Capítulo 41

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Al día siguiente a medio día Antonia salió del departamento de Erika para encontrarse con Luciano, al llegar al parque se sentó en la banca que siempre solían elegir y espero a que llegara, pasaron unos cuantos minutos y apareció con un semblante preocupado.
-Antonia: Hola (Sonrió).
-Luciano: Ya estoy aquí (Se sentó a su lado) cuéntame lo que pasa princesa (La miró).
-Antonia: Sé que mi papá me va a matar por decirte esto (Suspiró), pero creo que es importante que lo sepas (Lo miró).
-Luciano: Me estás asustando (Suspiró).
-Antonia: Tío mi papá no está con Sara porque la ame (Le contó), esa arpía lo tiene amenazado (Seria).
-Luciano: Lo sabía (Sonrió), sabía que Eduardo no podía ser tan imbécil (Se sintió aliviado), con que lo amenazó esa loca? (Se puso serio de nuevo).
-Antonia: Ponme atención porque la historia es larga y un poco confusa (Suspiró).
-Luciano: Te oigo (La miró).
Antonia le contó todo lo que su papá le había dicho y Luciano quedó muy sorprendido al escuchar los alcances que tenía Sara, el sabía que estaba loca pero no creía que tanto.
-Luciano: Y porque Eduardo no dijo nada desde el principio? (La miró).
-Antonia: Quería protegernos (Suspiró), está sufriendo mucho y más por tener que estar lejos de Eri (Lo miró).
-Luciano: Si no fuera por esa mujer él se estaría casando con Erika en una semana (Negó), tenemos que destruirla (Dijo serio).
-Antonia: Tengo que ir a hablar con mi papá (Se levantó).
-Luciano: Vamos yo te llevo (Se levantó).
Luciano condujo a la cas y cuando llegaron encontraron a Eduardo con ropa deportiva corriendo por el jardín.
-Eduardo: Hola (Saludó).
-Luciano: Sara está en la casa? (Lo miró).
-Antonia: Tenemos que hablar (Seria).
-Eduardo: Salió de compras (Serio), tú no estaba con Erika? (La miró).
-Antonia: Si (Asintió), pero está mañana salí para hablar con el tío Luciano.
-Luciano: Lo sé todo Eduardo (Tocó su hombro), no estás solo en esto (Sonrió) somos socios, amigos y hermanos hasta el final.
-Eduardo: No debiste hija (Suspiró).
-Antonia: Lo siento (Suspiró) pero no puedes solo.
-Luciano: No la regañes, yo le insistí para que me contará lo que te pasaba (Lo miró) ahora vamos adentro que tengo algunas ideas para armar nuestro plan (Sonrió).
-Eduardo: Gracias a los dos (Sonrió).
Entraron a la casa y se encerraron en el despacho para armar un plan en contra de Sara y Alonso, las ideas que Luciano había dado eran muy buenas, Eduardo ya tenía algunas cosas en marcha y Antonia tenía pensado intentar revisar su habitación las veces que no estuviera, Eduardo estaba muy agradecido por la ayuda pero les había pedido seriamente que no le contarán a nadie más lo que pasaba y mucho menos involucrar a alguien pues bastante riesgo ya corrían ellos tres, los días pasaron rápido y el día tan esperado para Miranda llegó, iba a casarse con el hombre que amaba y aún no lo podía creer.
-Miranda: Llegó el día (Gritó mientras entraba a la habitación en dónde dormían Erika y Antonia).
-Erika: Mirandaaaa (Se quejó).
-Antonia: Que emoción (Sonrió mientras se estiraba).
-Miranda: Tenemos mucho por hacer hoy (Dijo con emoción).
-Antonia: Me doy un baño rápido y nos vamos (Se levantó).
-Erika: Déjenme dormir un poco más (Suspiró).
-Miranda: Levántate (Le quitó la cobija).
Miranda levantó la cobija y la blusa de Erika se levantó dejando ver su vientre, ella y Antonia se quedaron viendo muy sorprendidas al notar el pequeño vientre abultado de Erika.
-Miranda: Erika te sientes bien? (La miró seria).
-Antonia: Creo que no (Seria).
-Erika: De que hablan? (Se sentó y las miró).
-Miranda: Tu vientre (Señaló).
-Antonia: Estás inflamada (Preocupada).
-Erika: Hay algo que les he dicho y creo que ya es momento de que lo sepan (Dijo seria).
