ᴀʀᴛɪsᴛᴀ ᴄᴀʟʟᴇᴊᴇʀᴏ | ᴄʜᴀɴᴄʜᴀɴɢ.

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Los días pasaban y el pequeño ChangBin estaba cómo un viciado al celular hablando con Chan, desde las madrugadas antes de dormir hasta en medio de sus clases.

Y aunque el mayor le dijera que preste atención a sus clases ChangBin esperaba a que el rubio tuviese un tiempo libre para responderle e independiente de la clase en la que se encontrara se pegaba al celular.

Sus amistades, y su exnovio, notaron esto.

El pequeño traía unas ojeras algo pronunciadas que oscurecian más su aspecto, que ya de por sí tenía un tono muy oscuro, tipo dark.

Pero un dark tierno, y las ojeras junto a su aspecto de muerto viviente, dado que pasaba con sueño, le quitaban lo tierno a lo dark.

Claro que el castaño aseguraba estar bien, intentaba ocultar un poco las ojeras pero dado a que mayormente se quedaba dormido no tenía tiempo de maquillarse.

Cómo fuera ChangBin estaba agotado, y en el fondo lo sabía, no dijo nada hasta que ya un día colapsó y cayó desmayado en medio de una de sus clases.

Minho, un amigo y compañero que repitió un año, fue quién estaba cerca en ese momento para ayudarle y alertar a los profesores.

Luego la universidad se encargó de avisar a sus familiares, quienes le llevaron a su antigüo hogar para poder cuidar de él.

Félix estaba como un maniático preguntándole a Minho sobre su exnovio, Hyunjin fue en rescate de el mayor y logró quitarle al pequeño australiano de encima y así preguntarle sobre su amigo, a quién por la tarde iría a visitar.

En cuanto el pequeño despertó después de unas 6 horas de estar completamente dormido y al abrir los ojos se encontró a su hermana a su lado sacándole fotos.

–¿Qué haces?.–Gruñó el castaño cubriendo la cámara con su mano.

–Te ves adorable cuando duermes.–Sonrió la mujer.

–Ya sé pero...–Un bostezo le interrumpió.–Yo debería estar en la universidad.

–Ya es de noche, lo único que debes hacer ahora es dormir y asegurarle a tus amigos que estás bien.–La mayor se levantó.–Hyunjinnie vino a verte pero se fue hace un rato porque no despertabas.

Al menor se le vino a la mente la imagen de BangChan y tomó su celular con prisa, abrió el chat del rubio y después de escribirle como 30 "lo siento" le explicó la situación.

El mayor tardó en responder pero le tranquilizó y pidió que descansara, el menor accedió a regañadientes y se despidió de él para luego irse a comer.

Después de pasar un buen rato pidiéndole a su madre que le permitiera irse a su departamento, y obviamente recibir un no como respuesta, se recostó en su antigua habitación para quedarse mirando el techo.

Tardó bastante en dormirse, ya al día siguiente Hyunjin prácticamente le rogó que no fuese a la universidad, claro que para aceptar el menor tuvo que prometer conseguirle los apuntes e informarle sobre lo ocurrido ese día.

ChangBin recién al medio día tuvo el permiso para volver a su departamento, al llegar lo único que hizo fue esperar a que el rubio respondiera sus mensajes y colocar la televisión para evitar que el departamento quedara en completo silencio.

Para perder el tiempo se puso a rapear en su habitación, cualquier cosa que hacía la rapeaba para así practicar su improvisación.

Hasta que por fin recibió una respuesta de BangChan.

-Channie.

Hola Binnie~, lamento la tardanza, estaba resolviendo un problema.

No te preocupes... ¿Estás bien?

Sip, no te preocupes por eso.

¿Qué tal estás tú? Descansaste?

Bastante.

El menor recordó sus sueños mientras charlaba con el rubio, su rostro enrojeció de forma exagerada.

Binnie, te molesta sí voy a verte?

Su corazón se aceleró.

No pero... no estás trabajando?

Si pero...

Me avergüenza un poco admitirlo pero eres tú así que...

Estoy muy preocupado por ti.

ChangBin estaba perdido ya.

No hay problema...

El menor estaba muy emocionado, por poco y no salta en la cama hasta que vió su desorden.

¿Quieres que te lleve algo? Pasaré a comprar.

Tal vez, ehm... Café?

Estuvo tentado de pedirle algún dulce, o pollo tal vez, pero quería mantener su imágen.

¿Cuál imagen?, no sé, ya que para BangChan ya era extremadamente tierno aunque se esforzara por beber o comer cosas amargas.

Te llevo chocolate también?

....

Si, por favor.

No me demoraré mucho, nos vemos.

Y así el castaño saltó de su cama, escondió algunas cosas y ordenó otras, al terminar se vió en el espejo e hizo una mueca.

Llevaba una playera rota y antigua y unos pantalones de bananas en pijama.

Buscó algo más presentable entre su ropa, sacó una playera más o menos 3 tallas más grande que él roja con líneas negras, o al revés... nadie lo sabe, y pantalones un poco ajustados pero cómodos negros.

Y justo cuándo estaba lavando su cara sintió el timbre de su departamento, respiró hondo y se acercó a la puerta.

¿Por qué hizo todo eso? Simple, es Bangchan.

Al abrir sus ojos brillaron levemente, el rubio estaba apoyado en la pared mirando el techo, tenía todo el cabello trenzado y una bandana roja puesta, vestía algo simple pero ChangBin se derritió por dentro al verlo así.

El rubio no necesitaba luces para brillar, mucho menos fuego para calentar a los demás.

En especial si se trataba de ChangBin, él no lo sabe pero el mayor lo vuelve loco.

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