-Si ya lo sabes no preguntes y solo gózalo- digo tomando su mano con una sonrisa. Su piel es muy suave a decir verdad.
El mira nuestras manos unidas y toma la mía para llevarla a sus labios, deja un suave beso en el dorso de mi mano. Mis mejillas se empiezan a calentar mucho.
Con la mano que el no tiene entre las suyas me la llevo a la cara para taparmela lo mayor posible.
-¿Porque te empeñas en hacerme sonrojar? -le pregunto con la mano aún en el rostro.
-Ya te lo dije, te ves hermosa sonrojada -el entrelaza nuestros dedos y sonríe, mira por la ventana y hace una mueca -¿es normal que haya tanta gente aquí?
-No, bueno, más o menos, creo que hoy tienen un evento en el primer piso -digo tratando de recordar los ingresos que estan registrados en el libro de cuentas que vi esta mañana.
-Entiendo.
Miro nuestras manos unidas y siento de nuevo ese cosquilleo en mis dedos, solo que esta vez esta acompañado de los latidos rápidos de mi corazón.
¡Relajate! No te conviertas en una historia cliché corazón.
-¿te incomoda? -la voz de Lucas me saca de mis pensamientos.
-eh, ¿que cosa?
-esto -presiona un poco la mano que tiene entrelazada con la mía.
Yo niego rápidamente, presiono mi mano con la de él.
—No es eso, solo que es un poco extraño—le digo.
—¿Que cosa? —pregunta él extrañado.
—el que esté sintiendo este cosquilleo tan rápido —Suelto casi que sin pensarlo.
Lucas luce sorprendido, mientras tanto, yo trato de entenderme.
Con Eliot me tomó cerca de dos meses poder sentir algo cuando me tocara la mano, pero Lucas, el es un caso muy diferente.
Por Dios, ¡Sólo han pasado 6 días!
Definitivamente, Lucas y Eliot, son polos completamente distintos.
—En pocas palabras ¿Te gusta? —el mira por la ventana.
—No te voy a mentir, si me gusta —el devuelve su vista a mi persona, tiene una sonrisa sincera en los labios.
—es bueno saber que el sentimiento es mutuo —el presiona un poco mi mano.
Yo le suelto la mano.
—Hey, no, dámela —el toma de nuevo mi mano. Mi corazón se agita de nuevo.
—¿No vamos a ir a cenar? —le pregunto con una ceja alzada, tratando de calmarme un poco.
—Si me puedo quedar así contigo, prefiero quedarme aquí toda una vida —desvío la mirada y dejé salir una risa nerviosa.
—Lucas... —mi voz salió un poco temblorosa.
—Esta bien, está bien, vamos —el suelta mi mano, siento un frío en ella al ser dejada por el calor de Lucas.
—Bien —digo, Lucas sale del auto y me abre la puerta, el me tiende una mano.
—¿Vamos, princesa? — tomo su mano gustosa.
Salgo del auto con mi cartera en la mano, Lucas pone los seguros al auto. Caminamos hacia el restaurante tomados de la mano, en un silencio a mi parecer bastante cómodo.
En cuanto nos acercamos a la puerta el guardia la abre para nosotros.
—Bienvenidos a Paradise Restaurant - es lo único que dice, nosotros entramos.
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60 Días para enamorarse /Pausado/
Roman pour Adolescents//PAUSADA// Emma y Lucas, son los únicos solteros en su grupo, no han conseguido pareja y sus amigos suelen burlarse de ello, Emma se ingenia un plan para que sus amigos dejen las burlas de lado, un plan que implica por mucho a Lucas, aunque, ¿será...