-Miranda: Estás enferma de algo grave? (Se alarmó).
-Antonia: Nos estás ocultando tu enfermedad? (Seria).
-Erika: No (Sonrió), no es nada de eso (Suspiró) hace un par de semanas cuando fui al médico el diagnostico que me dieron no fue el que les dije (Las miró).
-Antonia: Entonces que tienes? (Se sentó a su lado).
-Miranda: Habla ahora Erika (La miró seria).
-Erika: Sé que se van a sorprender mucho porque tampoco yo me la creo todavía pero es un hecho (Dijo con emoción), estoy embarazada (Sonrió) voy a tener un bebé de Eduardo (Dijo mientras sus ojos se llenaban de lágrimas).
-Antonia: Oh por dios (La abrazó mientras lágrimas bajaban por sus mejillas) vas a ser mamá (La miró), voy a tener un hermanito.
-Erika: Todavía no sé lo que es (Sonrió) pero un bebé viene en camino (Asintió).
-Miranda: Amiga (Reaccionó mientras lloraba a mares) es una bendición (La abrazó) sé lo mucho que has deseado esto (La miró) y me hace tan feliz saber que hoy es una realidad, te estamos esperando desde hace mucho bebé (Acarició su vientre).
-Antonia: Como es que pasó? (La miró curiosa).
-Erika: Resulta que el imbécil de Alonso le pagó al que siempre había sido nuestro doctor para que alterará mis estudios de fertilidad (Les contó).
-Miranda: Que ganaba él con eso? (Seria).
-Erika: Ocultar que realmente era él el que no podía tener hijo (Secó sus lágrimas), todos estos años me culpó sin razón aún sabiendo que el problema era suyo (Suspiró).
-Antonia: Ese hombre es una basura (Dijo molesta) primero te arruinar la vida a ti y ahora a mi padre (Dijo sin pensar).
-Miranda: Por que a Eduardo? (La miró).
-Antonia: Porque sigue con su pelea de siempre (Mintió) ese hombre no se cansa de molestar.
-Erika: Alonso no se va a salir con la suya (Seria) tarde o temprano va a pagar todo el daño que ha echo.
-Miranda: Ahora entiendo porque los antojos, tu sensibilidad y el sueño que siempre tienes (Sonrió).
-Antonia: Te vamos a querer mucho bebé (Acarició su vientre) y a papá le va a dar gusto saber que vienes en camino (Sonrió).
-Miranda: Aún no de lo has dicho (Miró a Erika), cuando vas a hacerlo?.
-Erika: Hoy voy a tratar de hablar con él durante la fiesta (Suspiró), no puedo seguir ocultándole algo tan importante y menos con lo rápido que está creciendo (Sonrió mientras acariciaba su vientre).
-Antonia: Mi papá va a ser el hombre más feliz de la tierra (Sonrió), espero que pronto se atreva a confesarte lo que está pasando (Pensó).
-Miranda: Se va a volver loco (Sonrió).
-Erika: Ustedes creen? (Las miró con una leve sonrisa) Yo la verdad estoy muy nerviosa (Suspiró).
Después de preguntarle un montón de cosas sobre el bebé se metieron a bañar, después se arreglaron y desayunaron para comenzar con su relajado día, mientras tanto Luciano estaba con Pablo y Eduardo desayunando para salir a su día de tenis.
-Eduardo: Hoy al fin es el día hermano (Golpeó su hombro) te casas con la mujer que amas (Suspiró).
-Pablo: Eres muy afortunado de tener a alguien que te ame tanto (Le sonrió).
-Luciano: Gracias a los dos (Sonrió), espero que algún día puedan experimentar lo mismo.
-Pablo: Me va a ser difícil convencer a Erika (Sonrió) pero voy avanzando (Le cerró un ojo) y tú piensas llevar a Sara al altar? (Miró a Eduardo).
-Eduardo: Algún día me voy a casar con la mujer que amo (Sonrió) y vas a ser el primero en recibir la invitación (Golpeó su hombro).
-Luciano: Ay Eduardo (Sonrió), pronto va a llegar la organizadora para arreglar todo y espero que quede como Miranda quería (Los miró).
-Eduardo: Seguro va a estar todo perfecto cuando regresemos (Lo calmo), el guardia tiene órdenes para buscar a Erika, Miranda y Antonia así que llegarán seguras y a tiempo (Lo miró).
-Luciano: Espero que no se arrepienta (Suspiró).
-Pablo: Relajate un poco (Lo miró) terminemos de desayunar que nos espera un gran día.
Después de un largo día de spa y estética Miranda estaba lista para su boda, Antonia y Erika estaban muy emocionadas por lo hermosa que se veía.
-Erika: Estás guapísima (Sonrió mientras sus ojos se llenaban de lágrimas) Joss hizo magia con tu vestido.
-Miranda: Este siempre fue mi sueño (Sonrió).
-Antonia: Y estás por cumplirlo (Acarició sus brazos).
-Erika: Luciano se va a desmayar cuando te vea (La miró).
-Miranda: Estoy muy nerviosa (Se puso seria).
-Antonia: Todo va a salir bien (La calmó) relajate porque hoy te casas (Sonrió feliz).
-Erika: Hoy vas a ser la legítima esposa de Luciano (Le cerró un ojo).
Terminaron de arreglar unos pequeños detalles con sus peinados y salieron a la recepción para encontrarse con el guardia de Eduardo.
-Guardia: Buenas tarde (Saludó amable).
-Erika: Hola (Sonrió), que bonitas flores (Dijo mientras veía el auto adornado).
-Guardia: Regalo del señor Eduardo (Sonrió).
-Antonia: Me voy adelante para que vayan cómodas (Se subió).
-Miranda: Con cuidado Miranda (Se dijo mientras subía) tu vestido está muy lindo como para que se arruine (Sonrió).
Después de un largo día de tenis y spa Luciano estaba terminado de arreglar su moño mientras Eduardo trataba de calmarlo y Pablo se aseguraba de que todo estuviera en orden abajo.
-Eduardo: Tranquilo (Sonrió) el guardia me avisó que ya vienen para acá (Lo miró).
-Luciano: La gente ya está llegando (Suspiró mientras veía por la ventana) hoy al fin Miranda va a ser mi esposa (Sonrió).
-Eduardo: Ya tienes dueña (Golpeó su hombro).
-Luciano: Después de éste día vamos a dedicarnos a hundir a Sara y por fin podrás ser feliz con Erika (Le prometió).
-Eduardo: Hemos avanzado con las pruebas (Sonrió), pero ya no sé si Erika me ama (Dijo con tristeza), creo que Pablo se la está ganando y están saliendo (Bufó).
-Luciano: Pues entonces dicelo (Sonrió), dile toda la verdad antes de que sea tarde y ya no haya remedio (Le aconsejó) ella lo va a entender (Asintió).
Eduardo terminó de arreglar su traje y bajaron al jardín, ya había llegando mucho gente y Luciano se encargó de saludar a todos, llegó el juez, el cura y no habían señales de Miranda, llevaba 5 minutos de retraso y eso para él era una eternidad.
-Luciano: No llegan (Suspiró).
-Hugo(Papá de Luciano): Es normal en las bodas hijo (Le sonrió).
-Sebastián: Hace 10 minutos le mandé un mensaje a Antonia y me dijo que estaban cerca (Lo miró).
-Sara: Tal vez se arrepintió (Se rió).
-Bety(Mamá de Luciano): Las novias siempre llegan tarde (Le aseguró).
-Pablo: No le hagas caso (Rodó los ojos).
-Eduardo: Ahí vienen (Sonrió mientras las veía entrar).
Luciano volteó y sus ojos se llenaron de lágrimas, Miranda lucía como una princesa y él se sentía muy afortunado de saber que pasaría el resto de su vida a su lado, Sebastián también quedó deslumbrado al ver a Antonia, quién lucía un vestido de gasa color menta que le llegaba a la rodilla, Eduardo sonrió mientras veía de pies a cabeza a Erika quién se había decidió por un sencillo vestido negro con mangas que le llegaba hasta la rodilla, le estaba costando mucho estar ahí pues la desilusión de su ruptura aún le dolía, todos se levantaron y aplaudieron al ver a la novia llegar.
-Erika: Cuidala mucho (Sonrió) esta mujer vale oro (Se la entregó).
-Luciano: Prometo hacerla muy feliz todo lo que nos reste de vida (Asintió).
-Bety: Bienvenida a la familia hija (La abrazó).
-Hugo: Queremos nietos pronto (Bromeó).
-Miranda: Muchas gracias por todo (Les sonrió).
-Eduardo: Te llevas a un gran hombre Miranda (Le sonrió) que sean muy felices.
-Antonia: El tío Luciano es el mejor partido que pudiste encontrar (Sonrió).
-Miranda: Gracias (Los miró) prometo no hacerlo pasar muchos corajes (Sonrió).
La ceremonia comenzó y todos se sentaron para poner atención, Eduardo y Erika se sentaron juntos hasta enfrente porque eran los padrinos, a su lado estaban los papás de Luciano, y Mateo quién sostenía los anillos, Antonia y Sebastián estaban una fila atrás junto a Milagros, Mara, Pablo y Sara quién no estaba muy contenta pero tenía que aguantarse, el juez comenzó su discurso y todos lo escucharon atentamente, después el cura comenzó con la misa y les dio su bendición, la ceremonia fue tan emotiva que muchos terminaron llorando, Eduardo le ofreció su pañuelo a Erika que lloraba a mares pues estaba muy sensible.
-Eduardo: Toma (Le dio su pañuelo) ya no llores (Le sonrió).
-Erika: Gracias (Sonrió).
-Eduardo: Te ves muy linda (Dijo sin mirarla).
-Cura: Con la bendición de Dios nuestro señor los declaro marido y mujer, que lo que ha unido Dios no lo separé el hombre (Sonrió).
Se besaron y los invitados aplaudieron, Erika miró a Eduardo para devolverle su pañuelo, sus ojos se conectaron y al encontrarse con ellos él pudo notar que habían recuperado su brillo, se sentía miserable al saber que él no era el motivo de eso, tenía semanas pensando que Erika y Pablo estaban juntos y se sentía morir, ya no le importa si iba a la cárcel, si Sara y su padre lo mataban o si perdía todo pues lo más valioso para él ya no lo tenía, recordó las palabras que una vez ella le había dicho, "Tú me devolviste la felicidad y le diste un brillo a mis ojos que nunca antes habían tenido" y había sido el mismo quién había lleno su mirada de tristeza, quién le había arrancado las ilusiones y ahora no podía quejarse de que alguien más se las hubiera devuelto.
-Sara: Vamos mi amor (Lo jalo del brazo).
-Eduardo: Muchas felicidades (Se acercó a los novios y les dio un fuerte abrazo) hoy me voy a poner borracho en su honor (Sonrió).
-Sara: Felicitaciones (Dijo fingiendo una sonrisa).
-Joss: Estás divina (Dijo mientras la veía de arriba a abajo) felicidades a los dos (Sonrió).
-Luciano: Gracias (Sonrió amable).
-Erika: Amiga (La abrazó) ya eres una mujer casada (La miró) felicidades (Le sonrió a Luciano).
-Miranda: Estamos muy contentos (Dijo emocionada).
-Luciano: Pasemos a las mesas (Sonrió).
Caminaron unos cuantos metros de dónde había sido la ceremonia y llegaron a la parte donde sería la fiesta, todo estaba adornado muy elegante y en el ambiente se percibía románticismo por todos lados.
-Luciano: Gracias a todos nuestros amigos y seres queridos por estar aquí compartiendo un día tan importante para nosotros (Sonrió), Miranda (La miró) todos los días de mi vida voy a despertar sabiendo que soy muy afortunado de estar con la mujer correcta (Suspiró) te amo.
-Miranda: Te amo (Lo besó).
Bailaron su primer baile de esposos y después la gente se unió a la pista, Pablo aprovecho para sacar a Erika y Eduardo solo observaba desde la mesa siendo desdichado junto a Sara.
-Sara: Te mueres por unos ojos que ya ni te miran (Le susurró), la pierdes Eduardo (Sonrió mientras acariciaba su mejilla) y me hace muy feliz verte sufrir lo mismo que yo sufro por ti (Lo miró).
-Eduardo: Me consuela saber que sufres (Sonrió) con permiso (Se levantó) necesito tomar aire fresco por un momento (Caminó hasta la casa).
-Sara: Como quieras (Dijo mientras se levantaba) cuida al niño (Miró a Milagros mientras caminaba a la barra).
Erika observó que Eduardo se alejó de la fiesta y supo que era el momento justo para hablar con él sobre su bebé, se disculpó con Pablo y fue detrás de él, se aseguró que nadie los viera pues no quería interrupciones en ese momento tan importante.

Apuesta por un amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora