Peter caminaba de la mano de su querida novia, Gwen Stacy, una rubia de ojos verdes considerada la más bonita de su clase.
Ellos llevaban un año y medio de relación, luego de que Peter estuviera 2 meses intentando conquistarla. Pero el chico sentía que este último tiempo la rubia había estado muy distante con él.
Se detuvo en medio de la calle e hizo que su novia lo mirara. - Gwen ¿Hay algún problema? - se atrevió a preguntar el castaño -estos últimos meses te he sentido distante y un poco rara, solo quiero saber si todo está bien entre nosotros, amor.
Gwen miro a su novio un poco nerviosa - claro que sí bebé ¿Por qué habría de estar algo mal entre nosotros? - envolvió el cuello de su novio con sus brazos y lo besó -tranquilo tontito. Todo está bien entre nosotros, no te preocupes.
- está bien, ya no me preocuparé. - abrazo a Gwen por los hombros y siguieron caminando.
Del otro lado de la ciudad estaba Michelle Jones, más conocida como spidergirl. Con su ajustado traje, su cabello rizado en una coleta y una máscara que cubría la mitad de su rostro, debido a su cabello no podía usar una mascara completa. Había pensado muchas veces en cortarlo, pero sabía que se arrepentiría así que lo mejor era dejarlo tal y como estaba quedando sin más opción que usar su amada máscara que dejaba la parte inferior de su nariz y su boca al descubierto
La castaña se convirtió en una super heroína luego de haber sido mordida por una araña radioactiva convirtiéndose así en la heroína más conocida de Queens, estaba patrullando por la ciudad combatiendo el crimen y golpeando villanos. Esto le encantaba: sentir la adrenalina de balancearse por los edificios, descargar su enojo con los delincuentes que se lo merecían y poder ayudar a todo aquel que lo necesitaba.
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Luego de dos semanas Peter se dirigía a casa de Gwen con un batido y unas Donuts que había comprado recientemente para acompañar a su novia, ya que su padre al ser policía pasaba mucho tiempo fuera de casa. Llamo a la puerta pero su novia al parecer no escuchaba, sabía que estaba en casa porque podía escuchar levemente la música que ella tenía en su cuarto.
Abrió la puerta, ya que Gwen tenía la costumbre de dejar siempre la puerta abierta y entró, subiendo las escaleras en silencio para sorprender a su chica.
- ¡Amor! Traje un bati... - la bolsa de las Donuts junto al batido cayeron al suelo luego de que el chico viera a su novia a horcajadas encima de un tipo besándolo, se notaba que estaban recién comenzando y que Peter los había interrumpido - ¿Qué carajos? - estaba sorprendido, enojado y triste al mismo tiempo.
- ¡Peter! - Gwen se levantó rápidamente de encima del chico y se acercó a su novio ¿O mejor dicho ex novio? - amor, no es lo que crees ¡Te juro que puedo explicarlo!
El chico la miro de la forma más fría que podía - está bien, explicame ¿Qué mierda significa todo esto? - sabía perfectamente que ella no le explicaría nada, después de todo era obviamente lo que parecía, ella lo había engañado.
- yo... mmm... yo solo estaba ¡Estábamos! - tal y como lo pensó ella no sabía que decir.
- exacto, no tienes ninguna explicación porque no hay nada que explicar ¡Me estás engañando maldita sea! - sin darse cuenta había comenzado a gritar por la rabia que tenía - se acabó, no dejaré que me sigas viendo la cara de estúpido. -
Se dio media vuelta y salió de la habitación de su ex novia mientras está lo seguía por las escaleras.
- ¡Peter! Amor por favor no te vayas ¡No puedes dejarme! ¡Yo te amo! - Gwen Stacy estaba desesperada intentando convencer a Peter para que no la dejara.
