioso entre los humanos, quien más sabe es quien más caya, y quien menos sabe, es quien tiene menos la boca cerrada.

Peccatum (Pecado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora