Capítulo 17

232 21 1
                                    


Kara

"Horas antes de volver a casa de Lena"

Me fastidió muchísimo la llamada de Alex, pero era bastante importante. Cuando llegué a su casa, la vi que no paraba de moverse.

-Alex, ¿qué ocurre?

-Kara, no te lo vas a creer... ¿y yo que hago ahora? Es que no me lo podía imaginar...- La miré con cara de extrañada. Se paró, respiró hondo y me enseñó su mano, donde había un anillo. -Maggie y yo nos casamos.

-¡ALEX, ESO ES UNA MUY BUENA NOTICIA!¡CUÉNTA!

-Pues nos fuimos anoche a cenar, que estábamos las dos libres. Consiguió mesa en el restaurante nuevo que abrieron italiano. -Y que tenía pinta de caro pensé- y cuando pedimos los postres, nos trajeron como una especie de cajita de chocolate y cuando la rompí vi el anillo. No me lo podía creer Kara. -Yo estaba súper emocionada, mi hermana se iba a casar con la mujer que le gustaba.

-Alex, me alegro un montón. Estoy muy feliz por ti, de verdad. Te ayudaré en todo lo que pueda, podemos reservar el espacio de la playa para la ceremonia y luego el banquete... Alex, ¿qué pasa?

-No, no pasa nada.- Me senté con ella en el sofá- Es que... no se lo he dicho a mamá y no sé como reaccionará, y me gustaría conocer a los padres de Maggie e invitarlos, pero sé que no vendrían.

-Lo sé Alex... Bueno, siempre podéis ir a visitarlos y también conoces Buenos Aires que siempre la has querido conocer.- Le salió una sonrisa y me abrazó.

Estuvimos un buen rato hablando, tanto que no me di cuenta de que casi era la hora de cenar.

-Oh Alex, ya es tarde. Me voy a ir a casa

-Tengo una idea mejor. Maggie llegará en menos de media hora. Podemos pedir comida para las tres, abrimos un vinito y nos pegamos una buena cena de celebración. -Cuando terminó de decir esto, me puso ojitos lastimeros, unos ojitos a los que no me puedo resistir.

Pedimos unas cuantas pizzas y a los pocos minutos vino Maggie. Le abracé fuerte, estaba muy contenta por ellas. Lo celebramos abriendo varias botellas de vino, el cual a mi no me afectó pero a la parejita sí. Se quedaron dormidas en el sofá asi que, sin hacer ruido, ordené el salón y con mucho cuidado las metí en la cama. Al mirarlas me invadía una sensación de ternura. Estaba muy feliz por mi hermana porque al fin era feliz, pero por otra parte sentía un poquito de envidia. Salí volando de la casa de Alex y me paré un momento para ver la casa de Lena, que estaba en el balcón con una manta.


La mañana fue bastante aburrida. No había alienígenas a los que encarcelar y acabé rápido los informes y redacciones del día. Comencé la investigación de "A.L." buscando por internet esas siglas. Me aparecían industrias, medicamentos, aeropuertos; pero ninguna persona. Busqué por los informes de alienígenas y di con el clavo. Había varios alienígenas que afirmaron que un tal "A.L" los había sobornado para distribuir de todo (armas, drogas humanas, etc) e incluso a la creación de estas. También decían que tenía una rara obsesión por los alienígenas, tan rara que tenía "recuerdos" de los alienígenas derribados por Supergirl, tales como trozos de garras, aletas o joyas.

Seguí leyendo por unas tres horas. Deduje que tenía algo en contra de Supergirl (hice un repaso de todos mis enemigos y los escribí). Tuve que detenerme en el nombre y hombre más "temido" tanto por mi primo como por mi: Lex Luthor.

3 años antes

-Sabes que no puedes conmigo, siempre gano Supergirl.- Mis músculos ya no podían mucho más, y la kryptonita no ayudaba mucho.

-Sabes que no me rendiré Lex. Debes pagar por todo lo que has hecho. Por lo que has hecho a los ciudadanos, a mi primo e incluso a tu hermana Lena.

-¡No menciones a ese engendro! Menos mal que compartimos la mitad de la sangre, porque sino no sería de esta familia. No sé como con ella no tienes nada en contra, teniendo el apellido Luthor.- En ese momento que bajó la guardia, le di un golpe en todo el estómago haciendo que cayera.

-Porque tu hermana es mejor persona que tu y tu madre juntos. Al menos ella no ha intentado matar a mi familia.

Fue cuando apareció el dispositivo de DEO cuando respiré un poco más tranquila. Lo encerrarían junto a los alienígenas más fuertes en una cárcel subterránea y blindada.

Ya estando en casa, comencé a pensar en la boda de Maggie y Alex. Empecé a mirar restaurantes, trajes tanto para Alex como para mi, invitados,... Miré a mi izquierda y me encontré una foto en la que aparecían Maggie, Alex, Sam, Lena y yo. No podía parar de mirar a Lena, esa sonrisa, esos ojos... Tuve que parar, tuve que dejar la foto y darme cuenta de que llevaba al menos 10 minutos pensando en Lena, admirando esa foto. Ya me había convencido de que podían gustarme las mujeres después de lo de Vic, pero ¿por qué me fijo en Lena? Es bastante atractiva, eso está claro, pero...

Me quedé sentada en el sofá mirando las horas pasar, con la mente en blanco, y solo pensaba en ella. No me lo podía creer, no me quitaba de la cabeza. Aunque era de noche, salí para tomar el aire, lo necesitaba y mucho. Estuve andando y andando, con la música puesta. Primero "Se acabó el amor" de Abraham Mateo y JL (muy apropiada...), luego "Lo malo" de Ana Guerra y Aitana... hasta que sin darme cuenta caminé hasta la casa de Lena. Sé que era muy tarde pero tenía una idea que no podía quitarme de la cabeza y (como si fuera una película) le mandé un mensaje "Ábreme".

Me puse muy nerviosa, pensaba que o no estaría o me mandaría a dios sabe donde. Nada más abrir la puerta mi impulso fue besarla y guiarla al cuarto. Ella no opuso resistencia, más bien me siguió el "juego" y empezó a apretarme las nalgas. Una vez en su cuarto, Lena empezó a besarme todo el cuello y meter las manos por la camisa. Me separé un momento para verla. "No pienses" me dijo antes de volver a besarme mientras me acariciaba la espalda por debajo de la camisa. Yo no me lo podía creer. Nos quitamos las camisas mutuamente y pude ver su perfecto cuerpo. Era suave y delicado. La tumbé en la cama y me puse encima de ella. No quería dejar ni un solo centímetro de ella sin probar. Por cada pequeño mordisco, Lena suspiraba, y realmente me gustaba demasiado escuchar esos suspiros. De pronto Lena se movió de tal forma que ella terminó encima de mía.

-Lo siento, pero quiero jugar un poquito contigo...

Empezó a darme pequeños besos en el cuello bajando hasta que se chocó con el sujetador, el cual apartó y se divirtió con mis pezones mordiéndolos y succionando. No paraba de gemir y tocar a Lena, pero quería más. "No te dejaré" Siguió bajando hasta la cintura y poco a poco fue quitándome los pantalones. Estaba realmente avergonzada, me tapaba con el brazo porque no quería que me viera.

-Kara, ¿estás bien?- Dijo con voz temblorosa y suave. Asentí con la cabeza, porque no podía hablar. -¿Quieres que pare?

-N...no, estoy bien.- Me incorporé un poco y la miré, realmente estaba preocupada. -Es solo que... no pienses mal, no es mi primera vez, o sea con una chica si pero... me da un poco de vergüenza...- Lena se levantó y se quitó los pantalones. Nos movimos hasta donde estaban las almohadas y me quedé semisentada.

-No pasa nada que te tapes, pero...- Me miró de arriba a bajo en segundos- pero eres preciosa Kara. ¿Confías en mi?- Asentí con la cabeza sin perderla de vista- Si algo no, me lo dices.

Al terminar eso me besó en los labios mientras con una mano rozaba todo mi cuerpo. Puso la mano encima de mi lencería y empezó a moverla lentamente. Poco a poco me empecé a notar más mojada (y ella también lo notó) y con suavidad me quitó las braguitas. Empezó un camino de besos hasta llegar a mi centro, el cual empezó a lamer. Hasta yo notaba que mis suspiros eran un poco más fuertes. Siguió lamiendo, mordiendo y succionando, y poco a poco fue metiendo los dedos. Empecé a gemir más fuerte por cada movimiento de estos. Empezó a moverlos más rápido y cada vez más, hasta que rompí con un gemido fuerte. Me temblaban las piernas y nunca había sentido semejante "descarga". Lena se acercó a mi y me dio un beso suave en los labios.

-¿Estás bien?...- Asentí con la cabeza. Me costaba recuperar el aliento. Lena sólo me miraba. Nos recolocamos en la cama y me tapó con la sábana. Me puso la cabeza encima de su pecho. -Quédate a dormir...- La verdad es que estaba muy cansada y allí, con Lena, el sueño estaba llegando. -Intenta dormir, mañana será otro día Supergirl...

El secreto mejor guardadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora