Capítulo 18

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Al dia siguiente despues de terminar un vestido que tenia que entregar a las tres, me fui al mercado y compre lo necesario para la cena que habia proyectado. Luego pase a la casa de Petrita y Ricardo y les hice la invitacion que aceptaron gustosos. Raquel se encargó de avisar a Ruben. Cuando regresó de la cademia me ayudó en la preparacion de la cena y puso la mesa.

Como a las siete llegó Petrita y despues de decirme que Ricardo y su esposa vendrían despues, me preguntó: -A que se debe la fiesta?
- Petrita, amiga -le informé- Ruben viene a cenar con nosotros. Quiere pedir mi permiso para tener una relacion de noviazgo con Raquel y como ustedes son sus segundos padres queremos que ustedes den su consentimiento.
- ¿Ruben, el hijo menor del pastor? -exclamó la buena señora-. ¡Oh que feliz me hace la noticia! Pero Raquel es casi una niña -añadió.
- Es verdad -dije- Ruben tiene veintiun años y Raquel solo quince. Pero no van a casarse luego Petrita. No se trata ahora de matrimonio sino de noviazgo.

Entró Raquel que habia ido a comprar la leche, y al ver a Petrita se le iluminó el rostro de alegria. La saludó con cariño besandola en la frente y palmoteando dijo: 
-Que bueno que vino Petrita, ¿y el resto de la familia?
-Viene luego.

Así fue, llegaron Ricardo y su esposa y casi enseguida llegó tambien Ruben un poco cohibido; pero todos lo saludamos con tanta alegría que pronto se sintió en familia, como así era en efecto, pues todos eramos de la familia de la fe. 

Como ya estaba todo listo nos sentamos a la mesa y despues de dar gracias cenamos con mucho apetito. Cuando terminamos la cena le dije a Ruben:
-Me informó Raquel que querías hablar conmigo. Yo invité a Petrita y a Ricardo, pues quieren a Raquel casi tanto como yo y por tanto todo lo que concierne a mi hija, les interesa y preocupa.
-Hizo usted bien hermana Noemi -contestó el joven-. Asi ellos serán testigos de que mis intenciones son sanas. 
Luego añasió resueltamente.
-Hermana Noemi, Petrita y Ricardo; quiero mucho a Raquel desde hace años y solicito su permiso para que sea mi novia.
Se puso encendido y antes de que ninguno de nosotros contestara, prosiguió:
- Este año me recibo como Tenedor de libros y empezare a trabajar. En dos años espero tener todo listo para casarme con ella...
Se detuvo todo turbado.
-¿Tan pronto? -preguntamos los 3 al mismo tiempo
-Si ustedes dan su permiso -dijo Ruben viendono con ojos suplicantes y luego como para abogar por su causa añadió: -ya hable con mi papá y el me dió el consentimiento, solo falta que ustedes den el suyo.

Tomé de las manos al joven y le dije: 
-Lo doy para que sean ustedes novios. De lo demas ya lo hablaremos cuando sea tiempo.
Luego dirigiendome a Petrita y Ricardo les pregunté: -estan ustedes de acuerdo?
-Estamos de acuerdo -contestaron.
Miré a mi hija. Estaba radiante de alegría. Eastaba hermosisima.

Ruben se levantó para irse, pues dijo que tenía clases temprano. Se despidió de nosotros y una vez mas nos dijo:
-Gracias, muchas gracias.

Permití a Raquel salir a acompañarlo hasta la puerta, pues comprendí que ellos tenian  mucho que decirse a solas. Salieron tomados de la mano con sencillez, sonriendo alegres. Unos minutos despues regresó Raquel y dijo:
-Mamá , los sabados por la tarde vendrá Ruben para ayudarme con los trabajos manuales para mi clase dominical y para platicar con nosotras.
- Está bien hija -contesté- mientras yo coso ustedes trabajan y platican.

Petrita y la familia de Ricardose despidieron. Raquel y yo, despues de asear la cocina, tuvimos nuestro culto familiar y nos acostamos.
Pronto escuché la respiración tranquila de mi hija. Dormía feliz. Pero yo no podía dormir. Pensaba en Arturo, que se había perdido el gozo y la bendicion de ver crecer a su hija. Se me hacia imposible que nos hubiera olvidado.

Sabía que el seguia viviendo con Mercedes y que tenian un pequeño comercio pues Arturo ya no conseguia trabajo porque con mucha frecuencia se embriagaba.
Sentí que debia buscarlo, que debía procurar que regresara al hogar, pues tal vez ahora que la niña estaba tan crecida y tan hermosa ella podria ser un freno para el y dejaría de tomar y habiendo ya muerto mi suegra , el si no aceptaba a Jesucristo, por lo menos no se opondria a que la niña y yo siguieramos asistiendo al templo. Ademas Raquel casi estaba comprometida para casarse y creia que era mi deber avisarle.

Pero algo dentro de mi me decia que ya era tarde, que nuestras vidas ya se habian separado, llevabamos senderos completamente opuestos que ya no podrían unirse pues, Mercedes estaba en medio de los dos con su odio hacia mi y su firme proposito de mantenernos separados.

No obstante esto, yo me convencia a mi misma de que cuando menos debia intentarlo.

Pensando en todo esto decidi ir a verlo en la primer oportunidad que tuviera, que no sería muy pronto pues tenía mucha ropa que coser y entregar de urgencia.












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Uno maaas ☺♥

Bendiciones. La cancion que recomiendo estará en la parte de arriba al iniciar el capitulo.

Por si necesitan los datos de la cancion:

Solo en ti- Evan Craft

El Yugo De Los Infieles. Autora: Evelina V. De FloresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora