‧:❉:‧ En Casa De Los Abuelos ‧:❉:‧

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Ya faltaban pocos minutos para llegar, ya tenía mi botella con agua lista para vertirle en la cara a Heste. Esto iba a ser genial, sentía la adrenalina y emoción recorrer por mi cuerpo.
Una cerca pintada de blanca ya se divisaba, ya estamos a segundos de llegar, volteo a mirar a mis hermanos durmientes.

- Esta es la hacienda de tus abuelos - dijo asombrado, pues si.

Este lugar constaba con un gran jardín donde mi abuela sembraba sus plantas, árboles frutales etc... Y ahora, parecían estar descuidados, una gran parte de ellos se notaba muertos. Contaba con dos estacionamientos, un parque que era de sus hijos ero fue remodelado cuando tuvo sus primeros nietos, la casa era inmensa, era de madera y contenía aire acondicionado, mis abuelos vivieron una vida envidiable.
Mi cara cambió de expresión.

- No te preocupes por las plantas, puedo ayudarte a podarlas - dijo Jaden mientras me miraba directo a los ojos, cosa que me incomodo.

- Gracias - pude decir.

Deje esos pensamientos de mi cabeza y me centre en mi venganza.
Jaden entró seguido de papa.
Ellos se estacionar on dentro del estacionamiento, le dirigí a Jaden a otra parte del estacionamiento, habían unos carros ya, estaba unos tíos y primos.
Antes de bajar del carro voltee a ver a mis hermanos, ellos aún dormían. Aproveche y le lanze agua helada a Hest, abrí la puerta y salí corriendo, oí los gritos de ella diciendo: "Austin apártate", "detente demonio", "me las pagarás", "¡Mamá!".
Llegue hasta la entrada de la casa, me escondí tras unos árboles.

- ¿Donde estas? - grito Heste.

- Heste no corras, puedes torpezar - advirtió mamá.

- Tía - escuche la voz que tanto anhelaba oír por más de 2 meses.

- ¡Zyan! - grite y me avalanze hasta el.

- Oh, Beli - dijo el.

Nos abrazamos como pudimos.

- ¡Zyan! - Heste noto su aparición.

Si, Zyan era el primo favorita de todas. Era el chico favorito de todas, era el que siempre te acolita en todo, esta ahí en las buenas, en las malas y en las peores más que nunca, el que siempre te sube el autoestima, el que te hacer arrepentirte de cualquier broma que le hagas, es el el rey de las bromas. Supongo que de ahí aprendió Heste.

- Heste, Hazel - las clones se nos juntaron.

- Tu me las vas a pagar - Heste me pellizco la piel. Solté un chillido.

- Heste - le grite.

- Linda - escuche la voz de mamá regañandome.

- ¡Ya ves! Por lanzarme agua.

- No es justo mamá, ella siempre lo hace y me retas a mi - dije enojada.

- Pero debes poner el ejemplo - bajó sus maletas con ruedas.

- Pero ella comienza, mamá - me cruze de brazos aún más enojada.

- Ya cariño, no peleen - pasó papa con otras maletas en el hombro y una en su mano.

Jaden pasó con Liam y Austin hacia el otro estacionamiento.
Unas primas pequeñas pasaron cerca de nosotros.

- Lin - si, tenía demasiados apodos yo. Esta vez, era Chelsye, la prima menor de la familia de papa.

- Hola chiquita - me agache para saludarla.

Esta solo tenia 7 años.

- Ya no soy chiquita - dijo finjiendo enojo.

PARA SIEMPRE (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora