Apuesta por un amor

Capítulo 27

Maratón 1/3

La semana se pasó volando y el tan esperado sábado llegó, Erika había planeado una pequeña cena con la ayuda de Antonia, aunque el convivió era muy pequeño y todo iba a ser muy sencillo el jardín lucia precioso.
-Antonia: Es tu gran noche Eri (La abrazó).
-Erika: Estoy muy emocionada (Sonrió).
-Antonia: Me hace tanta ilusión ver lo felices que son (Sonrió), espero tener una historia tan bonita como la suya (Suspiró).
-Erika: Te acompaña Sebastián esta noche? (Le sonrió).
-Antonia: Si (Asintió), hace unos días hablamos y quedamos en salir en plan serio (Le contó) pero nos queremos ir tranqui.
-Erika: O sea son casi novios? (La miró).
-Antonia: Algo así (Dijo feliz).
-Erika: Me encanta verte esa sonrisita (Le dio un beso).
-Antonia: Te ves espectacular mi papá se va a ir de espaldas (Dijo acomodando algunos mechones de su cabello).
-Erika: Gracias por ayudarme (Sonrió).
Pasaron 20 minutos y Eduardo ya estaba lista así que las fue a buscar a la habitación de Antonia para bajar.
-Eduardo: Me avisó milagros que ya llegaron (Gritó desde afuera).
-Antonia: Ya estamos (Respondió) ahora cierra los ojos para que salgamos.
-Eduardo: Ya (Dijo sonriendo).
Antonia abrió la puerta y comprobó que tenía los ojos cerrados.
-Antonia: Ábrelos (Sonrió).
-Erika: Buenas noches futuro esposo (Le sonrió).
Eduardo se quedó mudo y la observó de pies a cabeza, más alla de lo hermosa que se veía la luz de su mirada era lo que sobre saltaba esa noche, Erika llevaba puesto un vestido color nude con pequeños y delicados destellos dorados, Antonia se había decidido por un romper negro y Eduardo llevaba puesta una camisa formal blanca y un pantalón negro.
-Eduardo: Estás guapísima mi amor (Sonrió).
-Erika: Gracias (Sonrió) tú tambien estás muy guapo (Le cerró un ojo).
-Antonia: Bueno pues vamos abajo que nos esperan (Los abrazó).
Bajaron al jardín y sus amigos estaban platicando acompañados de un poco de vino.
-Eduardo: Hola (Los saludó).
-Sebastián: Buenas noches señor (Amable).
-Luciano: Que onda hermano (Lo miró).
-Antonia: Hola (Saludó a Sebas).
-Sebastián: Te ves preciosa (Le susurró).
-Antonia: Gracias (Sonrió).
-Milagros: Se ven muy guapos mis niños (Dijo mientras les sonríe).
-Erika: Gracias (Le aventó un beso).
-Mara: Tus ojos brillan más esta noche (La miró) alguna razón? (Le sonrió).
-Eduardo: Ya lo sabrán (Sonrió).
-Miranda: Siempre que nos reúnen es por algo (Los miró sospechosos).
-Pablo: Se ven sospechosos (Sonrió).
-Erika: Si tenemos algo que contarles (Sonrió) pero primero vamos a cenar no?.
-Milagros: La comida ya está caliente pueden servirse lo que quieran (Los miró).
Todos se pararon a la mesa de bufet y se sirvieron de todo un poco, Eduardo abrió otra botella de vino y volvieron a la mesa.
-Miranda: Mis suegros me amaron (Sonrió) les juro que al principio daban miedo (Los miró) pero después de un rato nos familiarizamos.
-Luciano: Eres encantadora mi amor sabía que les caerías bien (Besó su mejilla).
-Pablo: Que cursi (Se burló).
-Mara: Y como va la casa? (Preguntó mientras daba un sorbo a su vino).
-Miranda: Es un caos (Suspiró).
-Erika: Miranda dice es un caos pero no ayuda (Se rió) el otro día tuve que obligarla a recoger.
-Milagros: Puedo ayudarlos cuando gusten (Se ofreció).
-Luciano: Gracias (Sonrió) eres un amor milagros preciosa.
-Eduardo: Oye no te quieras robar a mi nana (Lo miró feo).
Terminaron de cenar y pasaron a los sillones que estaban en el jardín para platicar más a gusto, pasaron un par de horas y Eduardo ofreció un brindis.
-Eduardo: Quiero brindar por la amistad y el amor (Sonrió), gracias por acompañarnos esta noche (Suspiró) ustedes son nuestros mejores amigos y queremos compartir nuestra felicidad con ustedes, Erika y yo hemos decidido dar un nuevo paso en nuestras vidas.
-Miranda: Me estoy emocionado demás (Le preguntó moviendo la boca a Eri).
-Erika: No (Le dijo igual).
Miranda sonrió feliz y Erika siguió con el brindis.
-Erika: Eduardo y yo hace unos días estuvimos en un viaje maravilloso y decidimos muchas cosas que van a cambiar nuestro futuro (Dijo feliz).
-Mara: Ustedes? (Dijo mientras los veía).
-Eduardo: Nosotros nos vamos a casar (Alzó la mano de Eri y señaló su anillo) me dijo que si (Gritó).
-Milagros: Por dios (Dijo feliz) les deseo la mayor de las bendiciones.
-Miranda: Boda doble (Gritó emocionada) felicitaciones hermana (La abrazó).
-Mara: Felicidades (Aplaudió mientras sonreía).
-Pablo: Que sorpresa (Dijo sonriendo) les deseo lo mejor (Se puso serio).
-Luciano: Sabía que Eri era la buena (Lo abrazó) te sacaste la loteria amigo (Golpeó su hombro).
-Sebastián: Muchas felicidades (Sonrió).
-Antonia: Los amo (Los miró sonriendo) saben que les deseo lo mejor del mundo.
Erika y Eduardo estaban realmente felices de festejar su amor con sus amigos queridos, estaban emocionados por el inicio de una vida juntos, por demostrarse lo mucho que se amaban cada día y por alcanzar sus sueños tomados de la mano, entre risas se unieron todos en un fuerte abrazo, estaban por servir más vino hasta que uno de los guardias de seguridad interrumpió la reunión.
-Guardia: Buenas noches señor (Lo miró).
-Eduardo: Que pasa? (Serio).
-Guardia: Hay alguien que lo busca con mucha insistencia (Le informó).
-Luciano: Espero que no sea de trabajo (Lo miró).
-Eduardo: No (Negó) cancelé todo para hoy (Suspiró).
-Erika: Pasa algo? (Preguntó).
-Eduardo: No, todo bien amor (Le sonrió).
-Miranda: Déjanos ver el anillo (La jaló a su lado).
-Mara: Está precioso (Sonrió).
-Eduardo: Dile que no puedo (Le pidió).
-Guardia: Se lo he dicho pero me prometió que no se iría hasta verlo (Suspiró).
-Eduardo: Quién viene a interrumpir esta gran noche? (Se molestó).
Una mujer alta y delgada apareció por el jardín, llevaba un vestido rojo, unos tacones color plateados y unos intensos labios rojos que la hacían sobre salir.
-Sara: Soy yo Eduardo (Dijo mientras caminaba hacia ellos).
En ese momento Erika dejó de hablar con Miranda y volteó a ver a la mujer dueña de esa voz, Eduardo se quedó estático al reconocerla de inmediato y Antonia y Milagros sintieron un gran coraje al verla.
-Luciano: No puede ser (Maldijo en voz baja).
-Erika: Quién es ella? (Se acercó a Eduardo).
-Mara: Que haces aquí? (Seria).
-Antonia: Largate maldita bruja (Gritó) no tienes nada que hacer aquí (Se alteró).
-Milagros: No lo puedo creer (Susurró).
-Sebastián: Cálmate bonita (La abrazó).
-Erika: Eduardo quién es ella? (Lo movió para que la mirara).
-Eduardo: Es Sara (La miró).
En ese momento Erika sintió como si un balde de agua helada cayera sobre ella, la única mujer que podía arruinar su felicidad estaba enfrente de ella, todas sus inseguridad se hicieron presentes en ese momento, pensaba en que Sara era más delgada, más alta y según ella más bonita.
-Sara: Tú eres? (La miró de arriba a abajo).
-Erika: Soy Erika (Tartamudeo).
-Eduardo: Que demonios haces aquí? (Dijo con la mandíbula apretada).
-Antonia: Desaparece como lo hiciste hace años (Siguió gritando).
-Sara: Estoy aquí porque tengo mucho de que hablar contigo (Lo miró seria).
-Mateo: Que pasa mami? (Dijo un pequeño que salió detrás de ella).
-Sara: Nada mi amor (Lo cargó) todo esta bien (Acarició su cabello rizado).
El corazón de Eduardo se detuvo al ver el gran parecido que ese pequeño tenía con él, Milagros estaba igual pues reconocía muy bien esos rizos y esa mirada profunda que Eduardo tenía a su misma edad.
-Eduardo: Quién es él? (Dijo en un susurro).
-Sara: Es Mateo (Sonrió) nuestro hijo (Le dio un pequeño beso en la cabeza).
Al escuchar eso Erika sintió como sus sentidos comenzaron a fallar y todas sus emociones explotaron en su cabeza en ese instante, Pablo se acercó a ella para auxiliarla y segundos después perdió el conocimiento.
-Pablo: Tenemos que llevarla a su habitación (Dijo cargandola).
-Eduardo: Está bien? (Se acercó para acariciar su mejilla).
-Pablo: Si solo se desmayó (Asintió).
-Miranda: Vamos a tranquilizarla (Recogió sus cosas) y tú arregla tus cosas (Dijo molesta).
-Eduardo: Lo voy a hacer (Le aseguró), por favor avísame cualquier cosa (Miró a Luciano).
Luciano asintió y fue detrás de todos que iban de vuelta a la casa para poder atender a Erika, la subieron a su habitación y llamaron a un doctor para que pudiera darle un tranquilizante así cuando se despertara no estuviera tan alterada.
-Miranda: Esto fue demasiado para ella (Dijo sentada a su lado) el día más feliz de su vida se arruinó.
-Luciano: No entiendo porque pasan estas cosas (Suspiró).
-Antonia: Ella no tiene nada que hacer aquí tio (Lo miró), se fue sin importarle nada (Dijo molesta) dejó a mi papá hecho pedazos y de la noche a la mañana regresa como si nada.
-Luciano: Sé muy bien como te sientes (Acarició su espalda).
-Sebastián: Será mejor que estés tranquila te puede hacer daño (La abrazó).
-Mara: Antonia ella tiene sus razones para estar aquí (La miró), Sara tuvo fuertes motivos para irse y su historia lo justifica todo.
-Pablo: Tú sabías de ella? (Serio).
-Mara: Si, hablamos y Eduardo lo sabía (Suspiró), él sabía que Sara podía volver.
-Miranda: Erika no se merece esto (Volteó a ver a todos molesta), ya ha pasado por muchas cosas (Acarició su mano), no olvidemos que hay un hijo de por medio (Suspiró) algo que Erika jamás va a poder darle a Eduardo (Secó sus lágrimas) eso la va a romper por completo.
-Antonia: Tienes razón (Dijo soltando pequeñas lágrimas) Erika es muy buena y no se merece toda la basura que hay a su alrededor (Miró a Mara).
-Sebastián: Ella va a estar bien pequeña (La calmó) se ve que es una mujer muy fuerte.
-Antonia: No (Negó mientras sonreía amargamente), aquí ya nada va a estar bien (Lo miró), ni Erika, ni yo vamos a estarlo (Sollozó) Sara vino a joder todo y encima con un hijo (Negó).
-Milagros: Es tu hermano mi niña (La miró).
-Antonia: No (Dijo sin aceptar la idea), tú lo sabes nana (Sonrió) sabes perfectamente de lo que hablo (La miró) conoces lo mal que se pude poner todo cuando esa mujer está cerca.
-Milagros: El amor es la única fuerza que puede contra todo (La miró), el amor que existe entre Erika, tu papá y tú nadie podrá romperlo.
-Luciano: Eduardo la ama (Aseguró), jamás lo había visto tan feliz como con Erika (Sonrió) es idiota pero no como para dejar escapar a la mujer de su vida.
-Milagros: Voy a ver si se le ofrece algo a Eduardo (Se despidió).
Eduardo y Sara también entraron para hablar y dejaron a Mateo en compañía de Milagros.
-Eduardo: Nana cuidalo mientras hablo con su madre por favor (Le pidió).
-Milagros: Si (Asintió).
-Sara: Quédate quieto y pórtate bien mi amor (Acarició su cabello y le dio su peluche).
-Mateo: Si mami (Asintió mientras abrazaba a su osito).
Eduardo cerró las puertas del despacho y comenzó sus preguntas.
-Eduardo: Que haces aquí? (La miró) Por que ahora? (Preguntó mientras se sentaba en su silla).
-Sara: Creo que no llegué en el momento indicado (Dijo seria).
-Eduardo: Es que ya no hay momento indicado (La miró).
-Sara: Eduardo no me digas eso (Se sentó frente a él), quién era ella? (Refiriéndose a Erika).
-Eduardo: Es Erika, es mi futura esposa (Sonrió).
-Sara: Me olvidaste? (Dijo con un nudo en la garganta) te vas a casar?.
-Eduardo: Es absurdo (Se rió) no puedes pedirme nada después de como te fuiste, no iba a sufrir toda mi vida por ti (La miró) yo no esperaba que volvieras.
-Sara: Es que ese es el problema (Dijo soltando en llanto) que yo no me fui, mi padre me llevó con él (Le soltó) no tienes ni idea de todo lo que he pasado Eduardo (Le gritó) no he podido dormir en paz ni un solo día desde hace casi 5 años (Dijo seria).
-Eduardo: De que hablas? (La miró) Tú te fuiste porque dejaste de amarme (Dijo serio), te burlaste de mi y me dejaste con el corazón hecho pedazos.
-Sara: No (Se rió amargamente) esa no fue la razón de mi partida, en todos estos años no dejé de amarte ni un solo instante (Le gritó), yo tuve que huir de México por culpa de mi padre (Le confesó) él se metió en problemas con gente peligrosa y corríamos peligro si nos quedábamos en México, solo a su lado podía protegerme y me llevó con él el mismo día de nuestra boda (Sollozó), el que debía ser el día más feliz de mi vida terminó siendo una pesadilla, en nuestra noche de bodas yo estaba en un avión viajando hacia Rusia y con un hijo en mi vientre (Recordó), cuando llegamos me enteré que tenía 12 semanas de gestación (Sonrió) y en ese momento una pequeña luz de esperanza alumbró mi vida, intenté decírtelo, traté de comunicarme con todos pero fue inútil (Sollozó) mi papá me mantuvo presa de su protección.
-Eduardo: No lo puedo creer (Dijo muy confundido) todos pensamos lo peor de ti, jamás imaginé que pudiera haber algo tan grave detrás de tu desaparición.
-Sara: Lo sé (Sonrió) por eso vine aquí (Tomó su mano) quería contarte sobre nuestro hijo (Lo miró) se parece tanto a ti, quería contarte mi versión y tenía la esperanza de encontrarte solo (Suspiró) todo el tiempo soñé con la bonita familia que podríamos ser (Dijo con tristeza).
-Eduardo: Un hijo (Sonrió levemente) tenemos un hijo (La miró).
-Sara: Mateo siempre ha querido conocerte (Le contó) desde que estaba en mi vientre le hablé de ti, para él eres un súper héroe (Sonrió) espero que por lo menos ustedes si puedan tener una oportunidad.
-Eduardo: Es tan pequeño (La miró) claro que voy a ser parte de su vida (Suspiró) no voy a dejar que mi hijo esté lejos de mi nunca más (Dijo serio).
Eduardo quedó completamente sorprendido al escuchar toda su historia, Sara había sufrido incluso más que él y todo este tiempo la habían juzgado injustamente, ahora que sabía la verdad no podía odiarla y menos sabiendo que tenían un hijo que los uniría por siempre, tenía claro que amaba a Erika y que nadie podría cambia eso pero sabía lo difícil que sería para ella sentir cómoda con la presencia de Sara en sus vidas.

¿Creen que el regreso de Sara cambie las cosas? ¿Por que creen que Sara regresó?