Capítulo 13; Amabilidad y confianza. [2/2]

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México aún seguía al lado del Americano el cual este por lo menos ya se había sentado en el suelo. Empezó a dolerle la cabeza, se sentía mareado, era como si le hubieran dado el tremendo golpe de su vida.

—¿Te ayudo a levantarte? —Preguntó México preocupado por la situación de su vecino/amigo tratando de tomarlo cuidadosamente del brazo.

—¡No, no quiero tu ayuda! —De mala manera, USA jalo su brazo lo cual fue una pésima idea, pues sintió como un tendón se jalaba, lo que hizo volver a estar acostado en el suelo mientras soltaba un quejido de dolor —N-no necesito tu ayuda... Prefiero morirne —respondió a regañadientes mientras lo miraba con asco.

—¿Seguro?

—Cien por ciento seguro.

—USA! Canadá lo regaño.

México se sintió algo triste por tal respuesta, realmente quería ayudarlo.

—Por mi mejor —Dijo Rusia acercándose a la bolita, casi al lado de México para ser exactos.

—¡Rusia! —México lo regañó volteándolo a ver —¡No seas ojete!

—Canadá, ¿crees poder llevar a tu hermano a descansar? —Preguntó ONU.

—Oui biensur.
(, claro.)

Está bien, USA tomate la semana, seguirás con las replicas así que será mejor que no salgas de casa.

—Fine —USA aceptó de mala gana, no lo malentendamos, que ONU diera días así era algo genial, pero a USA no le gustaba siendo hoy su día especial, aparte de cuidarse sabia que su hermano lo estaría vigilando muy de cerca para que no se hiciera más daño.

Mientras era levantado por Canadá y se dirigían a la salida, todos volvían a sus lugares como si nada hubiera pasado. México seguía preocupado y triste por su compañero.
Rusia al notar la cara larga de México no pudo evitar sentirse apenado.

—¿Te sientes bien? —Preguntó poniéndose casi de su altura llevando su mano a su hombro.

—Sí, sólo es este wey. Nunca le había pasado algo así. Por lo menos no en mucho tiempo.

—¿Por qué te preocupas por alguien como él? Te trata muy mal...

—Lo sé, pero carnal, es mi amigo... O al menos lo fue en un tiempo, —Agachó la mirada —en serio me pone mal verlo así.

Rusia hizo una mueca, ¿ahora qué?

Poso una sonrisa en su rostro y trato de cambiar el tema.

—Entonces, ¿feliz por la noticia?

—¿Eh? Oh, fue inesperado a decir verdad —Paso una mano a su espalda —Creí que todo se iría al caño...

—Para nada.

México sonrió débilmente para volver a pensar en el de cincuenta estrellas. Al parecer era algo inevitable no ponerlo de mejor ánimo. Rusia se estaba dando por vencido.

Mientras México pensaba en algo tomo al eslavo del brazo, el chico de ushanka volteó a verlo confundido.

—¿Me harías un favor?

USA ya hacia en cama harto de escuchar uno de los miles sermones que el tipo de sombrero le daba, odiaba que Canadá lo llamara por este tipo de situaciones, al parecer no sabia otra cosa más que regañarlo.

—I can not leave you alone because this kind of thing happens! And still you do not know how to take care of yourself! —Vociferó UK viendo a su hijo de cincuenta estrellas quien solo estaba cruzado de brazos esperando a que su querido padre terminara de regañarlo.
(¡No puedo dejarte solo porque pasan este tipo de cosas! ¡Y aún tú no sabes cuidarte!)

«Esto no es Amor.»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora